Extras - ¿Ustedes son pareja?

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Ahora todos los saben

-¡Midoriyaaaaa! -se escuchó un grito agudo lleno de exigencia.

Izuku se giró en su asiento, poniendo atención al pequeño chico que le hablaba. No pudo preguntar cortésmente qué sucedía, pues Mineta rápidamente se subió en su pupitre para mostrarle la pantalla de su teléfono.

-¡¿Qué diablos es eso?! ¡Ayer estaba viendo atrapando infieles y apareciste!

-¡¿Ehhh?! -Izuku por primera vez en su vida fue grosero con Mineta, y le arrebató el teléfono. Se levantó de su lugar para correr lejos de Mineta, mientras veía el video en el teléfono. El pequeño lo persiguió, pero al llegar a la puerta del salón algo los detuvo.

-Siéntense en sus lugares -ordenó un cansado Aizawa, quien notó a Mineta intentando quitarle el teléfono a Izuku. Pensó lo peor ¿Qué podrían llevar dos pubertos en video a la escuela y actuar de esa manera?-. Midoriya, deme ese celular -ordenó, listo para hacer un reporte por llevar pornografía a la escuela.

-¡¿Qué?! ¡No! Digo, no puedo -pegó el teléfono a su pecho, y Mineta dejó de brincar espectante de la situación.

-Midoriya -estiró su mano-, no quiero llevarte a detención.

Izuku bajó la cabeza, y entregó el teléfono. Mineta realmente estaba alterado, porque el video anterior al de atrapando infieles en realidad era pornografía, solo rezaba para que el profesor no revisara la galería entera.

Aizawa reprodujo el video, y solo encontró una escena parecida a una entrevista o algo así. Eran Midoriya y Bakugō, pudo dejarlo pasar pero le intrigó.

"-¿Me estás engañando?"

Escuchó a Bakugō preguntar, y por lo que decía la chica, y la reacción de Izuku, solo pudo pensar en lo obvio.

-¿Tú y Bakugō están saliendo? -preguntó en voz alta, esa misma pregunta carcomía a Mineta en la noche. Para colmo, la imprudencia del profesor hizo que todos en el aula se enteran, pues estaban poniendo atención a la situación.

Solo se escuchó un "¿Qué?" grupal, la mayoría consternados, otros ya lo imaginaban, y Katsuki quedó en estado de shock porque no se lo esperaba.

Ese día fue un infierno para los dos, porque las chicas y Kaminari no les dejaron de preguntar cosas embarazosas.

No actúan como pareja

Desde entonces, sus compañeros de clases ya se habían acostumbrado a la idea de que eran pareja. Bueno, todo seguía exactamente igual, así que realmente solo era "la idea", pues no veían un cambio en el comportamiento de los chicos. Ni Izuku ni Katsuki eran más cariñosos, ni se llamaban con nombres lindos -aunque bueno, Kacchan y Deku ya eran apodos de cariño-, no se besaban, no se daban de comer en la boca, no se miraban de reojo en los vestuarios, nada de nada.

Entonces, Kaminari y Mina se preguntaron ¿Acaso les daba miedo demostrar su amor? Y como los metiches que eran, atraparon a Katsuki y a Izuku en sus asientos antes de salir de clases.

-¡Bakugō! ¡Midoriya! Tengo una pregunta -dijo Mina con entusiasmo.

-¡Agh! ¿Todavía? Creí que ya habían dejado de lado las preguntas -se quejó Katsuki, realmente no le gustaba que se entrometieran.

-Pero esto es diferente, queremos saber para ayudarles -dijo Kaminari, sentándose en el pupitre de Katsuki.

-¿Ayudarnos? ¿De qué? -preguntó el pecoso curioso, realmente no estaba consciente del problema, así que accedió a la pregunta para saber de qué hablaban.

-Bueno. Se supone que están saliendo ¿No? Pero Kaminari y yo notamos que no hacen ninguna cosa de parejas. Ya saben, más allá de tomarse de la mano, cosas como besarse en público, decirle "te amo" al otro cada rato. No lo sé ¿Por qué?

-¡¿B-besarse?! -Izuku se puso completamente rojo, y Katsuki solamente se quedó callado apenado.

El rubio, fastidiado, se levantó y se fue, dejando a Izuku con el par de idiotas.

-Ahí va Bakugō... Nunca nos responderá nada. ¿Midoriya? -Kaminari aprovechó para sentarse en el asiento de Bakugō y estar cara a cara con Midoriya.

-Bueno... Él y yo nunca... nunca nos hemos besado ni nada por el estilo -admitió apenado, no podía negar que en algún momento lo pensó, pero nunca se preguntó por qué no lo habían hecho desde que esa chica los interrumpió en la calle. Pensó que era normal porque recién se habían enterado de sus sentimientos y eso debía llevar tiempo, ¿o no?

-Mmm, qué extraño.

-Sí, es muy extraño. ¿Acaso los dos tienen vergüenza? Es decir, ya están grandes y se conocen desde siempre, sería más comprensible si aún tuvieran, no lo sé, diez años -opinó Mina, quien estaba en todo eso solo porque quería ver a Bakugō siendo amoroso, casi tan raro como ver un apocalipsis zombie.

-¿De verdad? -Izuku no había pensado que era raro. Se sintió como si estuviera fuera de lo normal por no comprenderlo, tal vez los otros chicos cuando sabían de sus sentimientos se besaban ese mismo día, o tal vez solo de debía a que él no sabía nada respecto a temas románticos, y dudaba que Katsuki supiera.

Luego de esa charla con sus compañeros de clases, lo pensó. Quería besar a Katsuki, sí, y se sentía muy avergonzado, sí. Pero, no sabía cómo, y lo más probable es que Katsuki no supiera y por eso aún no habían hecho nada.

En la noche, en su habitación, se armó de completo valor y decidió que le pediría un beso a Katsuki. Se levantó con su pijama de All Might y caminó escaleras abajo. Se paró frente aquella puerta, consciente de lo difícil que sería hacerlo, y dio leves golpecitos.

Escuchó ruido dentro, fue consciente de que jamás había entrado a ese lugar, fue consciente de que eran demasiadas primeras veces las que estaba buscando.

Katsuki abrió la puerta con mala cara, seguro por la hora, pero mostró genuina sorpresa al ver a Izuku.

-¿Deku? ¿Qué haces aquí?

-Em... Hola Kacchan ¿Puedo pasar?

Katsuki pareció pensarlo un poco, solo se hizo a un lado dejando la puerta abierta. Izuku asumió que era un sí, y entró.

El cuarto de Katsuki era cálido y olía a Kacchan, se sintió demasiado cómodo, le ayudó a relajarse un poco.

-¿Qué es lo que quieres? -preguntó Katsuki, que aún parecía estar alerta.

Izuku apretó los puños, suspiró recuperando la tensión y el valor, y caminó lentamente hasta estar frente a Katsuki. Lo tomó de la camisa, cerró los ojos, levantó la cabeza y se paró de puntitas esperando.

Katsuki se tensó, esperaba todo menos eso, bueno, sí lo esperaba, pues recordaba la pregunta de Mina. Izuku seguramente lo tomó muy en serio, y ahora quería un beso, y joder, él también quería, pero simplemente no encontraba un buen momento. Ahora Izuku básicamente lo había buscado, se lo estaba pidiendo, y era como el jodido cielo.

Lentamente y con sus manos temblando de la emoción, tomó las mejillas de Izuku y se acercó, podía sentir su respiración. Primero fue un simple roce, sintió los suaves y delgados labios de Izuku, los acarició con los propios, y pudo sentir el suspiró que soltó el pequeño.

Era tan emocionante, que de un segundo a otro se acaloró, le propinó a Izuku un beso mas grande, sorbió de sus labios, lamió, besó, y apretujó aquel rostro contra el suyo, era un beso necesitado y húmedo. Izuku también ponía de su parte, abriendo la boca y dejando que Katsuki le hiciera de todo.

Solo queda decir que esa noche Izuku se quedó en el cuarto de Katsuki, y al día siguiente siguió todo exactamente igual, como si Mina jamás hubiese preguntado nada.

¿Ustedes son pareja?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora