La morfina corría por mis venas.
Y líquidos corrían por las tuyas.
Bebías sin parar de una botella que parecía nunca acabarse.
Llenabas tu interior, para comprobar cuán sola y vacía estaba tu alma.

ESTÁS LEYENDO
Morphine.
PoésieTú eras mi anestesia al dolor. Pero tú me provocabas el dolor. Entonces, ¿eras mi adicción?