El último beso - [Sweet Pea]

Parte 2.

1 año después

Había sido un año muy caótico, después de la pérdida de Aileen, Sweet Pea no le encontraba sentido a su vida, había intentado suicidarse dos veces, dos veces en las que Fang's había logrado salvarle la vida.
Exactamente un año después, Sweet Pea se encontraba en la tumba de su amada, depósito unas rosas blancas, encendió su teléfono y reprodujo Darlin, se trasladó a hace exactamente hace un año y descargó todo ese llanto retenido, era la tercera vez que estaba en la tumba, la primera vez fue en el entierro y la segunda que la visitó fue en su cumpleaños.
No había tenido el valor de visitarla, todavía le dolía, en el mar de lágrimas que era en esos instantes le pidió perdón por no cumplir lo que ella le pidió, pero la vida no tenía ningún sentido si ella no estaba.
Ahora estaba en terapia, se mudó de Riverdale porque todo le recordaba a ella, desde su primera cita en el Pop's hasta cuando lo rechazó en el Whyte Wyrm la primera vez que la invitó a salir, New York sin duda alguna también seria de los últimos lugares que él visitaría. Actualmente vivía en Greendale, no podía estar demasiado lejos de Toni y Fang's quienes lo visitaban todos los días a tal grado que Fang's se mudó a Greendale también.

La noche cayó sobre el cementerio y él decidió que era momento de partir, susurro un "te amo" a la tumba de su amada a quién le prometio visitarla en el siguiente año.

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Muchísimos años después

Había tenido una vida plena, Sweet Pea jamás se casó pero eso no impidió ser el tío consentidor de los hijos de Toni y Fang's, amigos que habían demostrado ser hermanos, lo habían cuidado en su peor momento, jamás pudo encontrar a alguien más, porque ninguna chica era Aileen, su amada, últimamente solía soñar mucho con ella y añoraba el día de su reencuentro.

Contempló el atardecer por última vez, sonrió al ver las estrellas, sabía que el momento había llegado, al fin después de una larga vida de espera se reencontraría con su amada, nunca más estarían separados. Esa noche un Sweet Pea viejo fue a dormir, descanso en un sueño eterno dónde al despertar se encontró con la sonrisa más bella.

—Al fin llegaste Pea—Aileen sonrió al ver a su amado una vez más.

—Cariño, eres tú—susurro al tomar su rostro entre sus manos.

—Te dije que te esperaría en otra vida—sonrió la castaña.

—Hay mucho que te quiero contar—dijo Sweet Pea acariciando sus mejillas.

—Y tendremos todo el tiempo del mundo—respondió Aileen con una sonrisa.

—Te amo Aileen—dijo Sweet Pea antes de besarla apasionadamente.

Ambos saborearon ese beso, ese beso que estuvieron esperando, al fin estarían juntos y nada podría separarlos.

Okey, está historia la escribí de último momento, tal vez en algún futuro decida escribir la historia completa de Aileen y Sweet Pea, pero por el momento espero que está historia corta les haya gustado.
Denle amor, espero y no hayan llorado los tqm. ❤️