Aniversario

2

Derek suspiró y entro a cocina donde sabía que lo esperaba Stiles, se aseguró que la casa estuviera sola a excepción de ellos dos. Cuando entró a la cocina vio a su esposo sentado en la barra con una taza entre sus manos mirando por la ventana de la cocina, estaba perdido en sus pensamientos.

Derek lo analizo muy meticulosamente, estaba más delgado, tenía unas ojeras muy marcadas y los ojos rojos evidencia de que había estado llorando, le dolió y se sintió culpable.

Estaba claro que Stiles lo sabía desde hace mucho y ese dolor lo estaba lastimando mucho.

Vio el momento exacto en el que Stiles se dió cuenta de su presencia.

—no te voy a quitar mucho tiempo solo quiero una cosa de ti — hablo Stiles sin mirarlo.

Derek paseo la vista por toda la cocina sin saber que estaba buscando...el desayuno, su esposo siempre le tenía listo el desayuno a pesar de que tenía meses que no probaba bocado en su casa, hoy la cocina estaba limpia su esposo no le había preparado el desayuno.

—y qué será eso qué quieres de mí Stiles —preguntó después de de mirar la cocina durante un buen rato.

—simplemente quiero que firmes estos papeles, ya yo los firme sólo hace falta tu firma y que los hagas legales— dijo Stiles entregándole un sobre qué Derek no había visto —ya no puedo más, aguante cuánto pude, te di mucho tiempo para que hablaras conmigo pero me cansé, me cansé de esperarte— susurro con la mirada fija en la ventana.
Derek no daba crédito a lo que escuchaba, ¿Así sin más?
¿Sin peleas, sin gritos, sin lágrimas?
eso parecía pero su esposo le estaba demostrando que era mucho más fuerte de lo que creyó.

—así nada más? —preguntó después de un tiempo en silencio.

—¿Qué, quieres que llore, te pregunté porque lo hiciste? Yo sé esas respuestas Derek, te enamoraste eso lo entiendo, me duele pero lo aceptó. Sabía que no serías eternamente mío; simplemente me duele que no tuvieras el valor suficiente de decirmelo a la cara— Stiles le contesto sin mirarlo ni una vez, pues sabía que si lo hacía se rompería y no quería que lo viera llorar, que lo viera destrozado.

—no sé qué pasó Stiles, no sé en qué momento deje de quererte —le dijo Derek.

—ya no importa sólo tienes que firmar y tú decidirás cuando le dirás a tus hijos que te vas de la casa, quiero que sea lo más pronto posible es lo único que te pido.— Stiles suspiró mientras tomaba un sorbo de café.

Derek miró el sobre que se encontraba sobre la barra de la cocina sólo tendría que firmar y sería libre de su matrimonio podría irse con la mujer que amaba, ¿Pero porque tenía un mal sabor de boca?
Miro nuevamente a su marido tan sereno y calmado como él no lo era.
Sólo ahora se daba cuenta cuánto cambio Stiles, ya no reía, no cantaba, ya no sonreías, era una sombra del hombre del que se enamoró y sabía que todo era su culpa.
le dolió el corazón darse cuenta del daño que le estaba haciendo.

—date prisa, debes ir a trabajar, firme y esta misma tarde tendré tus maletas listas — Stiles lo miro por primera vez. Y maldición sus bellos ojos ya no brillaban como solían hacerlo,  otro detalle que había ignorado.
Ahora se daba cuenta de que su esposo lo supo desde el principio.

Derek se acercó a su esposo. Noto como ya no se estremecía, como ya no aguantaba la respiración como cada vez que se acercaba, todo había cambiado por su culpa todo había acabado.

Suspirando firmo los documentos creyó que iba a sentirse aliviado, pero eso no pasó. Tenía un mal sabor de boca quería coger a su marido estrecharme en tus brazos rogar su perdón y hacerle el amor como hace mucho no lo hacía.