Un Encuentro Eterno

~única parte~

El primer año que te fuiste aun podía recordar cada momento, en el dolor de las heridas que dejaste en mí.

Tu eras mi mundo sin embargo yo no lo sabía, yo era ciego, yo lo negué...

Cada año que esperaba tu regreso era un momento más de dolor. Sólo podía ver lo que habías dejado... ese niño crecía cada vez más, su sonrisa era parecida a la tuya traía luz con ella, tal vez la sangre no nos unía pero para mi el era uno de los tesoros que habías dejado.

Cuando te fuiste eras demasiado joven, y yo no era lo suficientemente fuerte para protegerte.

El tiempo a pasado ahora sólo el dolor rige mi vida y como todas las noches eh soñado contigo pero esta vez decías:

- ¡Lan Zhan gracias por amarme!

- Wei Ying

- Por favor sigue sin mí

- ¡nooo!

- Por favor olvidame

- ¡nunca!

Mi voz salió rota y como un gemido lastimero. Intente atraparte y detenerte pero sólo podía atravesarte... mis ojos ya estaban nublados cuando desperté viendo aun tu hermosa silueta. Cada día era un martirio pero no puedo dejarlo sólo…aún no, el será feliz por ambos A-Yuan, nuestro hijo.

El tiempo sigue corriendo han pasado casi 7 años ahora, cada vez hay menos personas a mi alrededor siguen diciendo que debo dejarte ir, yo no quiero hacerlo eras mi todo...aun lo eres.

- WangJi debes detenerte ya te has lastimado sufiente

- No

- el no regresará, ¿lo sabes no?

- lo se, pero no quiero y no puedo

- ....

- lo lamento hermano

Sólo podía seguir vagando en esa vida, eh vuelto tantas veces al lugar donde me dejaste, estuve ahí pero no pude detener al mundo que quería dañarte, el castigo que recibí en mi cuerpo era pasajero pero el que recibí por negar mi amor hacia ti destruyó mi corazón y mi alma.

Cada parte de mi vida es sólo para ti, eh llegado hasta este momento para ver crecer lo que quisiste proteger, aquello que fue destruido por la ignorancia de las personas. Nunca deje de tocar investigación en el guqin esperando al menos tener una pequeña pista de ti pero nadie me supo responder cada intento era como morir una vez para mi, cada respuesta dolía más que la otra no quería admitir que te habías ido.

No quería estar sólo.

Esa mañana antes de salir al mundo para hacerme cargo de fantasmas feroces lo vi por última vez aquel pequeño niño que lloro cuando me vio, aquel niño que pasó una parte de su infancia contigo. Ese niño no ya no lo era ahora era un joven te hubiera encantado verlo crecer, definitivamente a vivido bien tal y como deseabas.

- padre, puedo ir contigo

- no

- padre, por favor no te fuerces

- no lo hago

- padre....

Sus ojos se volvieron acuosos, su cuerpo templaba levemente intentaba reprimir sus pocas palabras pero ya había tomado una decisión, sin esperarlo el me abrazo, no sabía como consolarlo sólo pude pronunciar su nombre levemente.

-SiZhui, no te preocupes

Esas fueron las ultimas palabras que le deje. Pero en mi interior nada había  cambiado,  mi alma estaba rota el tiempo había transcurrido 13 años desde que te fuiste sin mi.

Sin más tiempo deje el lugar llevando sólo mi espada, iba hacia a ti a nuestro último lugar iba a proteger a indefensos como antes después de todo ese tiempo en la oscuridad, por fin había dejado de buscarte, pues ese día me reuniría contigo. Tú me lo habías prometido. Llegué al lugar terminando con esos fantasmas y me dirigí a nuestro último lugar.

- ya no será el último Wei Ying

Dije al aire esperando que mis palabras te llegarán, me dirigí rápidamente hacia donde me dejaste iría a buscarte y a quedarme junto a ti, nada había cambiado seguía igual de sombrío aun se escuchaba el llamado de aquellas almas desesperadas pero y tú porque no pides ayuda....esto me rompe pero esta vez ya no puedo, esta vez iré contigo no me importa nada más que volver a verte sonreír, a sentir tu calidez, a ser parte de tus travesuras, a tu alegría que contagiaba a cualquiera...por favor déjame encontrarte y permanecer a tu lado...porque rompiste tu alma, porque te culpaste. Tu eras más inocente que esas personas, tu eras mejor que muchos. Cerré mis ojos y sentí al aire cubrirme antes de dejarme caer al vacío...mis últimas palabras profesadas en un ruego son para ti mi alma gemela, hoy por fin puedo sonreír.

- Wei Ying eh regresado a ti.