PRÓLOGO

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POV Kyro

Hace un mes a mi padre le echaron del trabajo así que decidimos mudarnos a Madrid y el día de hpy nos a tocó hacer todo el viaje, 12 horas de avión más una en coche hasta llegar a la casa que tenía que estar situada en el puto centro, ¡genial!

Salí del coche cansado listo para llegar y tumbarme ya que estaba agotado, cuando a mis padres se les ocurre la fantástica idea de que les ayude con las cajas, iba a ser el mejor día de mi vida.

Me agaché a coger dos de mis cajas cuando noté una mirada sobre mi, o mejor dicho, sobre mi trasero.

         —¿¡Qué coño miras!?— Le grité al chico con cara de asco, él sonrojado se da media vuelta y se marcha.

         —Vaya homo, que asco.— Dije en un murmuro, mientras llevaba las cajas a mi habitación; esta era amplia aunque no tenía más que una cama, una mesita de noche y un par de estanterías, llevará un tiempo colocar todo en su sitio así que decidí dejarlo para más tarde y ponerlas debajo de mi cama.

           —Ya las colocaré luego.— Pensé.

Seguí ayudando a mis padres hasta que no quedaban más cajas; por fin pude subir a mi nuevo cuarto a echarme una siesta, una siesta que resultó durar hasta el medio día del día siguiente.

*Sueño*

Estabamos en mi cuarto, yo sentado en la cama, él se me lanzó directamente, noté sus labios contra los míos, sabían bien, levantó mi camiseta y toqueteó con su mano mi pecho y, joder, qué bien se sentía, necesitaba más y no podía parar así que me sienté sobre sus piernas mientras seguíamos besándonos, fantástico beso francés que me excitó hasta no poder más, me dispuse a bajar la cremallera de su pantalón mientras..

*Fin del sueño*

          — Pero, ¡qué cojones!— Me despierté sobresaltado.— ¿Por qué mierdas tengo que tener ahora mismo un sueño húmedo? Y encima con ese pervertido que me miró el culo antes, venga ya, ¡si yo soy hetero!— decidí tomarme un momento para respirar.— Okay , ¿esto es normal no? O sea solo es un sueño, ¿No hay de qué preocuparse verdad? Pero, si es así ¿Por qué sigo excitado? ¡Tiene que ser una broma!— Suspiré derrotado y decidí salir de la habitación para darme una ducha.

Una vez salí de esta me di cuenta de que llevaba 20 minutos en el baño y tenía que bajar a desayunar, decidí ponerme un look casual, unos vaqueros desgastados una camiseta negra y una camisa a cuadros blancos y negros desabrochada.

Mamá hizo tortitas, así que me las comí lo más rápido que puedo ya que no quería llegar tarde mi primer día de instituto. Le di un beso a mis padres para despedirme y salgí.

Mientras me dirigía al instituto un chico chocó conmigo mientras reía, al igual que sus amigos, los cuales venían detrás.

           — Mierda, lo siento.— Se disculpó sonrojado.

            — No pasa na...— Me callé a mitad de la frase. No podía ser, era el chico de ayer, y el del sueño de esta mañana. La vida la tenía tomada conmigo. Él seguía parado frente a mí esperando que terminase la frase, que raro era.— Será mejor que continúe mi camino.— Pensé en voz alta.

Dark LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora