𝐋𝐈𝐌𝐄𝐑𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀 [KooKMin]

.11.

—  ¿Por qué no contestabas a mis llamadas?

Sentados en un café. Una preocupada Jieun interrogaba impaciente al director Jeon.

Ella aún no sabía el verdadero motivo de aquella cita.

Ella aún…

No sabía que hoy martes, sería el final de lo que una vez fue una relación de semanas.

Mientras la veía tomar su café express  Jungkook observaba como la neonatóloga encajaba a la perfección cuando se trataba de sus gustos. La pelinegra lo tenía todo, desde una cara bonita hasta una simpatía que complacía a cualquiera que se le acercase a hablarle.

Pero si ella lo tenía todo. ¿Entonces por qué en su pecho todavía persistía el rechazó? ¿Dónde quedaron sus sentimientos por ella?

Sin duda alguna, el culpable de que Jeon sintiese aquella inestabilidad emocional era Park Jimin. Ese pelirubio se había colado tan mal en su mente y corazón  que lograba  desesperarlo cuando por el día no lograba saber nada sobre el estado del pediatra. Tampoco llegaba a entender cómo es que su ser se relajaba complacido cuando sus ojos grises se enfocaban en el pecho activo.

—Necesitamos hablar Jieun.

—Lo sé. Todavía sigo esperando las respuestas a mis preguntas.

—Lo que sucedió con Park nos mantuvo a todos muy pendientes y creo que hasta fuera de sí. Estuve más de 48 horas encerrado dentro de mi oficina tratando de buscar una solución para salvarle la vida.

—Lo entiendo y agradezco que tengas de vuelta tu tiempo libre—la pelinegra se dirigió con una notable y leve molestia, había pasado días sin poder hablarle y verlo.

—En realidad…todavía seguiré trabajando. Mi equipo se hizo cargo de la última intervención de Jimin mi obligación es seguir pendiente  a él. Su estado sigue delicado por lo cual tengo que evitar que no enferme de alguna peste hospitalaria, porque si lo permitimos él podría llegar a empeorar y la verdad…

—¡Jungkook!—Jieun elevo su voz logrando hacerlo callar.

—Lo-Lo siento.

—Por unos minutos deja de lado a Jimin y enfócate en nosotros dos.

—Es que ese es el problema— Jungkook repaso desganado su taza de café sobre la mesa.

—¿Qué? ¿De que problema hablas? No…no logro entenderte.

—Creo que ya no hay un nosotros Jieun.

                         

                             ...🚬...

—No lo sé, eres el menos indicado para cuidarlo está noche. Jimin lo recuerda todo.

—Si es así, creo que ya es tiempo de que le pida unas disculpas sinceras. Prometo no discutir, solo le haré compañía hasta que se duerma.

Taehyung dudoso y con su maletín ya en mano, miró por última vez desde afuera de la habitación a su mejor amigo en recuperación.

—Bien. Si él no desea verte entonces vete. Por más que no hable y sólo respire sabe hacer notar su molestia.

—¿Hace cuánto le administraron el último calmante?—pregunto el castaño mirando su reloj de mano.

—Hace media hora. Hemos intentado dormirlo, pero nada sirve ni siquiera los pocas gotas de oxicodona logra hacerlo descansar aunque sea un rato.  Te dejaré quedarte, yo hablaré con Seok Jin y le diré que Yoongi se quedará por esta noche. Voy a cubrirte, pero cualquier cosa que suceda me avisas, así sea la más mínima. ¿Entendido Jeon?