《Número equivocado》Jensoo Adaptacion

40

El olor a café inundó sus fosas nasales, ayudándole a despertar. Era sábado a medio día, una hora temprana para estar despierta según ella. Sus ojos seguían siendo pesados, y aún tenía tremendas ganas de bostezar cada 5 minutos. Pero no podía ir a su casa a dormir, una irene ansiosa se lo impedía.

---¿Quieres algo más? ---preguntó la pelinegra, moviendo la pequeña cuchara de metal sobre la taza de cerámica.

Jennie negó, cubriendo su boca que bostezaba. Consideraba que mostrarle tal acción a irene, y a cualquier otra persona que la invitara un café era grosero.

---Estoy bien, gracias ---contestó luego de terminar. Irene respondió regalándole una sonrisa.

Hace meses, esa sonrisa que irene le mostraba hubiera causado miles de mariposas en ella. Pero ahora no sentía nada. Ni siquiera un cosquilleo.

---Nini, quiero ir directo al grano ---comentó dejando la pequeña cuchara sobre una servilleta blanca sobre la mesa, reacomodando su potura sobre el asiento.

Jennie dejó de escuchar a la pelinegra por un momento en cuanto escuchó ese apodo salir de sus labios. No lo había escuchado hace días.

---¿Entonces? ---cuestionó irene interrumpiendo sus pensamientos, tomando su mano.

jennie miró sin comprender el agarre de irene.

---¿Qué? ---un sonido confuso salió de su boca, avisando a la contraria la poca atención que jennie le había puesto.

---Tu respuesta ---repitió irene, con impaciencia---, quiero saberla.

Jennie no comprendió lo que irene quería decir al principio. Pero después recordó el porque la había citado en ese lugar, y también recordó que aún no tenía una respuesta para ese asunto. Tragó saliva, antes de volver a dirigir la mirada a irene, quien seguía acariciando su mano con ligereza.

---¿Por qué te gusto? ---preguntó en su lugar, pasando el sentimiento de confusión a irene---. Hasta hace meses salías con chicos, montones de ellos a la vez ---comentó--- ¿Por qué de repente comencé a gustarte?

Irene dibujó una mueca de obviedad en su rostro, colocando su mano restante sobre la de kim, apretando el agarre que ejercía sobre ella.

---Eres muy tonta ---se limitó a responder---. Siempre me gustaste.

---¿Que hay de Changsub? O ese chico, Sanha. Pensé que ellos te gustaban ---inquiere Jennie.

---Ellos nunca me gustaron.

---¿Entonces por qué saliste con ellos?

---Pensé que al comenzar a salir con Changsub tu te pondrías celosa o algo por el estilo, si lo hacías entonces tenía esperanzas contigo. Pero nunca mostraste ese tipo de reacciones, sólo te alegraste por mí ---explica, recargando su cabeza sobre la mesa sin apartar la mirada de la mano de la chica.

Jennie la mira sorprendida, sin emitir un sonido. Irene levanta su mirada, dirigiéndola a los ojos de jennie.

---Entonces pensé que si salía con un segundo chico, al fin revelarías tus sentimientos ---dice---. Pero no lo hiciste.

---¿Y por qué decidiste revelarme todo esto hasta ahora?

---Alguien comenzó a llamar tu atención y sentí que te perdía ---confiesa, levantando su cabeza de la mesa---. Era ahora o nunca.

Jennie se deshace de forma lenta del agarre de irene, esperando no mostrarse tan brusca con tal acción. Sus ojos se posan por un momento sobre su mano. Su cabeza... Su cabeza intenta digerir todo lo dicho por su amiga.

---¿No era más fácil confesarte al principio? ---preguntó jennie, sin apartar la vista de su extremidad---. Sólo jugaste con esos chicos, no lograste nada más que romper tres corazones.

Irene se encoge en su asiento buscando esconderse de su amiga en aquél momento. Tomó un trago de su café, amargando un poco su paladar. El sabor de la bebida era dulce comparado con el tono de voz usado por jennie  en ese momento.

---jennie, ese no es el punto en este momen-...---un sonoro golpe en la mesa impide que siga hablando. Jennie había estampado su mano contra la mesa de madera, provocando que otros clientes del lugar las observaran por un momento.

---¿Entonces cuál es el punto? ---preguntó la mayor, dedicando una mirada molesta a irene.

---¿Te gusto? ---irene cuestionó con la misma agresividad empleada por jennie.

Jennie guardó silencio después de esa pregunta. Irene lo entendió al instante.

Un gran suspiro de decepción salió de los labios de irene. Lo entendía perfectamente, esa mirada que jennie le daba inconscientemente, la entendía a la perfección. Su corazón ya no le pertenecía.

---Está bien, ya lo sabía ---dijo, bajando su mirada a su taza de café, que ahora estaba vacía.

---Lo siento.

Irene dibujó una sonrisa triste tras escuchar las palabras de la mayor. Eso solo se lo confirmaba.

---¿Seguiremos siendo amigas? ---preguntó Kim, levantando su mirada hacía su contraria.

Jennie dibujó una sonrisa a la par que tomaba las manos de irene entre las suyas.

---Las mejores.

1 capitulo Mas Y termina.