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CAPÍTULO 2


"Pequeño?" Era él, se sintió seguro de pronto, levantó un poco la mirada para poder verlo. Llevaba una especie de gorro negro en la cabeza que le cubría todo el rostro solo dejando ver sus ojos y boca, como en las películas.

El chico caminó hasta el y se tiró de rodillas en el suelo frente a el, su rostro reflejaba miedo y preocupación cuando notó los moretones y la sangre que aún corría por su boca y arriba del ojo. ¿estaba preocupado por él?

"¡Oh dios!" "Pequeño, ¡lo siento mucho! Siento no haber estado aquí para ayudarte"

"¿Porqué... Porqué eres bueno c-conmigo?"

"No lo sé, yo no soy malo" "Voy a traer algo para curarte ¿de acuerdo? Tranquilo, nadie va a venir. ¡Espérame aquí! ¡no te vayas!" dijo en voz alta mientras se levantaba y caminaba hacia la puerta

"No es como si pudiera ir a algún lugar sabes?"

"Lo siento, ya vuelvo"

No pasó mucho tiempo cuando Harry regresó, se sentó junto a él y sacó algodón y un frasco del botiquín.

"Te va a doler un poco, ¿listo?"

El chico asintió y Harry pasó el algodón por todos los golpes de su rostro, limpiando la sangre seca con cuidado, apartó suavemente un mechón de cabello que cubría sus ojos.

Sus ojos...

¿Eran reales? No podían ser reales, estaba viendo el cielo. Estaba viendo el mar. Definitivamente no eran reales.

"¿P-pasa algo?" La voz del dios griego con labios de gloria y ojos de cielo ¿QUÉ? lo sacó de su trance.

"No, nada ¿Cómo te llamas, pequeño?"

"Louis"

"Yo soy Harry" "Bueno Louis, ya terminé. Descansa un poco ¿sí? Debes estar cansado"

"¿Harry?"

"¿Qué pasa?"

"¿Q-quédate? al menos hasta que duerma. ¡Porfavor! ¡tengo miedo!"

Y la verdad es que Louis no tuvo que decir nada más para convencer a Harry de quedarse ahí.

"Está bien pequeño, aquí estoy" "¿Louis? Yo no voy a dejar que te hagan más daño ¿de acuerdo?"

Harry se sorprendió al ver que Louis recostaba la cabeza sobre sus piernas y cerraba los ojos, suavemente pasó sus manos por su cabello y mejillas hasta que sus respiraciones se volvieron más calmadas, señalando que se había quedado dormido, sin embargo Harry no se movió, se quedó observándolo, admirándolo. ¿Cómo era posible que su padre le hiciera esto a un ángel? Porque eso es lo que era Louis, un ángel-dios griego con los ojos más hermosos que había visto. Deseó haberlo conocido en otras circunstancias, lo hubiese invitado a salir, pero obviamente Louis no aceptaría, seguro tenía a todo Londres detrás suyo. Además, nadie que fuera una buena persona se acercaba a él, ser hijo de John Styles lo alejaba de la gente buena. Sólo tenía a Zayn, que había sido su mejor amigo desde que tenían 12 años. Tampoco sabía si Louis se interesaba en los hombres. Se sentía jodidamente atraído por ese chico, pero era imposible, inalcanzable.

Ambos durmieron bien esa noche, sintiéndose seguros con el calor del otro.

Stockholm Syndrome (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora