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El pequeño detective nos había descubierto antes de lo previsto, aún contábamos con tiempo para escapar pero él insistía en tomar la joya

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El pequeño detective nos había descubierto antes de lo previsto, aún contábamos con tiempo para escapar pero él insistía en tomar la joya. Tenía la certeza de pensar que era Pandora.

- ¡Maldición! Kaito, ¡Sal de ahí ahora! La policía viene por ti. ¡No puedo mantener el sistema apagado mucho tiempo!-Pequeños copos de nieve comenzaron a caer en la capa mi querido mago, los cuales de perdían por el mismo color de su traje. Pero finalmente consiguió su objetivo

Él se columpiaba sobre el reloj de un lado a otro con la joya entre una de sus manos. La energía regresaría pronto y lo sabíamos , fue solo su insistencia la que me hizo poder alargar un poco mas el periodo del apagón.

- ¡Ya tranquila! Si esta es Pandora no volveré a robar. Te hice una promesa .Lo recuerdas? Estoy segu- - Un silencio invadió nuestra conversación por radio.

- ¿Kaito? Responde ¿que sucede? - Mande la señal una vez.

- Tierra a Kaito. Reporta tu estado y el de la joya - Mande la señal de nuevo. Fue inútil. Él no quería responderme o la comunicación se había cortado. Lo busque con mirada preocupada.

Ahí estaba. Posado a la luz de la luna con la joya en alto.

-Otro fracaso ¿No es así? Idiota - Repetí entre dientes y con cariño. Mi posición en una de las habitaciones en uno de los edificios cercanos me ponía en riego. No había visto al niño con gafas desde que regreso la energía de la torre del reloj.

Nunca se sabría cuando el pequeño detective llegaría detrás de mi con alguno de los inventos de Agasa. En este caso esta más en riesgo que el mismo Kaito Kid. Salí de ahí con prisa y cautela para encontrarme con mi ladrón.

La noche transcurrió con un fuerte frío que se adueñaba de la ciudad, las calles de Tokyo estaban cubiertas por la blanquecina nieve. La diferencia de color dejaba ver los traviesos mechones azabache de Kaito, saltar de un lado a otro con cada paso que dábamos, que se fueron convirtiendo pasos aún mas largos. El paraguas que nos cubría a ambos comenzaba a ser inútil por la fuerza de la ventisca y su hermosa estación de entonces.

Después del espectáculo de Kaito Kid para robar otra joya (Ya conocen la historia de nuestro fracaso) se nos encargo dejar planos e información importante a Kōnosuke Jii. Una mala noche para el ladrón fantasma y para mí como su acompañante y su principal complice. El silencio se rompió después de quince minutos de luchar contra el clima.

- ¡Kaito! Deja de esforzarte tanto, no vamos a llegar a tiempo con esta frió...- Me aferré a él de como pude. Mis manos estaban heladas, a esté paso solo era cuestión de tiempo para que Kaito y yo tomáramos un resfriado.

- ¡Jii-Chan nos pidió dejar estoy hoy! No podemos detenernos ahora. - Sus palabras salieron de su boca temblorosa. Me di cuenta de que teníamos que parar en ese instante.

- ¡Por favor, Kaito! ¡Detenté, ya es suficiente por hoy! - Chillé con mi voz ya ronca por el frío y por el cansancio del espectáculo que Kaito y yo hicimos esa misma noche.

Se detuvo, yo conocía que no podría darme la contraria en estos casos. Pero el que se veía de ojos cansados y piel aun más pálida era él. Yo solo estaba preocupada por él, no podía negarlo.

Sus suaves labios salieron de la bufanda que los cubría, solo para hablarme a mí. Por un momento se congelo, su mirada y la mía se cruzaron por instantes que parecían eternos. Y eso es lo que mi interior deseaba, que se detuviera el tiempo mientras yo quedaba hipnotizada por el profundo azul de sus ojos.

Su sonrisa tierna fue lo que me saco de ese bello momento para regresarme a la preciosa pero literalmente fría realidad de esa noche. Sus ojos se relajaron al verme mas tranquila después de su acto.

- Hubiera sido mucho más sencillo decirme que tenia frió my lady. Sin embargo paremos aquí ¿Te parece bien?- Él se quito la bufanda que le cubría y me enrollo a mi para después tomarme de uno de mis hombros y apegarme a él con protección. Lo odiaba. Una vez más fui yo quien quedo sobre el calor se Kaito, pero no me daba ninguna queja por que en realidad, estaba cómoda.

- ¿Te invito un café?- Sus manos tocaron las mias , aunque sus manos eran frías. Me transmitieron un calor increíble. Siento que no necesitaba más calor para sentirme cómoda, moví mi cabeza como afirmación. Pero él no se movía. Fue un momento más que mágico, mis manos estaban fuertemente entrelazadas con las suaves manos de un mago. Cruzamos miradas. Kaito siempre se hacía entender entre miradas cuando lo hacía honestamente.

Casi pude leer en sus azules y profundos ojos lo que me decía.

-No creo que ninguno de los dos necesitará más que ese calor.-


// ♠️ // Disculpen los errores de ortografía o gramaticales a lo largo de este bello one-shot. ¡Espero que haya sido de su agrado! Nos vemos a la próxima. No olviden que el proximo One-Shot sera de un abrazo. ¡Gracias por seguir la historia conmigo!

- Con Amor Kuroka ♣️




~ Seven Days With Him ~ Kaito Kid x Tn  One Shots [Pausada]Where stories live. Discover now