Capítulo 03
No estaba segura de si decirle a Brad lo que planeaba hacer o no. Él era muy maduro y amargado respecto a ese tipo de cosas y estaba completamente segura que no me dejaría hacerme un tatuaje.
Pero por ahí dicen que no pierdes nada con intentar. ...
—Em, Brad —llamé su atención. Él levanto la cabeza y me miró esperando a que dijera algo— Con todo este asunto de que moriré, pues, yo encontré un pequeño diario que tenía cuando era pequeña y en él escribí algunas cosas, hice como una lista…
— ¿Que escribiste en esa lista? —preguntó llevándose a la boca su vaso con soda.
—Son un par cosas que le gustaría hacer antes de morir, cariño —explicó Abigail por mi —Cosas como hacerse un pequeño tatuaje y viajar a Londres y…
— ¿Un tatuaje? ¿Ir a Londres? —repitió con asombro— no habría tiempo para ir a Londres, y jamás te dejaría hacerte un tatuaje. _______, iremos de hospital en hospital hasta que alguien sepa algo de tu enfermedad, hasta que alguien tenga una cura. No podrás estar distrayéndote en estupideces.
—No son estupideces —intervine— y créeme, no planeo andar de hospital en hospital. Brad, si tengo que morir, moriré y ya.
—No sabes lo que dices —se quejó negando con la cabeza— no harás nada de esas tonterías y esa es mi última palabra.
Me desperté al día siguiente puntualmente a las 7:00 am como de costumbre. Debería arreglarme para ir al colegio, pero no tenía ganas, decidí que me aprovecharía un poco de mi situación para no ir a la escuela, y si podía, para no limpiar la casa ni mi habitación y tal vez para conseguir cosas gratis.
Pero en eso tendría que trabajar después. Traté de levantarme de la cama sin levantar a Abigail que como siempre estaba desparramada tomando más lugar en la cama. Me lavé la cara y me puse solo una blusa blanca larga y un short negro.
Tomé el diario y sin maquillaje ni nada salí a dar una vuelta al mismo parque del día anterior. Era bonito y a esa hora estaba completamente solo. Me senté en el tallo de un árbol, y abracé mis rodillas.
Quería hacer todos los puntos de mi lista, todos. Y uno de ellos era escaparme de casa…
No, ni siquiera tenía que pensar en eso porque sabía que no lo haría nunca, digo, lo haría si no fuera tan cobarde, pero no me atrevería a dejar solo a mi hermano porque aunque él tuviera a Abigail, yo era la única familiar que le quedaba.
Saqué mi viejo diario y repasé los puntos de nuevo deteniéndome en cada uno a pensar las posibilidades. Tener un baile romántico bajo la lluvia sonaba tentador, podía pagarle a algún tipo desconocido para que bailara románticamente conmigo. Ser amada en pocos meses sería muy, muy difícil. Porque no me refería al tipo de amor que te tienen tus amigos o tus familiares.
Yo quería que alguien me amara de verdad, como mujer.
“18-encontrar al chico de mis sueños (siguiente pagina)”
Extrañada le di la vuelta a la hoja.
“El chico de mis sueños”
1- Bonitos ojos. (De preferencia color azules o quizá verdes)
2- Una linda risa, que me haga reír.
3- Que sea tierno con los niños.
4- Que me trate bien, como a una princesa.
5- Que me haga sonreír cuando estoy triste.
6- Que nombre una estrella con mi nombre.
7- Que me escriba una canción de amor.
8- Que me enseñe a tocar la guitarra y a andar en patineta.
9- Que me dé su chamarra cuando tenga frío.
10- Que se ría de mis chistes aunque no sean graciosos.
11- Que esté alto.
12- Que me cuente todos sus secretos.
13- Que robe dulces conmigo.
14- Que no le de vergüenza llorar enfrente de mí.
15- Que sea de Londres.
16- Que cometa locuras conmigo.
17- Que me diga “princesa”
18- Que sea mi mejor amigo.
19- Que me diga muchas cosas hermosas.
20- Que me ame.
21- Que se quiera casar conmigo.
Solté una fuerte carcajada triste al terminar de leer eso.
¿Wow _____ no pides nada más? Hasta el color de ojos estás exigiendo.
Me limpié las lágrimas y volví a reír fuertemente, siempre fui un poco exigente. Seguí riendo como imbécil en el parque, no me importo que la muchacha que pasó corriendo me mirara raro, ni me importo que el chico que estaba de espaldas a mi volteara.
Oh, dios el chico es Niall, cállate tonta, cállate. Solo por una vez, Dios mío ¿Podrías ayudarme para no hacer ninguna estupidez frente a los chicos guapos?
Al verlo algo se movió en mi interior y cuando él me sonrío no pude evitar sonreírle de vuelta como toda una tonta.
Se acercó a mí.
—Hola ¿Me puedo sentar contigo? —preguntó con su hermoso acento que me dejó en las nubes un segundo.
— ¡Claro, claro! Toma asiento —le contesté estúpidamente, me moví un poco y Niall se sentó a mi lado, acercó su cara a la mía y besó mi mejilla tiernamente.
Oh Dios, estoy tan nerviosa, nuestras piernas se están rozando ¿Acaso él lo nota? ¿Por qué no la mueve solamente? ¿Le gusta tocar mi pierna o qué? Parezco una tonta, bueno, de hecho soy toda una tonta.
— ¿Qué haces aquí tan temprano? —le pregunté sonriendo, básicamente no podía dejar de sonreír.
—Siempre me despierto a esta hora —contestó encogiéndose de hombros— aún no me acostumbro al cambio de horario.
— ¿Es muy diferente la hora de aquí a la de Londres?
—solo unas… Diez horas, más o menos —se me quedó mirando fijamente, intrigado. Me sonrojé y bajé la cara un poco. Él me tomó la barbilla y me levantó la cara de nuevo, por un momento pensé que me besaría— ¿Has estado llorando?
—no, para nada, yo… Eso solo que…—mi mente lenta trataba de pensar rápido en una respuesta. No quería quedar como una llorona.
—no sabes mentir ¿Te lo habían dicho? —se burló tiernamente.
Suspiré y asentí débilmente.
—sí, sí me lo han dicho y sí, estaba llorando —admití agachando la cabeza.
Sus brazos me envolvieron de repente sin ningún aviso aparente y mi cabeza quedó aplastada en su pecho.
Mi nariz se inundó rápidamente con su perfume adictivo y mi cabeza empezó a dar vueltas y vueltas.
—No llores —me pidió en un susurro.
Casi me da un tic nervioso en el ojo.
La combinación de tener a Niall susurrando en mi oído con su acento tan sensual y mi nariz enterrada en su cuello con su aroma tan perfecto no era nada bueno, a quien engaño, claro que era bueno, mucho más que eso.
Suspiré de gusto.
—no me gusta ver a las chicas llorar. Sé que no nos conocemos casi nada pero siempre es bueno desahogarse —se separó de mi y se sentó donde estaba antes. Me miraba con ternura. — ¿Me contarías que anda mal?
—Es complicado —contesté en un susurro, pero tomé aire para contarle de todos modos— hace poco, ayer más bien, me dijeron que tenía una enfermedad terminal…
— ¿Terminal? Ósea que… —él me veía con los ojos bien abiertos del asombro.
—Sí, moriré —Niall se quedó con la boca abierta. Movió sus perfectos labios un par de veces sin emitir sonido. —Bueno, aun no se sabe si moriré o no pero eso es lo más probable. Es que es una enfermedad casi desconocida.
—Dios quiera que no… —murmuró.
—sí, pero, ese no es el problema. El problema es que… Cuando estaba pequeña hice una lista de cosas que quería hacer antes de morir. Le conté a mi hermano y él solo me dijo que no podría hacer nada de eso, que tengo que estar mis probablemente últimos meses de vida de hospital en hospital.
—eso es horrible.
—lo sé, yo solo quiero hacer unas cuantas cosas, que ni siquiera son tan difíciles.
— ¿Cómo que cosas?
—como hacerme un tatuaje, escaparme de casa, irme a vivir a Londres…
— ¿A Londres? —preguntó divertido.
—Si, quería eso desde mucho antes de conocerte a ti —reímos.
—No, tú solo quieres estar cerca de mí —se burló.
—de acuerdo, me descubriste...____________________________________
les dejo con la intriga ok no
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La Lista Perfecta (Niall y tu) Terminada
RomanceLa Lista Perfecta (Niall y tu) Terminada No es mia la novela es de una pagina de Facebook Si quisieran adaptarla o modificarla solo avísenme Espero que les guste :)