Frente a la cámara (Yoonmin) 📷

‪Cap. 2 📷

Hoy es un día normal en la panadería, se acabaron los roles de canela, las donas glaseadas acaban de salir del horno, y en estos momentos me encuentro preparando mi nueva receta de galletas de chocolate con menta y chile ¿extraño? Sí ¿delicioso? Por supuesto que sí.

Tengo un libro lleno de recetas de este tipo, amo combinar sabores dulces con salados y parece que los clientes también aprecian mi trabajo. Me gusta lo que hago pero este sentimiento de querer hacer más, nunca se va.

La campanilla de la puerta me saca de mi ensoñación y me veo obligado a dejar lo que estoy haciendo para ir a atender a quien sea que haya entrado, me limpio las manos con el mandil y salgo con mi mejor sonrisa

-Buenos días señora Lee ¿lo de siempre?

-Buenos días Jiminnie, siempre tan amable, llevaré 3 de esas donas tuyas, mi hija está de visita y sé que le van a encantar.

La señora Lee suele venir todos los días por su ración de donas glaseadas, ella y su esposo parecen no tener suficiente de ellas.

-Aquí tiene señora ¿le puedo ofrecer una de mis nuevas donas de tocino con vainilla y relleno de maple? He tenido muy buenos comentarios sobre ellas.

-Oh querido, tú sabes que yo encantada de probar todas tus maravillosas creaciones, ponme 3 para llevar por favor, nunca son demasiadas donas para nosotros.

Me dijo con una enorme sonrisa mientras sacaba su monedero y me tendía el dinero exacto.

-Aquí tiene.- Le entregué sus donas en una bolsa de papel. -Agregué unas de sus galletas favoritas para usted y su familia.

-Muchas gracias pequeño. Nos vemos mañana temprano.

-A usted señora Lee, mándele mis saludos al señor Lee y su hija.

-Lo haré, saludos a tu linda familia.

Y esas fueron sus últimas palabras dentro de la tienda, metí el dinero a la caja y me dispuse a regresar a la parte de atrás cuando escuché la campana de nuevo

-Buenos días, en que pued...

No terminé la frase ¿Como podría recordar siquiera como respirar con mi youtuber favorito frente a mi eligiendo una de mis donas especiales?

Alguien pellízqueme por favor.

Estoy seguro de que me veo como el mayor acosador del planeta, mi mirada no se despega de él y cada movimiento que hace se queda grabado en mi cerebro, su cabello azul grisáceo se ve tan suave como en sus videos y sus ojos gatunos inspeccionan mis donas como si estuviera haciendo la decisión más importante de su vida.

Me armo de valor, respiro contando 3 segundos y voy a su encuentro, después de todo esta es mi tienda y debo atenderlo ¿verdad?

Llego a una distancia prudente y después de recordarme a mi mismo que es sólo una persona, como yo, me decido a hablarle

-¡Hola! ¿E-en qué puedo ayudarle?

Ok salió mejor de lo que esperaba.

Sin siquiera voltear a verme apuntó la sección de mis donas especiales y preguntó

-Manzana con papa y pimienta, Pollo y mostaza, jitomate con arándano y chocolate ¿A quién se le ocurren estos sabores tan... únicos?

Bueno, eso no me lo esperaba.

-amm, en realidad a ¿mi?

-¿me estás preguntando o afirmando?

Al fin volteó a verme

-A-afirmando, yo soy el repostero de toda la sección de sabores especiales.

Bien, eso estuvo mucho mejor.

me inspeccionó con la mirada unos segundos y continuó hablando

-¿Así que esta panadería es tuya? Te vez demasiado joven ¿cuántos años tienes?

¿Por qué me ofende su pregunta? Dejando atrás el nerviosismo contesto con seguridad

-La panadería es de mi familia pero prácticamente yo la atiendo solo y tengo 24, no creo que sea demasiado joven para atender un negocio por mi cuenta.

Levantando una ceja me miró y regresó su atención a las donas

-ok niño de la panadería, voy a estar por aquí un buen tiempo y sinceramente tengo mucha curiosidad por tus donas, hoy me llevaré una de manzana con papa y pimienta y si me convence - en ese momento regresó su mirada a mi, poniéndome nervioso de nuevo- vendré por más.

Se alejó para que yo pudiera tomar una de las donas y caminó directo a la caja mientras seguía hablando

-Así que, a juzgar por tu mirada de ciervo encandilado, sabes quién soy.

Esa no fue una pregunta.

-A-amm pues sí ¿quién no sabría quién eres?

Tal vez soné un poco rudo, pero es la verdad.

-Cierto, pero ese es el problema, vine a este pueblo para no ser reconocido y al primer local que entro lo hacen.

Dijo mientras rascaba su coronilla cansado.

-Sin ofender pero ¿P-por qué alguien no querría ser reconocido?

Se inclinó hacia mi  al punto que podía oler su colonia y contestó mirándome directo a los ojos.

-Ser famoso no es lo que muestran las cámaras, lindo.

Me sonrojé, estoy seguro de que parezco un tomate.

-B-bueno, si tu intención es que no te reconozcan ¿por qué no te haces un cambio de look? -intenté desviar la conversación- cualquiera te podría reconocer solo por tu cabello.

Regresó a su postura relajada fuera de mi espacio personal y pareció pensar mis palabras.

-Creo que tienes razón ¿sabes de algún buen lugar para teñirme el cabello? no quiero que se maltrate mucho.

No tuve que pensarlo mucho.

-De echo, sí. Mi amigo Jin es el mejor peluquero de la ciudad, hace maravillas con el cabello.

Pareció juzgar mi cabello y preguntó

-¿Él es tu estilista?

-Si, es muy profesional.

Aún con la mirada sobre mi hizo un ruido de aprobación y habló de nuevo.

-Muy bien, me convenciste ¿me podrías dar su número para agendar una cita?

Sacando mi celular procedí a dictar el numero mientras él lo anotaba en su teléfono, y una vez le entregué su dona, dió la vuelta y volteando a verme por última vez dijo.

-Nos vemos, lindo. Gracias por la dona.

Me guiñó el ojo, salió de la tienda y al fin pude respirar.

Esto estuvo muy raro.