Park JiMin, un chico mimado de familia multimillonaria y con obsesión a la ropa Gucci conocerá la verdadera raíz del dinero de su familia después de que una bomba atente contra su vida y la de sus dos mejores amigos, Kim TaeHyung y Kim SeokJin.
Per...
Mi alivio por ver el aeropuerto era más grande que el trasero de JiMin, imagínense.
Kook seguía tirado en el piso de la camioneta como costal de papas, maldición, tomará un buen rato que despierte.
A menos que...
"TAEHYUNG"
"Díme hy-¡AH!" le dije a NamJoon que no le tire granadas a la policía, ¿Y qué hizo? le tiró granadas a la policía. La policía estaba a nuestro costado.
En momentos así reconsidero a los candidatos para el puesto de cerebrito.
"Maldición Kim, una más y juro que-"
"¿YO QUÉ? ¿A MI QUE RAYOS ME METES? SOPRANOS DE CUARTA." gritó Seokjin.
Me olvidé que habían como tres Kim en esta camioneta.
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Aim sorri.
"NamJoon, solo intenta tirar esas benditas granadas lejos de la camioneta." miré por la ventana trasera cuantos policías quedaban.
No había ni uno, así que podremos llegar sin problema hasta el aeropuerto pero... Siento que me olvido algo.
"YoonGi, donde rayos están nuestros padres." hijueputa, ya me acordé.
"JiMin, necesito que te mantengas en calma porfa-"
"¿DONDE RAYOS ESTAN NUESTROS PADRES?" No pos, matanga dijo la changa.
Realmente me asustó la ira que reflejaba el rostro de JiMin pero no dejaba de verse tan hermoso. Aún así, no podía permitir que esté en ese modo porque alteraría a los demás.
"Están bien, no te preocupes." mentir nunca se sintió tan horrible como en este momento. "Sólo necesito que te mantengas calmado y sentado, por favor."
La intensidad de mi mirada fue suficiente para que sus hermosas facciones se relajaran y se sentara calmado. Adoro cuando confían en mí.
Maigash.
"TaeHyung, necesito que le frotes alcohol a JeongGuk en la nariz para que se levante, desmayado me sirve menos que antes." llamenme maldito, pero la última vez que yo lo desperté me metió un puñetazo en la nariz que me la dejó chueca, a TaeHyung no lo toca ni con el pétalo de una rosa.
...
Espero.
"Está bien, hyung." de su bolsillo sacó algodón y empezó a buscar el alcohol.
"YoonGi, en 10 estaremos llegando." TaeYang tenía su mirada fija en la carretera y mantenía la velocidad alta.
¿Saben? Cuando él maneja, me siento como en Rápidos y Furiosos. Así todo intensos a lo Vin Disel pero con pelo.
En fin, ahora debía arreglar el tema de la camioneta secuestrada y su rescate.
"HeeChul, ¿Hay noticias de los jefes?" lo susurré al walkie-talkie lo más bajo posible pero audible para él, no quiero que los chicos se alteren.
En ese instante, TaeHyung estaba junto a HoSeok intentando levantar a JeongGuk, JiMin sentado bastante atemorizado junto a SeokJin y NamJoon en la parte trasera asegurándose de que nadie nos siga, solamente era cuestión de minutos para llegar al aeropuerto pero no teníamos órdenes de qué hacer si llegamos y los jefes no están ahí.
"No, las camionetas de refuerzo fueron enviadas pero no han respondido a nuestros llamados." la voz angustiada de HeeChul me ponía el quintuple de angustioso a mí.
"Estamos a 5 minutos del aeropuerto, ¿Qué haremos?" la verdad es que siento que sé la respuesta pero no quiero tener la razón.
"Irnos." Pero soy yo y siempre tengo la razón.
Maldición, no.
Abandonarlos así sin más... No me sentía capaz de hacerlo.
No solo por mí sino por los chicos, por JiMin. Estar sin sus padres, sin saber si están vivos o muertos, en pleno escape criminal sería... Bastante para ellos.
"¡YoonGi, nos están atacando." se escuchaban disparos y gritos a través del walkie-talkie. "Maldición, ¡TIENEN UNA MALDITA BAZUCA."
"¿QUÉ?"
"¡YoonGi, aún si no llegamos, aún si los jefes no llegan, ustedes váyanse, ¿ESCUCHASTE? VAYANS-" y lo único que se escuchó fue el sonido de una explosión.
