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ATENCIÓN: importante leer la nota del final, por favor.

La oscuridad abrazaba su cuerpo, se sentía tan pesado como un elefante, sus párpados también pesaban hasta morir, ni siquiera supo cómo fue que logró abrir los ojos solo para encontrarse con su habitación vacía y oscura, la luz apenas pasaba por la cortinas que lo bloqueaban de ver el mundo exterior.

Se levantó como pudo y largó un gemido cansado, se mantuvo viendo un punto fijo de su cama y suspiró.

Ya habían pasado tres semanas y Jimin no había vuelto ni una sola vez, si quiera para verlo a él.

De repente se sintió enojado, ¿cómo su mejor amigo pudo haberle abandonado así porque si? Era un maldito, lo dejó en su miseria.

-Tú solito te estás consumiendo, SeokJin hyung.

Se sobresaltó en su sitio al escuchar una voz detrás de su nuca, volteó inmediatamente tocándose la zona.

No vio nada, miró a todos lados y nada.

-No puedes verme, a menos que yo quiera que me veas.-de nuevo aquella voz, pero esta vez en algún lugar del cuarto.

Entonces el corazón se le aceleró y su pecho se oprimió, sus ojos pasearon desesperados por ver a la figura.

Esa voz, admitía que no la había reconocido por unos momentos, pero al escucharla por segunda vez no tuvo dudas de que era él.

-¿J-Jungkook?-habló tartamudeando.

-Pensé que me habías olvidado, hyung.

-I-Imposible...¿cómo...?

-Hyung, realmente eso no importa.

Vio una silueta negra por el rabillo del ojo, intentó voltear a verla pero la silueta al parecer no se dejaba, pues seguía pegada al rabillo.

-¿Qué ha-haces-?

-Estoy aquí por ti, siempre estuve aquí, te estuve observando y la verdad no te reconozco ni un poco.

SeokJin se quedó en silencio y agachó la cabeza aún con sus ojos a punto de salirse de sus cuencas, la figura se desplazó hasta quedar frente a él, el mayor no tuvo el valor de levantar la mirada.

-¿Qué te ha pasado? ¿dónde quedó aquel chico que sonreía por lo que sea? ¿a dónde se fue ese SeokJin hyung que irradiaba luz las veinticuatro horas del día y los siete días de la semana?-su voz sonaba igual a cuando lo regañaba en vida.-¿dónde quedó mi hermano?

Repentinamente sintió un pinchaso en el pecho, fue tan doloroso que hizo una mueca y llevó su mano a esa zona inmediatamente. Las lágrimas se acumulaban una tras otra amontonándose en sus ojos.

-Cuando tú moriste...-habló con la voz quebrada.-yo...no pude aceptarlo, incluso ahora.-sorbió su nariz para evitar que los mocos cayeran.-siento que todo esto es una pesadilla y solo quiero despertar...por favor Kookie, mueve mi brazo y dime "hyung despierta, quiero jugar con tus autos", quiero que, al despertar, estés tú de cinco años y yo de quince, quiero volver a esos tiempos en los que te aferrabas a mi pierna para no ir a la universidad y quedarme todo el día en casa contigo, quiero que ese día en que aquel camión chocó tu auto, tú no hayas subido y haya sido obra del cielo que no hayas muerto.-su voz se quebraba cada vez más y las lágrimas se desbordaron tal cual cascada.-¡Por favor, despiértame de una vez!-gritó desesperado con las manos en puño sobre su cabello.

Hubo silencio, SeokJin respiraba agitado y lanzaba gemidos junto con su llanto. De pronto sintió una caricia sobre su hombro, por un momento pensó que iba a despertar, que todo realmente había sido una pesadilla y quien tocaba su hombro era su hermanito con cinco años. Pero cuando abrió los ojos y levantó la mirada, solo encontró una silueta negra, tenía la forma de su hermano diez años menor que él, no habían detalles en su forma, era materia oscura y parecía que en su interior se movían muchas líneas, como si fuese el garabato de un pequeño infante.

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⏰ Última actualización: Oct 07, 2021 ⏰

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My Last Days With You (JinTae) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora