Capitulo 10 "Las apariencias engañan..."

693 52 2
                                    

Narra________ (Tn)

Al levantar la mirada pude ver aún entre la lluvia un lujoso auto plateado que acababa de detenerse frente a mí, mis ojos aún estaban empañados y el aguacero seguía sin detenerse. Comencé a ponerme de pié en cuanto vi que alguien bajaba del auto, mis ojos se posaron sobre el propietario del flamante auto plateado y al ver de quien se trataba, bajé la mirada. Baek Young Hoo caminó hacia mí protegido de la lluvia por un paraguas, me miró de manera incrédula y se podía decir algo asustada quizá por el aspecto que tenía en esos momentos, se acercó rápidamente a mí y habló:

Young Hoo: Oye, acaso estás loca??? Quieres morir???!!!.-preguntó algo exaltado.

Tn: Y que si muero??? A ti no debería importarte lo que me pase... Sube a tu auto y sigue tu camino, déjame en paz!!.-dije con la respiración entrecortada.

Comencé a caminar lejos de él pero no dí ni 5 pasos cuando él me detuvo jalándome del brazo:

Young Hoo: De verdad estás loca... Morirás congelada... Cúbrete...-dijo acercando su paraguas a mí.-Vamos, te llevaré a tu casa...

Mis piernas dolían y sentía una fuerte opresión en el pecho, seguía temblando de frio; mis dientes parecían castañuelas y comenzaba a faltarme el aire pero pese a eso había vuelto a llorar. Estaba enojada, triste y lo único que quería era estar sola, miré a Young Hoo y respondí aturdida:

Tn: No necesito tu ayuda...-tartamudeé con dificultad.

Aparté su brazo de mí, haciendo que el paraguas cayera al suelo y la lluvia comenzara a mojarle.

El me miró con cierta preocupación pero de nuevo lo evité:

Tn: Aléjate de mí!!...-espeté con voz débil.

Dije eso y le dí la espalda para caminar en sentido contrario. Mis pulmones dolieron de nuevo y esta vez evitaron que diese un paso más, frente a mi todo comenzó a volverse oscuro y lo último que sentí fue un golpe contra el suelo mojado....

Narra Baek Young Hoo:

En mi vida todo había sido diversión, honestamente no tomaba con seriedad la vida, la escuela, ni mucho menos las chicas. No quería admitir que mi vida era un desastre, pero cuando apareció esa chica, hiso que una parte de mí razonara, sus palabras me importaban aunque no sabía por qué, al pasar los días la veía, veía a la chica cerebro obtener buenas notas sin ningún esfuerzo, pero a diferencia de Yeo Ri, ella no se la pasaba presumiendo sus logros. Era una chica muy linda y cada vez que la veía mi corazón palpitaba fuertemente, incluso llegué a pensar que tal vez estaba enfermando. Ya habían sido 4 veces en que la veía llorar, todas y cada una de ellas por Kim Hyun Joong, pero descubrí que no solo era por él, si no, que le agobiaba no pertenecer a Corea en su totalidad, lo que le dije la vez pasada solo había hecho que se sintiera peor, pero gracias a eso había conseguido acercarme más a ella, saber que la hacía sentir mal. Ese día luego de que nos encontramos en la biblioteca salí del Instituto y fui con unos amigos a beber; necesitaba aclarar mis ideas, saber por qué mi cabeza estaba tan revuelta. De regreso subí a mi auto, comenzó a caer un aguacero y me alegró traer conmigo un paraguas, en el transcurso a casa algo llamó mi atención.

Detuve el auto y pude ver de quien se trataba; era ella, estaba sentada al lado de un árbol, completamente empapada por la lluvia, aunque el aguacero no me dejaba ver su rostro, pude darme cuenta de que estaba llorando, tomé el paraguas al ver que se había puesto de pié al percatarse de mi presencia y baje del auto.

Caminé hacia donde se encontraba y al verla completamente empapada la reprendí por estar ahí, ella me dijo que no me metiera, pero su estado me preocupó, estaba completamente empapada, podía jurar que se estaba muriendo de frio y respiraba con cierta dificultad. Acerqué el paraguas hacia ella para cubrirla y me ofrecí para llevarla a su casa, pero al parecer estaba enojada y llorando rechazó la sombrilla haciendo que cayera al suelo y la lluvia comenzó a mojarme. Se dió la vuelta y comenzó a caminar, pero al cabo de unos segundos más comenzó a disminuir su paso y de pronto cayó inconsciente al piso mojado. Abrí los ojos como platos al verla y grité su nombre, corrí hacia ella y la levanté del suelo, tomé el paraguas y cuidadosamente la subí a mi auto. Tomé mi chaqueta, que estaba en la parte trasera de mi auto y la cubrí con ella, conduje deprisa a casa, ya que, no sabía en donde vivía ella y aún así, no podía llevarla en ese estado. La lluvia cesó un poco cuando llegamos a mi casa, bajé del auto y de nuevo la cargué, entré a casa con ella en brazos y la deposite sobre el sofá, les pedí a las empleadas, que le cambiasen la ropa mojada y la subieran a mi recamara; así lo hicieron y se fueron a dormir. Al verla en ese estado mi corazón se paralizó por un momento, noté que estaba sudando frio, toqué su frente y me dí cuenta de que estaba ardiendo en fiebre; bajé a la cocina rápidamente por unas compresas de agua fría y se las puse en la frente, hasta que la fiebre comenzó a bajar, bajé de nuevo y preparé un poco de té de limón, para dárselo a beber. _______ (Tn) seguía inconsciente, así que, la sostuve entre mis brazos para darle unos cuantos sorbos de té con la taza. La recosté de nuevo y una vez que la fiebre bajó, retiré la compresa helada de su frente y contemplé su rostro por unos minutos. Se formó un nudo en mi garganta al recordar el estado en el que la había encontrado y acaricié su mejilla pálida. Tomé una silla y me senté frente a ella para cuidarle. Sostuve su mano y poco a poco el sueño comenzó a vencerme hasta quedarme profundamente dormido en la silla.

♡ ☆My Sweet Prince☆♡ SEGUNDA TEMPORADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora