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Hace exactamente siete días desde que Jimin se había mudado a Quintolen, y hace cuatro que había entrado a esa nueva escuela. No estaba tan mal, de hecho, ya tenía amigos y buena reputación con los maestros. Sólo había una cosa que por alguna razón no lo dejaba quieto.

La famosa Kim YoonJi.

Esa chica de cabellos cortos y oscuros, con ojos tan fríos y que con una mirada de ellos, eras capaz de caer a sus pies en menos de un segundo. Esa chica era tan conocida y desconocida a la vez. YoonJi lo tenía embobado desde esa primera vez que la vio.

Jimin estaba entrando al salón ese primer día de clases, no había nadie a excepción de una chica. Esta estaba sentada hasta el fondo mirando por una  ventana, mientras rascaba con nerviosismo su brazo. Eso le confundió, ya que la niña se veía insegura, ansiosa y temerosa, sin embargo, al notar que Jimin estaba ahí, cambio totalmente a una mirada irritada y oscura.

El día en que Jimin se enteró que YoonJi en realidad era prima de su amigo Jungkook, no perdió el tiempo y le pidió que lo presentara. Quizá había sido una mala idea. Si antes tenía pocas esperanzas de ser su amigo, ahora esas esperanzas estaban por el subsuelo. Jimin suspiró desganado.

-- Ohh, vamos, Chimchim. YoonJi es una imbécil, así es ella, no lo tomes tan personal -- y es que tampoco lo entendía, él no quería sentirse mal. No es  como que antes nunca hubiesen rechazado su amistad. Aunque digamos que Jimin tampoco habló mucho, estaba muy asustado y nervioso. Debió ser más valiente.

-- Le diré a YoonJi que le dijiste imbécil, imbécil -- acusó Jungkook a Hope, ésta se levantó y comenzó a golpear a Jungkook. Jimin por alguna razón levantó la vista, chocando su mirada  con la de YoonJi, quien lo miraba seriamente hasta que se dio cuenta de que Jimin también la miraba, entonces giró su rostro hacia cualquier otro lado fingiendo demencia.

YoonJi no era imbécil. Sólo era confusa, y nadie se atrevía a intentar entenderla.

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-- ¡Papi! -- YoonJi sonrió al ver a Jin en la sala. Dejó su mochila en el suelo y corrió a sentarse junto a él.

-- ¡Hey! ¿Porqué tan animada hoy?

-- Nada en especial -- la mirada de su padre prácticamente la obligó a soltarlo todo -- No quiero ir a casa de tía Jeon hoy.

-- Oh no, no no. Irás y punto -- Jin sabía a donde se dirigía aquella conversación. Cada lunes, los Kim salían y visitaban a los padres de Jungkook, y cada lunes YoonJi rogaba no ir. Jin quería que al menos su hija le dijese el porqué de su negación.

-- Pero... -- la pelinegra suspiró y se levantó, subió a su habitación y ya ahí... -- ¡AHHHHHHHHHH!

¿Porqué su padres no entendían? Jungkook era un pedazo de mierda y aunque YoonJi era igual, no es como si pudiese arrancarse de sí misma. Tenía tantas ganas de golpear a ese cara de... de... ¡Ni siquiera había un insulto que le quedara!

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-- Entonces, aquí está el baño y por allá el cuarto de invitados. Listo, vayamos con mamá -- Jungkook caminó a la sala con Jimin detrás de él.  Había sido invitado por el menor a su casa y su madre le pidió mostrarle la casa mientras ella, Hope y Taehyung terminaban de preparar la cena -- ¿Ya vienen mis tíos?

-- Sí, ya llamaron, vienen cerca -- Jungkook asintió mientras ayudaba junto a Jimin a poner la mesa.

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-- Papi... -- Namjoon la miró... él era un hombre fuerte ¿verdad?

-- No, Yoon. No vas a chantajear a tu padre. Oh mira, ya llegamos -- Jin le sonrió y bajó del auto rápidamente.

-- Yo... tu padre manda, YoonJi, lo siento -- Namjoon se bajó segundos después. Ya que...

-- ¡Hola! -- ¿su tía sobreactuaba, o así era de exagerada? YoonJi aguantó las ganas de hacer un gesto de disgusto cuando su tía  Ji Eun le dio un beso en la mejilla como saludo -- Pasen, si no les molesta Kookie invitó a sus amigos.

¡¿QUÉ EL CARA DE ANO QUÉ?

-- ¿A-amigos? -- apenas salían las palabras de su boca. No podía creerlo... No podia-

-- ¡Que sorpresa, primita! -- Jungkook apareció en su rango de visión, y no tienen ni idea de las cientas de ideas de como matar a aquel rabano andante le pasaron por la cabeza a YoonJi.

-- Hey, primito -- la pelinegra sonrió, y ese gesto fue lo que hizo que Jungkook saliera corriendo de ahí lo más rápido posible.

-- ¡Son tan adorables! YoonJi, en el cuarto de Kookie están los chicos, ve a jugar con ellos -- JiEun le sonrió, no podía ser una grosera frente a sus amados padres. Así que sólo caminó a la habitación del rabano como su tía le indicó.

-- Es un idiota, voy a matarlo -- abrió la puerta negra que decía "私は同性愛者です" estúpido otaku -- He llegado, homosexuales raros.

Lo primero que vio fue a Jungkook y Taehyung sentados en la cama. Uh, cuánta tensión sexual, pubertos hormonales. Luego a Hope junto a... el niño raro nuevo y aparentemente gay.

-- YoonJi -- saludó Hope, para luego volver su vista a el chico raro-nuevo-gay.

-- ¿Quien te dijo que podías entrar? -- dijo molesto, Kook. YoonJi entrecerro sus ojos irritada.

-- Ji Eun.

-- Pues dile que yo no te quiero aquí -- YoonJi levantó su ceja, ¿enserio la hicieron subir escaleras para nada?

-- ¿Porqué no vas y se lo dices tú mismo? -- se cruzó de brazos desafiante.

-- P-por que... me da pereza bajar escaleras, duh -- YoonJi sólo giró y cerró la puerta de golpe.

-- ¿Lo ven? Es una idiota -- Hope negó con su cabeza.

Jimin estaba aún más  confundido ¿por qué le hablaban asi? ¿Por qué a YoonJi no le importaba?

Pero ninguno sabia, que quizá en el baño estaba encerrada una pequeña y lastimada niña. Quien molesta, lastimaba sus mejillas tratando de quitar aquellas asquerosas e inútiles lágrimas.

Quizá YoonJi no quería aceptar que en realidad sí le importaba.


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-Blume dice bai-

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