KYLE.
No sé cuanto tiempo he estado tumbado sobre la cama mirando el techo como si en el fuera a encontrar alguna respuesta a mis problemas. Quiero moverme pero de todos modos me quedo acostado; mi cabeza esta corriendo a mil kilómetros por hora y creo que estoy demasiado cansado para darme un poco de animo.
Pienso en Jonas y solo me hace sentir mal por estar aquí y no en el hospital. Quiero abrazarlo y estar a su lado por lo menos unos minutos antes de que todo se vaya a la mierda.
Solo estoy esperando que Justin me llame diciendo que esta despierto y que puede tener visitas. Quiero matar a el o los que le hicieron eso, tampoco es tan difícil juntar las piezas y descubrir que lo han golpeado porque es una venganza hacia mí, por el hecho de salir ileso de la muerte de Travis. Puedo llegar a imaginar la rabia e impotencia que siente Jack en estos momentos.
Maté a dos de sus hermanos y aquí estoy. Viviendo mi puta vida como si ya no hubiera arruinado bastantes. A veces ni siquiera se como me soporto a mi mismo, hay veces que solo no soporto estar en mi propia piel.
Se que debería estar pudriéndome en la cárcel por todo lo que he echo, pero aun así soy lo bastante egoísta y mierda como para pensar en mi mismo. No quiero pasar mis días pagando mis deudas o no al menos antes de tener más tiempo con él.
A veces realmente no sé si conocer a Jonas fue el mejor o el peor error que cometí. Me ha echo cambiar tanto, que incluso le conté mis más oscuros secretos. Me ha echo abrir las heridas una y otra vez y realmente odio eso de él. Porque se cuanto control tiene sobre mí, porque se que puede hacerme daño y lo ha echo.
"¡TODO LO QUE TOCAS LO DESTRUYES, KYLE! ¡TE ODIO!"
No se si lo dijo a propósito para hacerme daño o solo fue coincidencia debido a que piensa lo mismo que mi progenitora. Recuerdo una de las tantas veces que ella me dijo eso, pero jamás se me olvidará cuando un día de invierno me robaron todo el dinero que había ganado, y a pesar de llorar diciéndole que me habían golpeado y robado y que no era mi culpa no traer el maldito dinero a casa; ella me grito para luego golpearme tan fuerte que la espalda me dolió por una semana y los moretones se quedaron en mi piel por muchísimos días. Esa noche me dejo durmiendo fuera de la casa. Si cierro los ojos aun puedo sentir el frío calándome los huesos. No entiendo como no morí de hipotermia esa noche.
La odio, la odio muchísimo por arruinar mi vida. La odio por ser una drogadicta, por tenerme, por morirse y dejarme solo. La odio incluso por darme una mierda de padre, porque ni esa mierda pudo hacer bien.
Y lo peor de todo, es que me parezco a ellos. Soy un desastre en cualquier ámbito de mi vida, soy un asesino, un egoísta, soy violento y no hago nada para cambiarlo. Siempre que creo que las cosas están yendo bien, ocurre algo que me recuerda que nunca podré ser feliz. Ni siquiera se si eso cabe dentro de mi vida.
Hace meses atrás ser feliz me importaba una mierda. Dentro de todo, disfrutaba mi vida lo más que podía, corría en la moto, hacía dinero y follaba con cualquier mujer que quisiera. Los sentimientos o las preocupaciones no estaban en mi circulo, hasta que llego Jonas.
El sonido de mi celular me asusta, haciendo que de un pequeño salto. Es Justin y me dice que él ya ha despertado, que dentro de toda la golpiza esta bien. Mientras me habla me coloco mis zapatillas para salir del apartamento. Le digo que voy en camino para luego colgarle.
Lo veo desde una distancia prudente para que no se de cuenta que lo estoy observando como un psicópata. Puede ver la preocupación en su rostro mientras habla con Seth, es increíble que hasta cuando esta hecho mierda, se preocupe por otras personas.
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BROOKLYN: Solo por ti.
Teen FictionSolo nos queda continuar, o intentarlo otra vez. SEGUNDA TEMPORADA.