Margaritas De Verano

Deslumbrante, cálido y hermoso, así es como todos describían el atardecer en Etheria, pero mientras unos tenían la dicha de poder disfrutar esa vista, la reina de Bright Moon, Glimmer, estaba tan inmersa en sus asuntos reales que no tenia tiempo de detenerse a mirar ese bello regalo que la naturaleza del mundo le proporcionaba.

La guerra con la horda había terminado, las princesas ganaron y Fright Zone había sido desmantelada totalmente, repartiéndose así varios de sus ciudadanos por todos los reinos, por lo menos los que desistieron en dominar Etheria, ya que varios Hordianos habían sido encarcelados por no cambiar sus ideales ante los ganadores de la guerra.

Todo era paz en Etheria justo ahora, pero los deberes reales de una reina nunca terminan, desde que la reina Angella murió Glimmer se vió obligada a tomar la corona, volviéndose así la nueva gobernante de Bright Moon; cada día estaba llena de tareas que atender y problemas que tratar, lo cual la agobiaba inmensamente, ya que no contaba con tiempo para dedicarse a ella misma.

Mientras Glimmer estaba sumergida en sus tareas Adora entró a la oficina, que era mas bien una habitación que Glimmer adaptó para ser una, parecido a lo que su madre hizo al adaptar una habitación como celda, lo cual no era necesario ahora, ya que Glimmer implementó prisiones.

- ¡Hola Glimmer! ¿Como va tu día hoy?- Preguntó Adora emocionada.

- ¿Cómo crees que va mi día hoy?- Respondió Glimmer con un tono cansado mirando a Adora muy irritada.

- Mmmm ¿Bien? - Cuestionó Adora alargando aquella "E" tal vez demasiado de forma nerviosa.

Glimmer la miró enojada, a lo cual Adora sólo desvió la mirada.

- ¿Qué necesitas Adora?- Preguntó Glimmer seriamente.

- Eh, sí, bueno, Mermista, Bow, Sea Hawk y las demás chicas quieren salir a tomar malteadas ¿Vienes?- Dijo Adora con emoción en su mirada.

- Sabes que no puedo, tengo muchas cosas que hacer, tal vez en otra ocasión- Contestó la pelirosa desanimada.

- No llevará mucho, además lleva tiempo que no...- Hablaba la rubia cuando de pronto fue interrumpida.

- Adora...Lo siento, pero no iré- Habló Glimmer firmemente pero aún con tono de tristeza.

- Bien, entiendo, ten un lindo día...reina- Soltó Adora al salir de la habitación.

Decepcionada la rubia tomó su camino hacia el punto de reunión estipulado por todos. Ahí se encontró con Mermista, Sea Hawk y Perfuma, quienes esperaban parados afuera del peculiar local de malteadas, Mermista estaba contra la pared con sus brazos cruzados, mientras Sea Hawk estaba apoyado en esta misma pared de una forma muy coqueta a lado de Mermista, como era de costumbre. Perfuma sólo miraba la peculiar escena entre ambos riendo un poco.

-¡Ya está aquí! - Dijo Perfuma emocionada.

-Sí, perdón por la tardanza- Contestó Adora un poco avergonzada.

- ¿Dónde están Glimmer y Bow?- Preguntó Sea Hawk con entusiasmo en su mirada.

- Bow debe estar en camino, aseguró que vendría, pero Glimmer, bueno, ella no pudo asistir hoy, ya saben, cosas de reina supongo- Soltó Adora un poco triste pero aún entusiasmada.

-Esa chica se toma demasiado en serio su posición, quiero decir, mirame, yo salgo cuando quiero- Respondió Mermista.

-Es cierto, pero ella quiere dar lo mejor de si- Adora sonrió al decir esto, dándole la razón de ser a su amiga.

-Si tú lo dices...Cambiando de tema, ¿Cómo van las cosas con Catra?- Cuestionó Mermista con tono juguetón en sus palabras, mientras Sea Hawk y Perfuma la miraban con interés.