9🥀

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Dos semanas después...

Por suerte pude comprar una puerta y armar un poco mejor de lo que estaba mi casa. Ya podía volver tranquilamente, pero Daniel no me dejaba.
Hoy Victoria me va a llevar al ginecólogo a pedido de Daniel, algo que a Viqui le pareció raro y esta preocupada desde que Daniel le pidió eso sin darle ninguna explicación.

-¿No se cuidaron? Ya están grandes tienen que saber cuidarse a la hora de tener relaciones. -me dijo Victoria cuando ya estábamos en el auto.

-Viqui, Dani y yo nunca hicimos nada tranquila.

-¿Y entonces?.

-Daniel piensa que después de lo que me hizo mi papá pude haber quedado embarazada... espero que no sea eso. -dije con un hilo de voz y con los ojos llenos de lágrimas.

-Por favor no saquemos conclusiones antes de tiempo Pili... tranquilízate ¿si?. -asentí.

(...)

Entramos al hospital y esperamos a que me llamen, cosa que hicieron rápido ya que había poca gente.

-¿Cuál es el problema?... -Victoria lo llevo un poco más lejos para contarle sobre mí problema y poco tiempo después vino doctor a revisarme.

-Lo lamentó chicas... si estás embarazada. -me largué a llorar de vergüenza y salí corriendo del consultorio para encerrarme en el baño.

-Pili abrime, si no querés tenerlo yo te ayudó, vení hablemos preciosa, no llores. -dijo Viqui del otro lado de la puerta.

-¡NO LO QUIERO POR FAVOR SÁQUENME LO QUE ME METIÓ ESE HOMBRE DENTRO MÍO! -grite aun llorando en el bañó.

-Vení Pili, por favor, vamos a casa y nos tranquilizamos un poco.

-Por favor Viqui ayúdame, yo no quiero esto. -dije abriendo la puerta del baño aun llorando y abrace a Viqui.

-Si mi reina vamos a ver que podemos hacer...

(...)

Volvimos a la casa de Daniel y yo no podía dejar de llorar.

-¿Qué pasó? -dijo Daniel preocupado saliendo de su pieza.

-Tus teorías eran ciertas hijo...

-No no, loco, Pili la puta madre no puede ser, que te hizo ese monstruo, merece que lo caguen bien a piñas y que le rompan bien roto el culo adentro de la cárcel.

-Dani, cálmate hijo la alteras a ella.

-¿Qué vamos a hacer ma?.

-No se Dani, ya veremos. Anda a descansar Pili, ahora te llevo un té para que te relajes -ordeno Viqui y le hice casó.

(...)

Me dormí, necesitaba no pensar en nada. Pero las pesadillas no tardaron en llegar despertandome cada dos segundos. La cara de mi papá en el momento que me estaba violando y mis gritos aparecían en mi mente a cada rato, y lo más trágico ahora, es que estoy embarazada de algo que no quiero tener y que necesito sacármelo.
Traté de poner mi mente en blanco y así dormir tranquila. Y por suerte lo logré.

Me desperté bañada en sangre, no entendía absolutamente nada, salí corriendo al bañó, preocupando muchísimo a Daniel y a Victoria que vinieron corriendo cuándo me vieron correr al baño. Me senté en el inodoro y largué un coágulo de sangre gigante seguido de el feto, que claramente se distinguía entré toda la sangré.

-Viqui por favor vení -dije abriendo la puerta, Viqui entro y miro el inodoro, no tardo en tirar la cadena.

-Vamos al hospital... báñate. -le hice caso y me bañé tal y como ella me lo dijo.

(...)

-¿Mamá vos tuviste algo que ver con eso? -dijo Daniel subiéndose al auto y Viqui asintió.

-Dani yo se lo feo que se siente eso. Vos sabes lo que me paso a mi cuando era adolescente, y lo que tuve que hacer arriesgando mi vida para no tener el bebe.

-Pero ma, vos le tenés que avisar a Pilar primero.

-Pero se iba a tomar el té con miedo y no iba a funcionar.

-Igual yo no lo quería tener Dani. Iba a buscar la forma de sacármelo...

-¿Y a que vamos al hospital? -preguntó Daniel nervioso.

-Para que le hagan un lavado de útero...

(...)

En el hospital me dijeron que no necesitaba eso, le explicaron bien a Viqui, mientras yo salía a tomar aire, sentí unas manos en mi cintura y me di vuelta asustada, me relaje al ver que era Daniel, lo abrace yo también y me dio varios besos en la cabeza.

-Al auto amores... -dijo Viqui y nosotros nos subimos corriendo.- Pili, es increíble lo importante que te hiciste en nuestras vidas, enserio, nos enseñaste un montón de cosas desde que apareciste. Y te voy a prometer que te voy a cuidar y a proteger siempre, quiero que sepas que no estas sola y que nosotros somos tu familia. -se me llenaron los ojos de lágrimas y la abrace antes de que arranque el auto.

(...)

Ayude a limpiar a Dani y cambiamos de colchón por otro que tenían guardado, es solamente hasta mañana que lavemos el colchón manchado. Después del largo día y de los disgustos me acosté junto a Daniel.

-Por suerte el problema ya paso... vení acércate mas a mi que hace frío. -me acerque como me pidió y lo abracé. Y como nunca me paso, sentí mariposas en el estomago al sentir su piel junto a la mía, lo mire durante unos segundos, por primera vez vi a Daniel con otros ojos que no son de amistad, y realmente me preocupé.- ¿pasa algo? -dijo al sentirme temblar.

-No... tranquilo. Hasta mañana -me separe de el y me di vuelta, pero el no tardo en darse vuelta hacía mi lado y abrazándome causandome escalofríos.

-Pili estas temblando. ¿Qué te pasa? ¿Te preocupa algo? -negué y cerré los ojos para dormir y no dejar de pensar un poco. Con Dani alado mío me siento mas protegida y siento que así puedo dormir más tranquila.

𝐹𝑟𝑎́𝑔𝑖𝑙 𝑐𝑜𝑚𝑜 𝑢𝑛𝑎 𝑅𝑜𝑠𝑎 -𝐷𝑎𝑛𝑖 𝑅𝑖𝑏𝑏𝑎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora