From zero (Secuela House Of Cards)

1. "Bienvenidos a New York"

Sonrío en el quinto beso, no me quiero levantar de este cómodo sillón

-Amy, se nos hará tarde- ríe intentando "separarse" de mi

-Cinco minutos más-Hago un mini puchero

-Amy- intenta no sonreír-No quieres volver ¿verdad?

Niego con la cabeza consumida en el miedo

-No será tan malo ¿si?-Acaricia mi cabello- Tú eres valiente y muy ruda

Sonrío, tiene razón.

Nos levantamos del sillón y tomamos nuestras maletas, caminamos hacía la puerta.

-Marie

-¿Mmm?- voltea hacía mi

-Te amo

Sonríe enternecida

-Te amo, Amy.

*

-Tenemos tiempo de arrepentirnos-dice en tono de burla luego de ponernos el cinturón del avión

-Claro, me tiraré por la ventana-Me burlo y sonrío fingidamente

Nos reímos al unísono y nos tomamos las manos.
Miro por la ventana y observo como Seattle se aleja de mi vista, me alejare de esta vida para volver a la otra y no me siento lista; aunque no dejaré de ser esa chica dura que se fue de aquel lugar, seré alguien inquebrantable y nadie me hará dudar sobre lo que quiero.

Observo nuestro nuevo apartamento; es pequeño y solo tiene dos habitaciones y lo típico de un apartamento pero tiene una vista hermosa a la ciudad, Marie lo escogió muy bien.

-Bienvenida a New York señorita Wood-Mi secretaría, Sophie; sale de la cocina como si fuera un jodido fantasma

-Gracias-respondo secamente-¿Cuándo llegarán nuestras cosas?

-Mañana mismo- me responde

-Perfecto- asiento con la cabeza y miro a Marie que ha estado callada desde que llegamos a New York

-¿Qué pasa?-le pregunto

Sale de sus pensamientos y me mira, está sería y puedo notar que algo le preocupa

-¿y si todo vuelve a ser como antes?

Me río burlándome de lo que dijo

-Eso no pasará-digo convencida-No te preocupes por eso

Le doy un suave beso para que se relaje y al parecer lo hace, me sonríe.

-Además, míranos; ya no somos las mismas-me encojo de hombros-me niego a que suceda lo mismo por el estúpido de mi padre.

Marie asiente; ella entiende todo, conoce el mínimo detalle de mi vida y mis pensamientos, le debo todo lo que soy ahora.

-Debes tener un registro de cada cliente-Ordeno-cada noche vendrá Sophie para asegurarse de que todo está en orden, ¿está claro?
Rachel asiente, es una joven de estatura baja y es muy  reservada rozando a la timidez.

-Perfecto- sonrío mostrando todos los dientes.

Marie está asegurándose de la estética del lugar, tiene muy buen gusto. Camino hacia el lugar en donde estarán todos los instrumentos para los tatuajes, debemos asegurarnos de que este lugar sea tan eficiente como el primero.

-Amy, ¿quieres ir a comer algo?-siento su delicada mano en mi cintura, la observo.

No digo nada, solo asiento con la cabeza; salimos de aquel lugar y caminamos por las ajetreadas calles de New York con nuestras manos entrelazadas.