Amor en tiempos de guerra

Capitulo 2

— ¡Agárrenla!— grita uno de los soldados.
Brinco de la cama y me acerco a la ventana intentando mantenerme los más alejada posible de los soldados.
— ¡papá! — gritó con fuerzas.
Uno de los soldados ríe y saca su arma.
— ¡traigan al traductor!— vuelve a decir gritando el soldado nazi.
A su orden llega otro soldado alto de cabello rubio y cejas oscuras, era un hombre muy guapo. Se acerca y el soldado le dice un par de cosas en el oído. Al escucharlas el soldado dice.
— Tu padre va de camino a Polonia junto con los demás generales sovieticos que hemos encontrado.
El soldado para un momento y voltea a ver al otro. este le hace un gesto para que prosiga traduciendo del aleman al ruso lo que este quería que me dijera.
— te llevaremos al cuartel aleman donde serás prisionera de guerra— dice volteando al suelo.
Creo haber estado tan distraída en el procesamiento de lo que ocurría que no note cuando dos soldados me tomaron de los brazos y me arrastraron de mi casa.

— gracias Ancel por brindarnos con tu apoyo, eres un chico bastante inteligente, apuesto a que cuando regresas a Berlín tu padre estará orgulloso de ti no lo crees— dice burlonamente el primer soldado.
Los soldados prosiguen a subirme a un carro donde se encuentran dos soldados, Ancel y yo.

— dile a la señorita Volkov que luce muy bella esta noche— dice el soldado que me despertó en mi cuarto.
— el general Schneider dice que usted luce muy bella esta noche— dice Ancel.
—puedes decirle al general Schneider que entiendo todo lo que dicen, desde pequeña he tomado clases de francés, aleman, inglés y ruso— digo en ruso.
El aleman queda perplejo y le cuesta un par de segundos captar lo que le he dicho pero no se lo traduce al general.
El general Schneider nos observa intrigado, sin poder entender lo que decimos.
El general saca un puro de su saco y me hace señas que si quiero un poco, asiento con la cabeza. El pone el puro sobre mi boca y lo enciende, como mis manos están atadas el general retira el puro de mi boca para que yo pueda exhalar el humo.
Al llegar a un edificio me toman dos soldados y me llevan a unos cuartos donde observo mujeres, yo había leído acerca del holocausto  y los campos de concentración pero esto no era nada parecido.
Este aparentaba ser una casa, al pasar por el pasillo note a una mujer recostada sobre una cama rodeada de soldados.
Nose que este lugar pero quiero salir de aquí.