Es momento de decir adiós

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-El doctor me dijo que ahora que me recupere no podré tomar cualquier leche hijo, tendremos que ir a Costsco a comprar la que me dijo.

-No se preocupe abuelito verá que pronto saldrá de aquí.

Eran las 9am y salí a fumar un cigarrillo, me sentía un poco cansado pues había estado con él desde la mañana del día anterior pero eso no importaba, era mi viejo y los días que fueran necesarios estaría ahí para él sin importar nada. En eso veo llegar a mi tía y a mi prima, ellas me relevarían para que yo pudiera ir a dormir un poco 

-¿Como está papá?

-Pues le dieron el medicamento que le recetaron el día de ayer y tuvo una pequeña mejoría, aunque en la madrugada le costó un poco respirar, pero el doctor me comentaba que era por el efecto del medicamento. 

-Con el medicamento se va a recuperar hijo hay que pasarnos para que desayunes, traje unos sándwiches para que comas algo hijo.

Después de un rato decidí irme a casa a  dormir un rato, sin embargo un amigo me marcó para ver como estaba y quedamos para ir por una cerveza y platicar sobre el como me sentía. De todas las personas y familiares que tenía en ese momento, él había sido el único que realmente me preguntaba como me sentía en esos momentos.

-Me siento fatal amigo, tengo una impotencia por saber las circunstancias de mi Abuelo y no poder hacer nada para poder hacer que se recupere.

-Yo sé realmente como te sientes en estos momentos y a pesar de todo, pues nosotros no podemos hacer nada al respecto. Solo nos queda esperar a que todo salga bien.

Pasaron las horas y nosotros empezamos a platicar de otras cosas, hasta que recibí la peor llamada en lo que va de corta vida.

-¿Que paso?

-Acaba de marcar mi mamá, a mi abuelito hace rato le intento dar un paro respiratorio y los doctores ya no le dan mas tiempo, ven a la casa para irnos a despedirnos de él.

Me quedé mudo por unos cuantos segundos, la noticia me había caído como un balde de agua super helada. Traté de ser fuerte pero de inmediato mis ojos se llenaron de lagrimas, mi abuelo, él que siempre cuido de mi, con él que pasé cosas increíbles estaba a punto de dejarnos. mi tristeza era inmensa. 

A escasos 15 minutos que había recibido la noticia llegué a casa y lo primero que hice fue abrazar a papá y soltar en llanto. Él solo me decía que ya no se podía hacer nada al respecto y yo creía que no era justo que esto me pasara a mi. Todo el camino hacia el hospital no deje de llorar, parecía un bebé, y si, era un bebé que había perdido a uno de sus seres mas queridos.

-Hola Abuelito, ha pasado un mes de tu partida y te extraño demasiado, todos estamos aun dolidos por tu partida, pero siendo honestos a mi es el que mas me ha pegado, trato de fingir que por fuera se vea una persona fuerte, pero por dentro estoy hecho pedazos, hay canciones que me recuerdan a ti y no puedo negar que suelto en llanto, me siento tan solo, que a veces olvido mis motivos por los cuales seguir adelante. Hay veces que siento que me exigen demasiado y por mas que trato de esforzarme, a todos termino decepcionando, siempre cometo algún error y todo se viene abajo. Te extraño demasiado Abue,  y aunque se que las palabras en este momento salen sobrando, puesto que todo lo que tenía que decirte te lo dije en vida, eres la persona de corazón mas puro y noble que he llegado a conocer y parte de la persona que soy ahora es gracias a tus consejos y enseñanzas, aunque no lo niego, te voy a extrañar y creo que todos los aquí presentes también lo harán.  Gracias por brindarme tanto tu apoyo cuando mas lo necesitaba y vaya que tu fuiste el único que supo en la situación en la que me encontraba. Ahora, eres un ángel ¡Mi ángel! y se que donde quiera que estés nos estarás cuidando por que siempre viste por hijos, nietos y familiares cercanos. Y hoy aquí todos los seres a los cuales mas amabas no te dicen adiós, si no hasta pronto, buen viaje y ojalá nos volvamos a ver.

¿No les ha pasado que de repente sienten que están completamente solos? Que a pesar de que tu tratas de expresar el como te sientes nadie es capaz de entenderte. Todas las personas que pasan por tu vida tienen un porqué, pero en estos momentos no se ni quien soy. 

-Han pasado 2 meses desde tu partida Abuelo y parece que todo ha vuelto a la normalidad, pero para mi, toda mi vida se va cayendo lentamente. Perdí mi trabajo, he perdido a algunas amistades que pensé que estarían siempre para mi, ya no están, y bueno la relación con mis papás no mejora, poco a poco hacen que les pierda la confianza y aunque los AMO demasiado, no lograr entender la situación en la que me encuentro. Sé lo que dirías "Ellos quieren lo mejor para ti y por eso son así contigo" y pues siendo honestos no los culpo, he caído en un vació que solo puedo llenarlo con alcohol, con fiestas de dos o tres días. Y aunque para muchos mi vida es un desmadre  nadie puede entenderme. Es triste LO SÉ pero nadie puede entender este dolor tan inmenso que siento cuando recuerdo que yo pasé la última noche contigo, que estuvimos riendo parte de la noche pues a pesar de que eran historias que ya me habías contado  las contabas con tanto entusiasmo que incluso yo me emocionaba como si fueran la primera vez.  De repente llegó a casa y veo tu silla, completamente vacía y te juro que no puedo, como te digo, por fuera trato de aparentar que soy una persona fuerte, pero en verdad que no puedo- Toque una vez mas su tumba y con lagrimas en mis ojos me despedí de él.

-Hola Abuelo soy yo de nuevo, hace una semana que no te visito, las cosas siguen un poco deprimentes en mi vida, pero comprendí que tengo que volver a empezar de cero, con todo y con todos. Uno de mis amigos de la infancia se va a casar,  me pone a pensar que siempre hay una segunda oportunidad para todos, es por eso que hoy es momento de decir adiós,  momento de decir adiós a todo eso que me hace daño, al miedo de arriesgarme por algo que en verdad quiero. Sé que en algún momento todo valdrá la pena y estarás orgulloso de mi ¡TE AMARÉ POR SIEMPRE! 




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