Oscuros secretos

Luan

-Fue un "Emocionante" día, ¿no lo crees, Maggie? – dijo Luan con una risa al mirar el rostro irritado de la pechugona pelinegra.

-Si, si, si, lo que digas... - refunfuño molesta.

-Vamos no te pongas "Emo", jajaja – se rio más fuerte mientras que una vena palpitaba en la frente de Maggie.

-No tienes idea de cuanto te odio... - dijo entre dientes la Gótica.

-Si me odiaras no seríamos amigas – respondió con una sonrisa Luan. -Aparte que sé que entre esos melones tienes cariño para mí.

Luan estallo en carcajadas mientras que Maggie paso a tener otro color de rojo, tanto por la vergüenza como por el enojo.

-Tú... - iba a decir unas cuantas cosillas a su amiga de frenos, que muy seguramente le valdrían un castigo por sus padres.

-¡Matanga! – antes de que se diera cuenta Luan le había desamarrado su sudadera de su cintura y salió corriendo riendo cual niña pequeña.

-¡Oye! – salió corriendo persiguiendo a Luan para recuperar su sudadera, pero durante la pequeña persecución la comediante se fue colocando la prenda.

-¡Wuao! Maggie esta cosa es demasiado grande – Luan se detuvo y la pelinegra la imito un poco agitada.

La sudadera que se había puesto la castaña era negra en su totalidad, bastante grande, pues prácticamente le llegaba hasta las rodillas, tenía un amplió bolso. Colocándose la capucha, Luan se sorprendió. La capucha a diferencia del resto de la prenda era bastante chica, aun con eso esta cubría bastante bien el rostro de la chica sin que fuera una molestia para la vista.

-Vaya esta es la prenda ideal para los ladrones y otakus jajaja – golpeo su rodilla y siguió riendo.

-¡Devuélveme mi sudadera! – le exigió Maggie, con fuego en sus ojos.

-Tranquila chica, te la devolveré cuando lleguemos a tu casa – La castaña le guiño el ojo causando un diminuto y casi imperceptible sonrojo a la pelinegra.

-¡No, devuélvemela ahora! – Maggie sostuvo a la castaña de los hombros.

-Primero invítame a salir – bromeo Luan con su característica sonrisa.

-¡Ugh! – con evidente molestia la chica desarrollada se cruzo de brazos y desvió la mirada.

-Oh, ¿Te molesto Maggie?, no te lo tomes a "pecho", Humor y Amor querida – Sonrió con picardía al ver que Maggie desviaba más la mirada.

Sin decir nada más ambas chicas siguieron su rumbo a sus respectivos hogares juntas.

-Oye chica gótica – llamo Luan y la pelinegra solo la miro. -¿Por qué tienes esta sudadera?, ¿Estas planeando robar una casa o a ver un maratón de anime? Jajajajaja – La pelinegra pechugón refunfuño molesta.

-Ninguna de las dos, solo me siento cómoda en ella, eso es todo – Maggie se cruzo de brazos y Luan amplió su sonrisa.

-Oh...entonces solo quieres ocultar a tus "gemelas", ¿verdad? – al ver que Maggie se puso algo nerviosa Luan hizo una seña de victoria. - ¡Jaja!, ¡Acerté!

Cansada de las burlas de Luan, Maggie decidió hacer una jugada sucia.

-¡Al menos yo si tengo pecho, a diferencia de ti que eres mayor que yo y sigues siendo plana! – Eso fue un golpe directo al orgullo femenino de Luan que paro de reír y solo deprimirse.

-No tenias que recordármelo... - Maggie tuvo una delgada y victoriosa sonrisa.

-Tú empezaste, yo solo devolví el golpe – Luan la miro y ella igual, ambas se miraron durante unos segundos en silencio, hasta que estallaron en risas, o en el caso de Luan carcajadas.