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Te imagino tocándome...

A la 1 AM me tenías una propuesta, pero minutos antes estabas tocando mi espalda por debajo de la ropa.

Jamás imaginé que el destino conspirara a mi favor como anoche.

Sentir tus labios fue un deleite prohibido.

Dijiste que me parecía a alguien.

Hay un agujero en mi corazón y no puedo llenarlo.

En la habitación 402, nuestros cuerpos enredados en luz tenue.

Tú no me perteneces, nadie se lo dirá...

Tú aliento a tequila recorría mi cuello.

Fue más fácil de lo que pensé, pero ahora no puedo dejar de pensar en ti.

Eres esa clase de droga que te engancha a la primera, y quiero volverme adicta a tu cuerpo.

Cogiendo borrachos, nos vemos tan bien.

Quisiera saber en qué piensas...

Solo somos tú y yo, se siente un poco extraño.

Con la resaca del sábado, fingiendo qué no me conoces.

La tensión seguía aumentando y yo bebí vodka.

Espero volverte a ver.

PeriódicamenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora