La urgencia [ Reddie ]

[ 20 ]

Richie nada más leer el nombre de Mary, se le pusieron los pelos de punta. Ya habían tenido muchos problemas con ella en el principio, pero se había olvidado de ella por completo.

Intentó leer con calma pero cuanto más leía, más rápido le palpitaba el corazón y su respiración se hacía más rápida.

Eddie si quiera podía mirarle a la cara, tenía las dos manos cubriendose el rostro. Mientras lloraba en silencio.

A Richie le cambiaba los gestos de la cara por segundos. Cuando terminó de leer, dejó caer el teléfono en la cama. Llevándose las manos a la cabeza sin saber que hacer, asimilando lo que había leído. Estaba helado. Estaba aterrado, al igual que Eddie. Lo que sintió en ese momento fue rabia.

Miró preocupado a Eddie, que aún se encontraba llorando, podría haberse esperado cualquier cosa, pero esa no. No sabía que decir, fue un golpe bajo.

— Eddie.. Esto es... — no pudo terminar la frase ya que un desmonorado Eddie explotó.

— ¿Qué voy a hacer Richie? Y-yo no quería que pasara esto. No quiero ir a la cárcel. No tengo el dinero para eso. No quiero que esa gorda desquiciada me vuelva a controlar. Pero no quiero darte problemas ni que pienses que soy uno. Será mejor que lo dejemos..S-solo quería ... Solo quería..— Sollozó sin poder terminar lo que quería decir ya que empezó hiper ventilar. Eran demasiados nervios en un día y entró en pánico. — N-no no puedo.... respirar. — dijo llevándose una mano al pecho y otra agarrando con fuerza el brazo del contrario.

Rich ya había experimentado esto una vez con Eddie. Así que sabía lo que había que hacer.

— Eddie, Eddie escuchame. — lo agarró de los hombros para que se centrara— Esto ya lo hemos pasado, no vas a morirte. Estás hiperventilando, intenta respirar más despacio, verás que te sentirás mejor. Respira hondo por la nariz y luego sueltas despacio por la boca. Vamos hazlo conmigo. — Eddie imitó los pasos que le estaba diciendo. Sabía que estaba histérico y tenía que calmarse aunque le estaba siendo difícil al no parar de pensar. Pero ya notaba una mejoría en su respiración.

Para Rich, esta era la primera vez que Eddie hablaba tan rápido en su vida. Eran demasiadas emociones a flor de piel y pasó lo que tenía que pasar. Le dolió que le dijera eso como si no confiara en él, pero sabía que esa mujer con un par de palabras podría influenciarlo.

Así que habría que intentar hacerle entrar en razón.

— ¿Cómo te sientes, mejor?

— Sí..bien.. Lo siento. — dijo apenado mientras caía otra lágrima de su rostro.

— No hay nada que disculpar . Eso le podría pasar a cualquiera.

— No.. Por todo, no deberías estar metido en esta mierda.

— ¿Y piensas que te voy a dejar solo con esta mierda? Joder Eddie, que hemos matado a un puto payaso del más allá que era más grande que nosostros cuatro juntos. ¿Crees que no voy a poder contra eso? — intentó animar al más joven, pudiendo lograr que esbozara una pequeña curva que desapareció al instante.

— Esta vez no sólo se puede pensar en que si lo crees sucederá Richie. Esta vez es real, yo no tengo dinero para la multa y tampoco puedo aceptar el tuyo... Me sentiría horrible.

— Okay, no lo aceptes, ya veremos que hacemos mañana. Ahora te tienes que tranquilizar. Y por favor, no me dejes porque alguien te lo diga, quiero que ese día sea decisión propia. — Dijo dándole un beso desconsolado en la frente.

A Eddie se le rompió el corazón escuchar eso. Había sido un completo idiota, se dejó llevar demasiado en lo que podría pensar Richie que no se dió cuenta de lo que en realidad podría sentir.

— Yo no te dejaré, fueron los pensamientos negativos del momento, juro que no lo volveré a decir más si no lo siento de verdad. Soy un imbécil. ¿Pero así me quieres, no? — Dijo esta vez Eddie para intentar animar.

— Afrontaremos esto juntos, ya lo verás. Cuando pase el tiempo todo esto será un mal momento que no merece la pena recordar. Te amo.

— Me too, vayamos a dormir, estoy agotado. — Dijo apenado, le había dado mucha vergüenza. Richie nunca había sido tan cariñoso.

Eddie cayó rendido pero a Rich le era imposible conciliar el sueño. Esa noche vomitó 3 veces.