Un Propósito. (BNHA Undertale)

Capitulo 1

Capítulo 1

Nubes grises cubrían el oscuro cielo. Relámpagos por todos lados, un caos total. No había ni un signo de vida alrededor. Todo estaba muerto a simple vista.

Animales, nada. Árboles, nada. Personas...nada.

Edificios destruidos, fuego, terremotos, todo estaba hecho un caos.

Nadie, ni una sola persona sabía lo que sucedió en realidad. No había nadie en ese sitio.

Simplemente era algo inesperado, de un día a otro todo fue una masacre en ascenso.

Simplemente las 8 de la mañana, las personas caminaban haciendo lo que mejor saben hacer en un día común y corriente.

Trabajar en tu tienda, ser héroe, atrapar al villano, robar. Lo típico de todos los días.

Pero de repente huesos negros comenzaron a atravesar a toda persona a su alrededor.

Calaveras flotantes con una forma extraña a la de un dragón que sonreirá macabramente comenzaron a incinerar a todo aquel que se acercara a ellos.

Ni siquiera All Might pudo contra eso.

El ser de capucha grisácea con sangre en ella, de abrigo azul oscuro también manchado del líquido rojo de las personas. Short de color negro con sandalias llenas de sangre y unas medias igual de manchadas.

Traía una sudadera debajo de ese abrigo de color blanca que, extrañamente, no estaba manchada de esa sangre.

Su cabello de color verde con una sonrisa macabra tallada en su rostro y por ultimo dos ojos de diferentes colores.

Uno estaba de color negro con la pupila de color blanco, este era el ojo derecho, y el izquierdo era una pupila de color azul con un aro rojo recubriéndolo que brillaba intensamente.

Este ser con simples movimientos de mano provocó que el héroe número uno estuviera debajo de sus pies en tan solo pocos minutos y para la cereza del pastel lo decapito delante de cientos de personas para que notaran y supieran, que no habría escape.

Asesinó a todo aquel que se puso de frente.

A un peliblanco que demostró darle pelea al convertirse en un ser sumamente grande. Pero no hizo nada. Dos castañas que pelearon con todo dejando escapar a uno más, pero aun así las asesinó. Una peli naranja, dos rubias, una peliblanca, una peli fucsia, una peliverde, una pelinegra, otro peliblanco y un peli ceniza.

Luego buscó al último que faltaba en su lista.

Y se enfrentaron los dos.

Una gran batalla igualada, mismas habilidades, niveles diferentes.

El peliblanco luchaba contra el peliverde en una dura batalla de espadas que eran huesos puntiagudos.

Una velocidad inigualable e inobservable al ojo humano.

Esquivaban y atacaban a una velocidad impresionante.

Invocaban esas calaveras de dragón y las mandaban contra el otro, y aun así no se detenían.

El peliblanco invoco unas manos en fuego morado junto a una calavera mandándolos hacia el ser que hizo lo mismo, solo que el fuego era negro.

El peliverde mandó a volar al peliblando de un disparo del dragón a su derecha y al despejarse el humo un gigantesco ser esquelético emergió del polvo levantado por el disparo.