PROTOCOLO: OLIMPIA

Acto 1 Capitulo FINAL: "El Futuro Está Preparado".

Clade

Las Estaciones han sido inutilizadas, solo les falta una. El chico me está siendo más util de lo que pensaba, incluso me ayudó por voluntad propia, debería pensar en llevarmelo.

Las cenizas de ese volcán me están asfixiando, pero no me importa, pronto llegaré a la playa donde los soldados podrán verme.

Esos chicos deben estar constantemente preguntandose por que diablos hago esto, je je, en verdad no saben nada... Nada de nada.

Piensan que esa maldición llegó a ellos sin llevarse a nadie en el camino, todo descubrimiento tiene sus experimentos... Y los experimentos a sus ratas de laboratorio.

Aún lo recuerdo...claramente, esas mierdas no se olvidan. Hace años, cuando no tenían esas malditas maquinas y lo mejor que podían hacer por nosotros era darnos una inyección.

Una inyección... Una cosa tan pequeña... A veces decide si mueres, o vives
... O también si quiere que vivas deseando la muerte.

Ese día mi padre estaba al otro lado de la ventana, un hombre que vivía para darle un futuro seguro a sus hijos, pero ese día decidió que sus hijos fueran "el futuro".... "El futuro de OMEGA".

"Clade Gullveig - Categoría: SHINATOBE (japonés)   Rango: - -"

Estaba con otros 3 en esa sala... Mi hermana, un chiquillo escuálido y su hermano mayor. En ese momento pensaban que la compatibilidad familiar era la solución para soportar el tratamiento.

Mi padre manejaba la situación al otro lado del cristal, el confiaba en que aguantariamos el proceso, así que procedió con el experimento:

Estaba amarrado a la camilla y escuché a mi padre decir: "Procedan con la inyección de #001 RA (egipcio)".

Mi hermana fue inyectada, nuestras camillas estaban cerca...ella tomó mis dedos para sentirse segura. Mi inyección fue retrasada, seguía en el laboratorio.

"Procedan con la inyección de #003 MIMIR (nórdico)" y luego su hermanito escualido: "Procedan con la inyección de #004 ARES (griego)".

Se escuchaba el temblor en la voz de mi padre, su sudor era notable, pero no injustificado. El pobre bastardo no tenía la culpa, no sabía lo que iba a suceder.

Nunca supe mucho de los hermanos, solo que tuvieron la suerte de vivir una vida mas "normal", pero en el otro extremo del cuarto había un destino horrible.

No sé que sucedió, pero mi hermana emanaba el destello más grande de mi vida, con ella también lo hacían la punta de mis desdos a los cuáles se aferraba. mi mano ardió como el mismisimo infierno hasta que mi brazo era una deformidad.

Mucho de lo que pasó después no importa, excepto la condición de mi hermana. Mi padre no tenía tiempo para poder ocuparse de su situación, los asuntos internos de OMEGA eran demasiado importantes para él.

Cuando la pude ver... Era indescriptible, demostraba en su cuerpo que la avaricia de poder del humano no era más que la razón de su propia destruccion... Cuando llegó el momento de decidir, todo el peso cayó en mis manos. Solo espero que el otro mundo la trate mejor de lo que lo hizo este.