𝘋𝘢𝘥𝘥𝘺 𝘧𝘰𝘳 𝘳𝘦𝘯𝘵 [HopeV]

𝑼𝒏𝒐

ㅡ Taehyungie~

Taehyung miró a su compañero de pupitre con aire curioso.

ㅡ Cuéntame cómo se llama tu chico. 

ㅡ ¿Qué chico? ㅡ preguntó nervioso y sin aún caer en que debía continuar con su gran mentira.

ㅡ Tu daddy. ¿O acaso mentiste?

Seung Min le miró apenas terminó preguntar, con los ojos mucho más achinados de lo que realmente eran ㅡ si es que eso era posible ㅡ como acusando a Taehyung de que era más o menos primo hermano de Pinocho.

ㅡ ¡Claro que no te mentí! ㅡ le dijo tratando de disimular su nerviosismo con una risita tímida y dulcemente grave. Dispuesto a proseguir con su gran y extenso fraude. ㅡ pero no puedo decirte su nombre...

ㅡ ¿No? ¿Por qué razón? ¿Por qué es una mentira? ㅡ Seung alzó sus cejas.

Taehyung sabía que ese chico era la fuente de toda cosa, sabía que era un megáfono andante y que gracias a él toda la universidad, y casi todo Seúl se enteraría de su farsa que tanto tiempo le había costado construir.

Tenía que pensar rápido.

ㅡ Claro que no es por eso ㅡ contraatacó Kim casi al instante o quizás habiendo pasado dos minutos ㅡ te conozco, SeungMin, si te dijera como se llama lo buscarías por mar y tierra, desde Facebook, Instagram, Snapchat y hasta quizás por Tinder, cosa que no permitiría.

Obviamente Taehyung sabía que estaba cavando su propia tumba, y vaya que era muy profunda, sabía que cada palabra que salía de su boca no eran más que viles y enormes mentiras, pero de alguna manera no podía evitarlo, era parte de él. ¿Debería dedicarse a escribir novelas para jóvenes deprimidos y marginados? O quizás para adultos incomprendidos... ¡o mejor! Para su propio placer.

Seung lo miró de pies a cabeza sin estar del todo convencido, los ojos del gran mentiroso le observaron de forma discreta, en su mente hizo una especie de cálculo raro y como si de una película o dibujo animado se tratase, imaginó que encima de la cabeza de Min, de color blanco, en letra Arial tamaño veinticinco se hallaba un brillante 66%.

Eso solo significaba una cosa.

Era posible que pronto se enterara de aquel gran engaño que llevaba miles de años en su mente y poco viviendo en la realidad.

ㅡ Pero puedo contarte como y donde le he conocido. ㅡ

Apenas culminar de hablar los ojos del chico parlante - megáfono se iluminaron y se acomodó más pegado a Taehyung para poder escuchar cada uno de los detalles de forma explícita. 

ㅡ Prosigue ㅡ soltó.

Y Kim Taehyung sonrió mientras su cerebro ya había comenzado a trabajar desde mucho antes.

Sin duda alguna sería capaz de ganar muchísimo dinero si fuera un estafador de alta gama.