Era una tarde fría pero acogedora de jueves,esas en las que me gusta ahogarme en libros.
Entraste por la gran puerta y no despegaste tu mirada de la mía.
Me has preguntado si podías sentarte justo frente a mí,
la respuesta resultaba bastante obvia pero aún así de mis labios salió un si.
Me atrapabas adorandote mientras mis ojos gritaban mil te quieros,
el silencio sepulcral dejaba en evidencia la fuerza con la que latía mi corazón
y tu sonrisa
rebosando de sinceridad.
Sólo intentaba alcanzar mi libreta pero con una dolorosa sutilidad se rozaron nuestras manos
y puedo jurar que sentí la superficie del cielo.
Jamás te había tenido tan cerca.
¿Acaso sería posible que dejaras de ser tan imposible?
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Esencia Vainilla
RomanceInspirada en sentimientos y experiencias reales, esta corta historia cuenta el sendero de un amor puro cuyo brillo decayó tan rápido como se propagó. Narrada desde la perspectiva de Alex y sus adorados tintes poéticos. Capitulos cortos. Tal vez dema...