Capítulo uno

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Al ver esa casa quedé fascinada, era perfecta para nuestra familia. Espaciosa y con un toque de modernidad, hasta me atrevo a decir que sentías el espíritu hogareño en ella, o eso creía.

-mamá-Andrew, mi hijo, me llamó la atención, cuando giré a verlo me preocupe pues lucia completamente descompuesto.
-¿Qué pasa hijito?-me agaché para tomar su rostro con mis manos-¿Te sientes mal?
-no quiero estar aquí, vámonos-suplicó con los ojos llorosos
Miré a una de mis hijas mellizas, estaba absorta mirando la esquina del living en el que estábamos, me pareció un poco extraño pero decidí no darle importancia.
-¿Por qué te quieres ir? ¿No te gustaría ver la que será tu habitación?-él niño negó mirando frenéticamente hacia todos lados, como si hubiera algo que lo estuviera incomodando
-pheebs-volteé encontrando a Robbie, quién venía con nuestra otra pequeña en su espalda-¿Qué te parece la casa?
-yo...-miré a Drew, realmente no se veía bien.-quizás sea mejor que lo hablemos en el departamento
-¿Por qué?-su vista cayó en nuestro hijo y lo entendió-entiendo ¿Quieres que te cargue Drew?
-no soy un bebé, papá-su humor cambió, ahora se veía molesto

Decidimos salir y fue cuando Drew pareció calmarse, pero eso no impidió que le agarra un ataque de ansiedad.
-no quiero estar aquí-lloró entre mis brazos mientras intentaba contenerlo
-¿Qué es lo que viste?-preguntó Robbie agachándose a su altura
-no lo sé, solo sentí una presión muy fea en mi pecho y a alguien llamarme por mi nombre pero no era ninguno de ustedes, la voz que sentí era muy... lúgubre-explicó entre hipidos y balbuceos
-eso es todo, nos vamos-subimos al auto y nos marchamos de ahí.

...
-¿Robbie tu sabias que él... había sentido algo?
-pues si-suspiró con fuerza mientras se sentaba en la cama ya listo para acostarse-no te lo he dicho pero, en mi familia hay un gran linaje de médiums,o gente con capacidad para percibir cosas que no están aquí.
-¿Tú.... tú tienes el don?
-no, y lo agradezco sé que no es nada fácil convivir con eso-se pasó una mano por la cara-mi hermana ha visto y sentido cosas que no te puedes ni imaginar.
-mi bebé-murmuré afligida al pensar en Drew
-no te preocupes por él, estará bien-se acostó y me abrazó, le diré a Camilla que lo ayude.
-¿Y qué pasará con la casa? Me gusta mucho y siento que es perfecta para nosotros.
-habrá que hacer una limpieza, porque te aseguro que la casa será nuestra-dijo con firme determinación.

Esa misma noche, la pasamos pésimo y les explicaré por qué.
A eso de las tres de la madrugada me despierto por un grito de la habitación de Drew, no lo pienso dos veces y me levantó para ir por él, pero al levantar la vista hacia la puerta veo por el rabillo del ojo la cortina moverse ligeramente y sin ningún tipo de brisa que pudiera haber en la habitación.
No le doy muchas vueltas pues supongo que a lo mejor fue mi imaginación, así que me dispongo a ir hacia donde estaba mi hijo, no llegó ni a tocar el picaporte de la puerta de Drew cuando oigo una voz, una voz que me llamaba por mi segundo nombre, él cual nadie sabia a excepción de mi familia y Robbie.
-¿Amor? ¿Eres tú?-pregunté mirando hacia mi habitación, pero no obtuve respuesta.
-¿Mami?-giré y me encontré con Penny media dormida rascandose unos de sus ojos.
-¿Qué haces aquí Penny? ¡Ve a dormir!-murmuré suavemente
-soy Lexy-me miró molesta, odiaba que la confundiéramos.
-lo siento amor, ve a dormir-insistí
-no puedo, alguien me estaba observando desde la puerta-bien, eso logró asustarme.
-¡Robbie!-grité
-¡Qué! ¡Qué!-y luego de eso se escuchó un golpazo
-Papá se cayó-rió la pequeña
-Alexia, no te burles-tuve que taparme la boca ya que me estaba contagiando.
-¿Qué pasó?-llegó hasta nosotros cojeando ligeramente
-hay...-miré a la niña-ve a tu habitación, cariño.
-pero mamá-reprocho
-ve a la nuestra-suspiré abatida
-esta bien-corrió hacia donde le había indicado que fuera
-hay algo aquí-dije finalmente
-¿De qué hablas?-frunció el ceño tomándome entre sus brazos y rodeandome con ellos.
-alguien me llamó por mi segundo nombre, Alex dijo que vio a alguien observandola desde la puerta y la cortina de nuestra habitación se ha movido sin ninguna corriente de aire- creo que la ansiedad me estaba ganando.
-tranquila, en la mañana traigo a Camilla, para que nos diga que pasa.
-ve por Penny y yo por Drew, no van a dormir solos-decidí
-no entramos en la cama y además no creo que...
-¡Mamá!
-Andrew-entré a la habitación y me encontré a mi hijo tembloroso en su cama, como si hubiera visto algo que realmente lo aterrorizó.-¿Qué pasó cariño?-me senté junto a él y acaricié su cabello
-un hombre, un hombre-repitió frenéticamente
-¿Cómo era ese hombre?-Robbie se acercó
-no le vi facciones y ni nada, solo su sombra-miró por toda la habitación con inquietud-¿Puedo dormir con ustedes?
-claro-acepté.

Al día siguiente a primera hora, Robbie fue a casa de su hermana y la trajo casi a rastras.
-¡Wow!-la castaña miró a su alrededor y luego se quedó en Andrew-Andrew, ¿Qué viste?
-la silueta de un hombre observandome al pie de mi cama, ¿Qué significa tía?
-Alex vio lo mismo-recordé tomando café de mi taza para despertarme completamente
-si, puedo sentirlo-se quedó al pie de las escaleras-¿Qué es lo que quieres?-le preguntó a la nada, se hizo un silencio incómodo-el niño no puede ayudarte y lo estas espantando.
-Drew-la voz lúgubre sonó en toda la casa como un murmullo casi imperceptible
-sacalo de aquí, Robbie-dijo sin siquiera voltear-y también a las niñas.
-vámonos hijos-tomó a las niñas en brazos ya que estaban completamente dormidas y salió por la puerta con nuestro hijo pisándole los talones.
-¿Qué es lo que...?-un ruido seco de algo cayéndose en la planta superior nos espanto a ambas
-tu también deberías irte Phoebe-sugirió mirando intranquila las escaleras como si hubiera alguien.
-no creo que dejarte sola sea-otra cosa cayó pero esta vez detrás nuestra, una foto mía con Drew recién nacido.
-¡Vete!-no lo dude y salí hacia el portal del edificio donde Robbie estaba en uno de los sillones con las niñas y Andrew.
-¡Pheebs!-saltó del asiento al verme, despertando a Penny
-¿En dónde estamos?-miró a su alrededor-es el portal-y se volvió a dormir.
-¿Qué pasó?-pasó un brazo por encima de la niña
-Cam se quedó sola haya arriba, las cosas se empezaron a caer solas-los ojos se me llenaron de lágrimas.
-tranquila-suspiró-no puedo abrazarte
-esta bien, no te preocupes-pasé mis brazos por sobre mi pecho con incomodidad, esta situación no me gustaba para nada.
-lamento todo esto, jamás quise que Andrew...
-no es tu culpa-lo corté-no estaba bajo tu control
-pero sabia que iba a pasar, pues yo no tengo tales dones-se puso histérico-si los tuviera, mi hijo no estaría así.
-o quizás si, no puedes estar seguro-miré hacia afuera, era temprano y apenas había gente.-por favor tranquilízate, te necesito, y necesito que estés tranquilo, por nosotros, por mi, por tus hijos.

....
Holaaaaa!!!
¿Qué les está pareciendo? ¿Qué creen que vaya a pasar?
¿Les gustaría otro capítulo?

Espero que si, nos leemos!

The House ~Robbie Kay~ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora