Besos del Paraíso.

Miedo a perderlo todo.

Hyun joong conducía el vehículo de su pequeño novio, mientras el nombrado iba a su lado con el asiento reclinado, Kyu jong ya le había administrado un medicamento para aliviar el dolor de cabeza, aquel que taladraba su cabeza cada vez que alguien le hablaba.

Al llegar a la mansión le pidio a Miri la ama de llaves que prepara una cena liviana mientras Young saeng se daba un baño.

- Puede preparar una cena liviana? Saengie viene con un intenso dolor de cabeza - Hyun se sacaba la chaqueta.

- Tuvo un mal día el joven Saengie? - Pregunto Miri, dama de avanzada edad, siempre había estado con Saeng desde su llegada a la casa, 30 años al servicio de la familia Heo.- Siempre cuando pasan cosas que no logra entender salen sus intensos dolores, tengale paciencia a mi niño, joven Kim.-

- Si Miri tranquila, ha estas alturas ya estoy tan enamorado, que podría hacer cuanto berrinche quiera y yo estaría aquí esperándolo con la misma cara de estúpido con la que lo miro cada mañana -  ambos se reían cuando Young saeng bajo las escaleras con un pijama afranelado.

- Esta bien mi niño?- pregunto Miri, lo miraba fijamente, lo conocía como la palma de su mano, pero debía preguntar.

- Miri tranquila, ya estoy mejor, Kyu me dio una pastilla, con el baño y estando ya en casa el dolor ya se fue. - Saeng abrazo a Miri y le dejo un beso en la frente - Nos sirves la cena? ....Amor te quedas hoy conmigo? - miraba a su novio con ojitos aguados.

- Claro amor, Miri cenas con nosotros? - Hyun miraba a la dama mientras ella servia los platos de acompañamiento.-

- No joven, esperare a Hani, fue por los trajes a la lavandería, no tarda en volver va con Jingyoung , sabe que aquí aparte de mayordomo, jardinero y chófer hace muchas cosas mas. -

- Miri sabes que me gusta cenar con todos ustedes, son mi familia, los conozco desde siempre .- Saeng hacia pucheros tiernos. 

- Lo se mi niño, pero hoy es día de lavandería, tenemos horarios semanales, nos acostumbramos así, su madre trabajaba de esa manera con nosotros, Hani lleva 15 años aquí, Jingyoung 10 , por hoy solo cenara con el joven Hyun, prometo que sera la ultima vez que cenaran solos. - Miri sonreía y alzaba la mano para prometer, mientras ponía frente a Saeng un pocillo con arroz.

La cena transcurrió tranquilamente, efectivamente Hani la dama del servicio llego poco después con el mayordomo, mientras terminaban de poner en orden los trajes, los novios terminaron de cenar, subieron a la habitación de Saeng, mientras Hyun se daba un baño el mas bajo puso una suave melodía y bajo las luces. Desde hacia unas semanas había dejado de ser completamente su habitación, ahora Hyun prácticamente vivía con el, de los 7 días de la semana dormían juntos 4 o aveces toda la semana, dependía del trabajo que tuviera acumulado el abogado, los días en que tenia demasiado dormía en su casa, decía que no quería importunar a su novio. Se sorprendió cuando pensaba que ya la mitad del closet le pertenecía a su novio, el mismo Saeng se había encargado junto a su cuñado de comprar algunos trajes y de trasladar otros, compro pijamas y distintos tipos de prendas de vestir para su novio, se reía solo cuando recordaba el primer día de compras con Kyu, en todos los trajes imaginaba a su bien parecido novio. Tanto pensar y recordar cosas, termino quedándose dormido sobre la cama, cuando Hyun joong regreso del baño ya con la pijama puesta, sonrió al ver la tierna imagen de su pequeño príncipe dormido, lo cargo entre sus brazos y lo acostó como corresponde, se acomodo a su lado y sin dejar de abrazarlo, apago la luz y se durmió, no sin antes volver a agradecer a Dios y a sus padres por haber enviado a tan bello ángel a su vida.

A la mañana siguiente Saeng despertó asustado, pues la alarma no había sonado y estaba seguro que llegaría atrasado y Kyujong lo regañaría, cuando intento sacar las manos de su novio de su cintura este lo atrapo con aun mas fuerza.

- Donde vas pequeña nutria? - Hyun aun semidormido con los ojos aun cerrados.

- A la oficina, la alarma no sonó, estamos atrasados, tu hermano nos regañara. - respondió abrazado a Hyun joong.

- No te dejo, hoy es sábado no trabajamos, tan estresado estas que hasta olvidas los días de la semana?- 

- Lo siento, volvemos a dormir?-

- Es una orden o una pregunta? -

- Una orden - Young saeng se reía mientras acomodaba su cabeza entre los brazos de su novio, no tardo en dormir nuevamente.

Cerca de medio día despertó, mientras se desperezaba se dio cuenta que estaba solo en su cama, aun en pijama bajo las escaleras, Miri preparaba el almuerzo , Hani limpiaba junto a ella, en la terraza Hyun charlaba con Jingyoung.

- ....Hágame llegar los documentos, lo resolveré por usted, no sera complicado, en menos de 1 semana tendré todo en orden, no se preocupe no sucederá nada. - Hyun tomaba café cuando vio que Young saeng se acercaba.

- Hola cariño, sucedió algo?- pregunto con mucha curiosidad.

-Buen día, joven, solo le hacia una consulta al joven Hyun, mi hermana perderá su casa por una estafa de un banco, no sabemos que hacer y no tiene donde ir, tiene 4 hijos y esa casa es el fruto de mucho esfuerzo de ella y su esposo. - Jingyoung empleado multifuncional de la mansión, esposo de Hani, tenían un hijo de 8 años quien los fines de semana estaba con los abuelos, Young saeng aveces estaba con el pequeño y lo ayudaba con algún deber de la escuela.

- Oh, puedo ayudarlo en algo? - se preocupo de inmediato.

- No cariño, le decía que me hiciera llegar los documentos del banco, no es algo complicado, en menos de una semana lo soluciono, hace unos años a Kyuhyun también lo estafo un amigo, pidió un préstamo a un banco para ubicar una clínica, pero desapareció con el dinero y dejo en prenda la casa de Yesung, afortunadamente tiene un esposo abogado, Yesung arreglo todo, nos encontramos en la corte una vez y me contó lo que había sucedido. - 

- Que bueno, en todo caso si puedo hacer algo por usted, solo me avisa. - Saeng miraba cariñosamente al hombre frente a el, mientras el asentía agradecido.

El resto del día transcurrió muy tranquilo, entre caricias, besos y sonrisas, vieron películas y descansaron mucho, jugaron con Ji ho , el hijo de Hani, hasta que se quedo dormido en la alfombra de la sala, antes de que lo llevaran a la casa interior del personal, le hicieron mucho cariño y soñaron con que algún día irían a la casita de chocolate y adoptarían a un pequeño, eso les hizo mucha gracia, ya se imaginaban casados y con una gran familia.