El Tiempo

El trabajo

Sofía ya ha terminado de comerse las lentejas y se dispone a cumplir su deber de ciudadana. La distribución del trabajo se rige por la distancia de la vivienda en relacción con el lugar más cercano del Estado.
Sofía al vivir cerca de la plaza mayor tiene que limpiar la casa de El Alcalde, que se encuentra situada en frente del ayuntamiento, dentro de la plaza. A ella le gusta mucho vivir en el centro de la ciudad y está muy agradecida por ello.
Es un privilegio para la jóven poder ver la casa de la persona màs influyente de la ciudad. Es bastante amplia, con los techos muy altos, muy bien iluminada y con una decoración sorprendentemente sencilla.
Es el lugar donde más ciudadanos tienen que gastar su tiempo, debido a sus grandes dimensiones.
Sofía coje su cepillo, que fabricó hace dos años y emprende su corto viaje. Hoy le ha tocado trabajar con Mónica, es bastante mayor que ella pero siempre sacan temas de conversación. Las dos barren la parte inferior de la casa y si tienen suerte pueden ver a El Alcalde.
Sofía sólo lo suele ver los domingos en el discurso. De los cuatro años que lleva trabajando para èl, ha tenido el placer de verlo menos de cinco veces y su mayor contacto ha sido un saludo.
El Alcalde pasa todo el tiempo «trabajando» en el ayuntamiento, únicamente va a casa a dormir y desayunar. La población más rebelde insinua que lo hace para que parezca que trabaja, y que en realidad hace lo mismo que en casa. Si Sofía trabajara en el ayuntamiento podría comprobarlo, de momento son solo rumores.