Felicidad Efímera

420 63 3
                                    

—¡Espera Hyung! —Gritaba susurrando inquieto cuando jaló de mí hacia aquella desviación escondiéndonos —¿Qué haces? —Rodó los ojos.

—Besarte, tonto —Me tomó de las mejillas acercándose y antes de que llegara a mis labios coloqué ambas manos en su pecho.

—¿Aquí?

—Sí

—Pero los chic­- —Me interrumpió besándome —Los chicos nos- —Otra vez -Venimos con —Una vez más —¡Hyung!

—Ellos siguen caminando sin darse cuenta de nuestra ausencia, y aquí nadie nos verá —Volvió a hacerlo y esta vez no interrumpí más —Y es tu culpa

—¿Mi culpa? —Fruncí el ceño —¿De qué?

—¿Por qué tienes que sonreír de esa manera? ¿Eh? —Entrecerré los ojos fulminándole.

—¿Y ahora no puedo? —Va, con cualquier palabra suya me sonrojaba pero esta vez no quería que viera lo tonto que me vuelve.

—Por supuesto —Llevó ambas manos a mi cintura acercándome —Pero sólo a mí me sonreirás así y no a YoonGi —Di un golpe en su hombro.

—Tonto —Me solté de su agarre y comencé a caminar. Los chicos iban un poco más adelante, y tal como lo había dicho HoSeok, sin darse cuenta de nuestra ausencia.

—¡Hey! —Se quejó —Déjame tenerte cerca —Le regresé a ver y presionaba sus labios. Parecía un niño al que no le dan el dulce que quiere —Sólo he podido ver y no tocar —Le miré directamente y sin dejar de hacerlo comencé a caminar apresuradamente hacia él quedando a poca distancia.

—¿Quieres tocar? —Intimidándole me acercaba más y como bobo asintió. Tomé una de sus manos y la llevé bajo mi playera. Dejándola unos cuantos segundos ahí. Sonreí internamente al sentirle temblar. Asintió como respuesta a mi pregunta —Pues luego será

—¡TaeHyung! —Se quejó cuando me alejé de él para darle la espalda y dar unos cuantos pasos. Era como una venganza a sus juegos y bromas que me hacía regularmente.

Desafortunadamente yo no podría seguir con eso por tanto tiempo. También quería tenerle cerca. Me giré sobre mis talones yendo hacia él. Rodeándole por la cintura. Abrazándole fuertemente. Correspondió haciéndolo de la mis manera. Escondiendo su rostro en la zona de mi cuello.

—Te voy a extrañar... —Susurró.

—Vamos Hyung, no me recuerdes eso ahora

—Lo siento, no puedo evitarlo

—Yo también lo haré... —Suspiré pesadamente escondiéndome en su pecho. Atrayéndolo más hacia mí y él haciendo lo mismo.

Quedando ambos así por un rato más en silencio. Olvidándonos de que íbamos acompañados.

—TaeHyung...

—mmm —Mis ojos estaban cerrados. Solo concentrándome en el sentimiento que me provocaba sentirle cerca.

—Esto... ¿Se va a terminar? —Abrí los ojos separándome un poco para verle.

—¿Y-yo no-

—Yo tampoco —Se apresuró a decir. Sabiendo mi respuesta —Las posibilidades de volver a vernos son muy cortas, pero...

—No quieres terminarlo —Negó y bufé —Entonces, ¿Qué pasará? Me volveré loco si estoy consciente de que esto no se acabó y no puedo tenerte cerca

—Si nos volviéramos a encontrar... Tal v-

—¡Ustedes dos! —Una tercera voz nos hizo separar sobresaltados. Suspiramos de alivio al ver a Jin ir por nosotros y tomarnos de las manos. Haciéndonos caminar junto a él —No me vuelvan a dar estos sustos, cuando no los vi me dejaron con el corazón en la mano, no les cuesta nada avisarnos

Vimos a los demás esperándonos un poco más adelante y nuestras miradas se buscaron como otras veces mientras caminábamos siendo distanciados por el mayor. No quería pensar en el poco tiempo que quedaba, sólo quería estar más a su lado. El no verle por un momento me hacía sentir que ya le extrañaba, lo que había entre ambos había crecido, había algo más íntimo, algo que sólo los dos conocíamos, nos habíamos unido más. Y el sentirlo, el pensarlo, me llegaba a provocar cierto miedo, ¿Cómo sería mi estado si por alguna situación le llegase a perder? ¿Qué tan mal me pondría? No quisiera imaginármelo.

—Hyung —Tomé su mano y le alejé de mis amigos mientras se despedía de ellos —Vamos

—¡Hey! ¿A dónde? —Al regresar a verle por unos segundos pude notar una leve sonrisa en sus labios.

—No lo sé —Me encogí de hombros, y no mentía. Soltó una pequeña risita.

—Tonto

—No tienes que recordármelo ¿Sabes?

—Ya lo sé, pero tengo que hacerlo porque me divierte —Me detuve y le fulminé con la mirada.

—Anda ven, ya sé a dónde ir —Y ahora fue el quién comenzó a guiarme. Y creía saber a dónde se dirigía.

—Vaya, creí que los fines de semana este lugar estaría lleno de adolescentes

—Pues creíste mal, por lo regular vienen entre semana, después de clase —Caminó fuera del área de la cancha y se sentó en el pasto con las piernas cruzadas. Me senté a su lado. El silencio entre ambos reinó, no había algo que decir, pero me sentía completamente en paz.

Fue momentos después que recargué mi cabeza en su hombro, él al instante besó mi frente fugazmente. Pasamos lo que restó de la tarde juntos, mi cabeza recargada en su regazo o él rodeando mi cintura con ambos brazos...

Durante ese tiempo mi cabeza no se llenó de pensamientos, ni de recordatorios de que en cualquier momento a ese chico ya no lo tendría a lado, en mi cabeza es como si estuviera ya fijada la idea de que al siguiente día lo vería y así sería con los siguientes. No sé si eso fue bueno o malo, creo que fue bueno, porque disfruté el momento, el último. Porque en la mañana del día siguiente, mi madre se encargó de sacarme de ese sueño agradable para recordarme la realidad, tenía que irme, era yo el que tenía que irse primero pero ya, faltaban días para que lo hiciera HoSeok, se suponía que esos los pasaríamos juntos, se suponía que las cosas serían así. Desafortunadamente las cosas no salen siempre como uno planea.

—TaeHyung...

—¿Porqué? —Trataba de no soltarme a llorar, sentado aun en la cama.

—Es por ti hijo, no lo hago porque ya no quiero que le veas, quiero protegerte... Estarás mejor con los abuelos... ¿No querías eso? —Asentí levemente ya dejando escapar algunas lágrimas —De todas maneras ya...

—Ya no le veré —Terminé la frase amargamente y vi en su mirada que se había arrepentido de si quiera haber pensado en mencionarme eso.

—Tu padre llegará pronto, sabe perfectamente lo que pasó, por eso mismo viene ya, no quiero que te haga daño....

—¿Y usted? ¿No viene?

—Si no ve a nadie se pondrá aún más loco

—¿Sabe que no se molestó conmigo por...? —Asintió —Pero le hará daño a usted mamá, si sabe que está de acuerdo...

—No, no lo permitiré —Acunó mi rostro entre sus manos, mirándome con ese cariño que tanto había anhelado.

—Mamá...

—Arregla tus cosas, te ayudaré, anda rápido

¿Mejores Amigos? / HopeVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora