Susie despertó en la casa del humano, el cual había desaparecido de su cama tras mirar en esa dirección, rascó su cabeza con confusión y salió de la cama, notó que había un pedazo de tarta de caramelo y canela sobre un plato en el tapete, el cual instintivamente tomó y comió mientras se dirigía a la puerta, atravesó el pasillo y bajó por las escaleras.
—¡Oh!, Ya despertaste cariño, como no sabía a que hora acostumbras despertar te dejé un trozo de tarta para que desayunaras.— Toriel rápidamente se había percatado de la chica e inmediatamente apagó la radio que se encontraba escuchando.
—Sí, gracias señora Dreemurr, estaba delicioso, disculpe, pero ¿Que hora es?— Se encontraba algo confundida por la somnolencia restante en su cuerpo, lo cual la hizo bostezar.
—Oh, claro, es la una y cuarto de la tarde.— Respondió amable ante su pregunta, por otro lado Susie solo abrió sus ojos y se lo pensó un momento antes de decir una grosería frente a la madre de su amigo.
—¡Rayos!, Ya se me hace tarde, perdone, ¡pero me tengo que ir!— Su somnolencia desapareció al instante y salió corriendo justo cuando Toriel estaba por decirle algo más.
No le importó el hecho de que no se había aseado, no se permitiría faltar a clases otra vez, pues de seguir haciéndolo le darían de baja y no podría ver tan seguido a su amigo.
Al llegar a la escuela y estar a punto de entrar por la puerta principal le extrañó que estuviese cerrada, se asomó por una de las ventanas, algo de agua se escurría por debajo de la puerta de dentro y nadie se encontraba ahí, ahora se encontraba mucho más confundida por lo que regresó tranquilamente a casa de Kris y hablar con su madre, pues ella trabaja ahí y se encontraba en su casa, ¿A caso no le pareció extraño?, En el camino se topó justo con quién quería aclarar sus dudas.—Señora Dreemurr, estaba por ir buscarla, ¿Por qué no está dando clases? Y ¿por qué esta cerrada la escuela?
—Saliste corriendo antes de que pudiera decirte que se suspendieron las clases por reparaciones, varias de las tuberías estaban tan viejas que se rompieron y se inundaron parcialmente varios salones.— Dijo entre risas un tanto nerviosas.
—Entonces... ¿Es día libre?, Por cierto... ¿Donde está Kris?
—Así es, oh cierto, dijo que iría al hospital, creo que volverá a visitar a los pacientes para tocarles música con el piano.— Lo último lo dijo con una sonrisa que denotaba cierto orgullo por la buena acción de su hijo. —Bueno, te dejo, tengo que organizar las próximas clases, dile a Kris de mi parte que no llegue tarde a cenar, ¿Sí?— Susie asintió y con la misma se dió la vuelta para ir a su casa pues ahora sí tomaría una ducha con calma. Paseando con tranquilidad por la acera, notó algo extraño en algunas de las personas de las casas cercanas, todos parecía que ¿se relajaban?, Haciendo una parrillada, tomando el sol pues ese día se encontraba con cielo despejado, entre otras actividades, solo había una que todos compartían, escuchaban la radio, "Eso es todo por la sección Habla Amigo, yo que tú le diría la verdad, lo que menos quisiera es causarle problemas a un buen amigo, les ha hablado Zack Lewis y volvemos con la música~".
—¿Quien escucha la radio en estos días...?— Dijo para si misma y siguió su camino.
El día era mucho más tranquilo que de costumbre, la fresca brisa soplaba suavemente haciendo que las puntas de su desaliñado cabello se agitasen un poco, "Bueno eso es otra cosa que no sabía de el.", pensó en lo que le había dicho Toriel, "El piano ¿Eh?, Si que estás lleno de sorpresas viejo.", esbozó una pequeña sonrisa y negó para sí misma. Su sonrisa se desvaneció al ver un auto estacionado frente a su casa, suspiró con fastidio y atravesó el patio de su casa hasta llegar a la puerta, sin muchas ganas abrió la puerta para toparse con una mujer bastante parecida a ella, solo que llevaba un traje de negocios y la coloración de sus escamas eran más claras a comparación suya, entre morado y rosado, cabello obscuro y algo corto pero recogido por una coleta, ojos de color amarillento casí dorado, parecía apurada, llevaba un pan en la boca y andaba de un lado a otro, ordenando papeles mientras atendía torpemente una llamada, la chica solo pasó de largo evitando a su madre para ir directamente al baño de su cuarto y por fin tomar la ansiada ducha.
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Nuestro Secreto
FanfictionDías después de que Susie y Kris salieran del Darkworld, entablarían una estrecha amistad, que al pasar de los días, semanas, meses, se transformaría eventualmente en un enamoramiento mutuo. Básicamente es mi primer Fanfic de mi OTP, solo espero que...