Oidos

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No fue hace mucho que era normal. No fue hace mucho que intentaba componer música para alguien especial que no existía. No fue hace mucho que me da miedo lo que escucho.

Claro que no fue hace mucho, fue hace cuatro años atrás, cuando tenia 12 años un día cualquiera donde solo estaba estudiando y escuchando música para concentrarme mejor, es complicado tener que prestar atención a dos cosas para hacer bien una. Por un momento deje de estudiar porque sonaba una canción y a la cabeza se me venia una melodía con la que soñaba que podía ser un próximo gran hit mundial. Por mi mente pasaba el coro del gran excito del verano cuando todo fue mal.

Fue horrible. Todo sonaba muy alto, demasiado. en un oído sentía el sonido tan grave que mi corazón se acoplaba con este y me iba aturdiendo poco a poco y en mi otro oído escuchaba algo peor que cualquier chirrido de un tenedor en un plato lo que me desorientaba y hacia que me asustara. Por los nervios y la presión de lo desconocido el aire me fue faltando y la conciencia la iba perdiendo. Caí al suelo golpeandome la cabeza pero mi cuerpo siendo amortiguado por las sabanas desordenadas que habían en mi habitación.

Aunque este debería ser el fin del episodio no lo fue. Antes de que abriera del todo los ojos esos sonidos volvieron, intercalándose uno con otro en mi oído haciendo que volviera a quedarme sin aire Era lo suficientemente lista para la respuesta que me darían una vez pagado el medico. El golpe en la cabeza convirtió, a lo que fuese que me pasara en los oídos, en una enfermedad permanente.

Me duele mucho recordar todo esto,

este era parte del drama innecesario en mi vida

esto arruinaba mis sueños

El saber que la enfermedad fue por mera culpa mía

aunque ni estaba en condiciones para pensar bien

solo a una idiota se le ocurre salvar su cuerpo antes que su cabeza.

Bueno, aunque no fue de las mejores historias de la vida les aseguro que es mi peor pesadilla que piensa que todo lo que amas, se vuelva tus temores de un rato para otro?

Pese a que lo intentara con las mis canciones favoritas, las más armoniosas incluso con mi propia voz. Todo se volvía en la misma pesadilla, un desparrame de tonos, volúmenes y pasión, todo revuelto en mi cabeza girando y girando. Para mi suerte... si es que se puede decir esos malditos audífonos para sordos silenciaban los asquerosos visitantes en mi cabeza.

Fue raro tener que vivir con ellos puestos.. menos en la ducha, ese era mi único periodo diario que en que tenia que tolerar los horribles sonidos del agua. Aunque sin esa practica seguro que hubiera vuelto una asocial sin quererlo.

Y así fue mi vida. tuve que aprender a leer los labios lo que fue muy difícil ya que nunca me gusto mirar a la gente. No lo digo por ser psicológicamente extraña, lo digo por ser de naturaleza introvertida. Si alguien empieza la conversación puedo tomarle el ritmo rápido, pero definitivamente el primer paso no lo puedo hacer yo. Para mi suerte nunca me cambiaron de escuela, a si que siempre tuve a los mismo compañeros con los que de alguna manera, pese a no hablar mucho, me sentía segura. Ya habían pasado 4 años y nunca ninguna hizo alguna broma sobre ello.

Así llegue a los 12 mas 4 años que tengo hoy. Mi adolescencia supongo que es tan normal como podría ser. a veces salgo a fiestas y consumo alcohol... ahora también me preocupa de una manera muy depresiva mi relación morosa, con mucha suerte tenia compañeras con las que matar el tiempo pero mejor amiga o novia o novio nunca. Pero ahora si estaban mis ojos bien abiertos.

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⏰ Última actualización: Oct 06, 2019 ⏰

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IDK me parecio una buena idea y a ver si ojala gano plata con estoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora