Un te quiero

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Luego de caminar llegamos a casa

Helen....

Él se despidió y se estaba yendo, entonces es cuando exclamo con ansiedad. - ESPERA !! - estaba preocupada por la indiferencia que mostraba hacía mi persona.

Vicente volteó a verme para solo preguntar fríamente- que quieres, Helen?.

Dudosa le respondo diciéndole - por favor, no te vayas- suspiré cerrando mis ojos para continuar - bueno, sólo hasta que me prometas no volver a ignorarme como estás haciéndolo - exclame tristemente.

Vicente pasó por alto mis palabras diciendo - te prometo que mañana pasaré por ti, para irnos a donde acordamos anteriormente-hizo una breve pausa y para finalizar, agregó - hasta pronto Helen - entonces giró sobre sus pies para dirigirse hacía su casa y desaparecer de mi vista, en ese momento sentí que el patio donde yo estaba ubicada se volvió solitario y silencioso

Me dirigí hacía la entrada, entristecida, sumergida en mis pensamientos.

Me encuentro a un paso de abrir la puerta, pero antes respiré profundo dejando salir una sonrisa y entré - llegué - exclamé avisando a mi familia que me encontraba a salvo y como toda presencia activa en el hogar, mi madre apareció frente de mí.

< Dios, ya veía venir las preguntas >

Mamá - con quien estabas? - interrogó con energía, en sus ojos se podía notar  como la curiosidad y entusiasmo desbordaban. Respondí - Simplemente estuve hablando con Vicente, ya sabes... - dije apenada.

Mi Madre insegura preguntó - que fue lo que te dijo?.

- nada mamá, nada, solamente... Tienes que saber que estamos bien, si? - Decidí irme hacía mi cuarto cerrando la puerta de trás de mí, me tiré en mi cama y sólo podía pensar en aquel sujeto,
< qué estaba pasando con él >.

Vicente...

Cuando llegue a casa comencé a pensar en ella, en Helen, no es correcto seguir pensándola todo el momento.
Quiero que sea mía, pero, ¿cómo decirle cuánto la aprecio?, ¿Cómo explicarle que el motivo de mi comportamiento actual se debe a mis dudas?, quisiera que estuviera a mi lado ahora mismo, poder abrazarla y no soltarla...

<Qué tarado fui al dejarla sola allí.. espero no haberla herido>

Miro mi reloj en mi escritório, captando que son las 22:30 pm, me dirijo hacía el baño, me cepillo los dientes y me relajo en la ducha, una vez seco mi cabello, me recuesto en mi cama, dejo salir un pesado suspiro para caer dormido.

Me despierto al escuchar el alarma sonar altamente, percato que es otro día que estoy vivo.
Me dirijo hacía el placard y vestirme acorde la situación de hoy, ya listo me dirijo a buscar a Helen y decirle lo que siento por ella.

< Dios, por favor dame valor >

Ya fuera del hogar de mi amada toco timbre, me posiciono sobre una pared y cierro los ojos esperando a que salga.

Helen...

Estaba esperando por su llegada un tanto ansiosa, ya arreglada para la ocasión, pero vi como se estaba tardando, entonces mis ánimos cayeron por el suelo, desanimada fui al baño a quitarme el maquillaje cuando escucho el timbre sonar, sonreí y con emoción corrí hacia las cortinas de la ventana para encontrarlo ahí, esperando por mí - ¡oh dios mío!, ¡Está acá!, ¡Está acá! ¡Como lo prometió! - exclamé dando pequeños saltos con terrible emoción, fui velozmente a buscar mi cartera y abrigo, respiro profundamente y logró salir, nerviosa pero feliz.

- ¡Viniste!, Que alegría..- dije emocionada a lo que él me responde.

- obvio que vine, lo prometí, no es de caballeros hacer esperar a una dama- dijo desviando la mirada de mis ojos un tanto apenado. No tardé en decir "Te Quiero", me dirije una mirada sorpresiva y aliviada a la vez, pero así como lo sorprendí con mi palabra, yo también me sorprendí con la suya al oirlo decir - yo también te quiero Helen y si te ofendí alguna vez perdóname, a veces no sé cómo debería de actuar frente de ti, para dejarlo claro... - me besa la mejilla con mucha delicadeza, siento como se me queda viendo para comenzar a sonreír y volverme a besar la otra mejilla, envuelve su mano con la mía procede a besarla, comienza a caminar y yo sigo sus pasos.
De pronto siento calor en mis mejillas...

<Oh no! Me sonrojé, que vergüenza...>
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Amor De AdolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora