Capítulo 11

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- ¡Anda Mitch, entremos ya! Qué lento eres.- dijo ella halando mi brazo para entrar a la feria.

- ¿De verdad quieres venir a una feria?- pregunté cansado.- Podemos ir a la playa o-

- Tú perdiste la apuesta.- me interrumpió.- Hoy me tienes que servir.- sonrió.

- Bien...- suspiré.

- Anda, que nos toca entrar.- le dio la entrada al portero.- El último en entrar es gay.- entró corriendo. Tenía un hermoso brillo de ilusión en sus ojos, como una niña pequeña, es hermosa. Entró a un lugar que estaba muy oscuro, sólo se veían luces rojas por todos lados.- Empecemos con un juego de tiro.- dijo divertida y me haló a los vestidores.

Nos pusimos chalecos negros y gafas de visión nocturna y me dio un arma. Al salir un tío nos explicó que era un juego virtual donde los disparos eran luces, si disparábamos al oponente en la espalda, cabeza o pecho ganábamos un punto y una vida extra. Erin me haló y me llevó donde habían otros 50 jugadores más, ambos nos separamos y sonó una alarma que indicaba el inicio del juego.

El juego iba genial hasta que un chico le disparó a Erin por la espalda, y créanme que cuando digo que ella sabe defenderse, sabe defenderse en serio.

- OYE TÚ PENDEJO.- le gritó.- DISPARAR POR LA ESPALDA ES PARA ABUELITAS.

- Pero si es una chica.- dijo él riendo.- Anda a hacer pastelitos y déjanos jugar en paz.

- PASTELITOS TE HARÁ MI COÑO.- le respondió y todo el lugar se silenció.

- Uy, la rosita se enojó.

- Ahora verás quien se enojó.- dijo ella y se lanzó sobre él. Lo golpeaba mientras le gritaba. La seguridad apareció y la arrastraron fuera del lugar.- ¡NO HE ACABADO CONTIGO!- le gritaba.

~~~En la cafetería~~~

_______.

- Vaya, no sabía que te defendieras tan bien.- dijo Mitch mientras comía sus patatas fritas.

- Cuando me provocan reciben lo que quieren.- dije encogiéndome de hombros.- Le di una enseñanza que nunca olvidará.- rió.

- Creo que con que lo hayas dejado sin futuras generaciones es suficiente.- reí.- ¿Dónde aprendiste a golpear tan bien?

- Digamos que mi madre no era una mujer muy pacifista que digamos.- dijo y reímos.

- Ya, que el tío necesitará cirugía para ser un humano y no un tumor andante.- reímos más fuerte.

- Vamos, que los juegos nos esperan.- dije terminando mi comida y halándolo del brazo.

Mientras corría vi una cabina fotográfica y me detuve en seco, todos mis recuerdos volvían.

- Erin, ¿estás bien?- preguntó Mitch preocupado.- Te detuviste en seco.

- Yo...Estoy bien.- me sequé la lágrima que había brotado y sonreí.- ¿Quieres ir a algún juego?- le pregunté.

- La rueda.- sonrió.

- ¿Algún otro juego?

- ¿Por qué?

- Nada, es sólo que no me apetece.

- Le tienes miedo a las alturas, ¿no?

- No.- respondí mirando a otro lado.

- Erin...

- Bueno sí.- dije resignada.- Le tengo terror a las alturas, ¿feliz?- dije enojada.

It's Like I'm Sleepwalking (Oliver Sykes y _____)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora