Convivencia a Prueba de Jutsus

Desorden

Personajes: Hatake Kakashi (20), Uchiha Obito (20); Uzumaki Naruto (16), Uchiha Sasuke (16); Haruno Sakura (17), Nohara Rin (20)

Advertencia: AU, Yaoi, No masacre, No cuarta guerra.

Disclaimer: Naruto y sus personajes son propiedad de Masaki Kishimoto, la historia es mía y la publico sin ánimos de lucro.

Desorden

La cortina estaba levemente movida, la luz empezaba a entrar por la ventana, y así pudo iluminar su rostro, llegando a incomodar sus ojos, se revolvió entre las sábanas, estiró su brazo en busca de su pareja y no lo encontró. Se vio obligado a abrir los ojos y una leve sonrisa se apodero de su rostro. Pudo ver a su amante, mejor amigo y actual pareja por casi un año y medio entrar cuidadosamente en la habitación con el desayuno en una bandeja. Hoy, tres de Agosto cumplían un mes más de relación y a pesar de Kakashi no era tan detallista, Obito si lo era y al menos quería hacer algo especial por más pequeño que sea.

-Obito sabes que no es necesario... - Kakashi se acomodó en la cama para que ambos pudieran disfrutar el desayuno - Sé que tienes una misión hoy, espero que no te hayas echo tarde...

Él mencionado le deposito un tierno beso al peliplata antes de posicionarse a su costado - La misión empieza a las diez y son las siete. Tengo tiempo suficiente para desayunar contigo... y también puedo engreírte - Obito paso su mano atrevidamente cerca por la entrepierna de Kakashi. Este último por mucho que le encantaba aquella idea sentía que algo no andaba bien. De todas maneras es de Obito del que hablamos.

Tomo su taza de café y en eso algo importante llegó a su mente - Espero que hayas recordado que el reloj está atrasado por 3 horas...

-¡¿QUE?! - lo siguiente que pudo observar fue un remolino azul oscuro con gafas correr por el cuarto desordenando todo a su paso.

Kakashi se paró para recoger las cosas mientras daba un gran suspiró - ¿Cómo se había enamorado de aquel desastre andante? - siguió a su desastre hasta la sala y se recostó en la pared con una pequeña sonrisa, que no duro mucho.

-Obito... - intento sonar calmadamente mientras se detenía en la cocina - ¡¿Qué diablos le paso a la cocina?!

Literalmente todo estaba quemado, parecía como si la estufa hubiera explotado, había un extraño liquido en el techo color morado, sinceramente no quería saber qué era eso, las puertas de los reposteros estaban quemadas y algunas partidas por la mitad.

-Pues... tuve un pequeño accidente... - sonrió torpemente.

-¿Pero si nada de lo que preparaste en el desayuno necesitaba la estufa?...

-Puede que al principio no supiera como preparar el...

-¡LIMPIA TODO! ¡AHORA!

-Tengo misión y ya voy tarde- fue rápidamente donde se encontraba Kakashi, lo abrazo y posicionó su mentón en el pecho de su amado mientras ponía ojos de cachorrito - Prometo jamás volver a dejar un desorden...

Y ahí recordó porque se había enamorado de Obito... Esos ojos, a esos ojos no podía negar nada -...Esta bien... está bien... anda, yo termino de limpiar...

-¡Gracias! - Le dio un fuerte abrazo y un gran beso, se soltó y se fue corriendo hacia la puerta - ¡Te amo!

-También yo... - vio cómo su amado se iba y suspiro. Al parecer su día libre la pasaría limpiando en lugar de leer su amado Icha Icha.

Una semanas después

Kakashi caminaba hacia el departamento que compartía con Obito, estaba cansado, su misión había sido de cuatro días en los cuales setenta y dos horas estuvo despierto. Su ropa y una parte de sus cabellos estaban llenos de lodo. Quería descansar y tener un buen sexo con su prometido. Ya estaba en su piso cuando vio a Obito salir corriendo del departamento con su uniforme de jounin.

-¡Kakashi llegaste! - Se lanzó sin pensarlo dos veces a los brazos del peliplata y lo abrazo - Pensé que no te encontraría, Tsunade me asigno una misión para hoy y justo estoy de salida ¡Te amo! - Y así como salto hacia sus brazos se fue. Kakashi sin más fue hacia la puerta del departamento, un mal olor llego a él pero no le dio importancia o bueno, eso fue hasta que abrió la puerta.

Un olor repugnante inundaba su hogar, la cocina estaba nuevamente destruida, observo algunos bóxers de su compañero tirados por la sala e incluso sobre la mesa donde compartían sus comidas - Nota mental #1: Quemar esa mesa y comprar una nueva - pudo ver los platos sucios en la cocina con muchas cucarachas y por último la basura que debía ser sacada todos los días estaba agrupada en una esquina con un enjambre de moscas.

-¡OBITOOOOOOO!

En la entrada de la aldea

-¿Qué fue ese grito? - Una peli rosa se detuvo ante aquel grito desesperado que se escuchó en toda la aldea.

-¡Mierda la casa!

-¿Ahora qué hiciste Obito?

-Sakura, Rin... ¿Creen que me pueda quedar con ustedes?

-¡CUANDO REGRESES ERES HOMBRE MUERTO! - Otro grito se escuchó, esta vez era más aterrador.

-Por favor...

Continuara.