capitulo 4

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- Sabas amigo, que gusto tenerte por aquí, hace demasiado tiempo que no te veía.

- Estoy en la cuidad y pensé que visitar a un viejo amigo, así que aquí me tienes.

Sabas se sentó en el sofá de cuero que estaba en mi oficina y nos pusimos a platicar de todo y nada a la vez, era muy bueno verlo después de hace mucho tiempo.

- Y dime Nicolás ¿por fin haz encontrado a alguien? Te estas volviendo viejo amigo.

- Que cosas dices Sabas soy más joven que tu, pero respondiendo a tu pregunta, he estado viendo a una señorita, es muy linda.

- Que gusto amigo, espero que esta vez esa jovencita sea la indicada.

- Hay algo que me dice que si lo es.

Después de aquella charla Sabas se fue y al darme cuenta de la hora salí rumbo a mi casa para comenzar a arreglarme para mi cena de hoy. Al terminar salí directo a casa de Eleanor, cuando me estacioné en la puerta de su casa salí del auto y toqué dos veces la puerta, no pasó ni un minuto cuando la vi parada en el lumbar de su puerta con un vestido muy elegante negro que se moldeaba a la perfección con su figura, su cabello perfectamente recogido y un maquillaje que hacía ver sus ojos más llamativos que nunca, se veía muy hermosa.

- Buenos noches Eleanor se ve muy hermosa.

- Muchas gracias Nicolás, usted también se ve muy bien.

Seguimos chalando en el auto, su compañía era muy agradable, la cena estuvo de lujo, todo era muy elegante y en todo momento hubo tema de conversación, Eleanor era muy inteligente y linda. Al terminar la lleve a su casa quedamos en vernos para nuestra segunda cena.

Un giro de la vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora