SFDR | Yoonkook

D I E C I N U E V E

Yoongi

Desperté con un fuerte dolor de cabeza, estaba desorientado, no entendía que había pasado

En un intento de tratar de recordar lo que sucedió recorrí el lugar en donde estaba, era una habitación, había un gran estante lleno de libros, una mesa de noche y muchas cosas más perfectamente ordenadas.

Seguía sin entender la razón de porque o como llegue a este sitio, de pronto se abrió la puerta dejando ver a Hyunjin con un plato de huevos con tocino y un vaso de lo que parecía ser jugo de naranja en sus manos

–Hyung, ¿se encuentra bien? Se desmayó y se golpeó la cabeza, por suerte no fue nada serio–

–Oh, con que eso paso, gracias por ayudarme– me extendió la bandeja en donde venía mi desayuno y yo la tome gustoso

Empecé a comer mientras Hyunjin estaba al lado mío

–Hyung... ¿Qué lo hizo desmayarse?–Esa pregunta hizo que parara de comer y mirara a Hyunjin a los ojos

–Me dijeron... que estaba en buenas manos y me mandaron una foto de Jungkook... Atado a una silla–

–Hyung... Aun si mi vida depende de esto, haré lo posible por encontrar a Jungkook, se lo juro– solo asentí y me quedé viendo a un punto fijo

¿Que debía hacer? No soportaría perder a Jungkook, no se donde está, no tengo pistas que me ayuden a encontrarlo, simplemente... No se que hacer...

Tengo tanto miedo de perder a Jungkook, de perder al padre de mis hijos, de perder al amor de mi vida...

No me di cuenta cuando una pequeña lágrima empezó a recorrer mi mejilla, la limpie lo más pronto posible y me levante de la cama dejando el desayuno a medio comer a un lado

–gracias por todo Jinie, me tengo que ir–el se levantó y me dedicó una sonrisa

–No hay de que Hyung, cuenta con mi apoyo cuando sea–

–Hasta luego–y sin más salí de la casa de Hyunjin y me dirigí a la de la madre de Jungkook, ella aún no sabía nada... Yo... No se como decirle...

Al llegar toque la puerta y a los pocos segundos la puerta se abrió dejando ver a Taehyung y a mis dos pequeños hijos

–¡Yoongi Hyuuungg!– Taehyung se abalanzó hacia mi haciendo que cayera de sentón en la entrada de la casa

–Hola Taehyung, ¿como has Estado? ¿Mis pequeños se han portado bien?–

–Más que bien, son los mejores sobrinos que puedo tener–

–Me alegro de eso... ¿Y tu Madre?–

–Se encuentra durmiendo por ahora, pero se puede quedar a esperarla–Taehyung me sonrió con su inusual sonrisa cuadrada

–De acuerdo, gracias pequeño–me senté en un mueble y observe a Taehyung jugar con mis hijos por más de media hora

–Hola cariño, una disculpa por todo el tiempo que perdiste esperando a que despertara, he tenido unos dolores de cabeza y no me gustaría pensar que es algo grave–La madre de Jungkook salió de su cuarto y se sentó en frente de mi

–No se preocupe suegra, me entretuve viendo a mis hijos–

–¿Que necesitas?–aquí era donde venía la parte más difícil

Me sentía como un doctor a punto de dar la noticia a los familiares de que el paciente ha fallecido, pero, con solo pensar eso se me hace un nudo en la garganta y no quiero mostrarme débil ante la madre de Jungkook, de mi bello esposo