Y... ¡Que!

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Vacío, pues gran espacio hay en mi,

no hay a quien extrañar,

no hay razón por desahogar,

no hay que llevarse a la cama a reflexionar.

Al despertar sólo se hace costumbre realizar lo normal,

salir de casa y no tener emoción alguna,

intentar gritar la felicidad y no tener voz,

hacer por nadar en la lluvia mientras me ahogo,

quere ser divertido y no conocer la risa,

buscar con quien hablar y no tener palabras,

tener ideas y no planes para realizarlas,

querer dar y no tener pertenencia,

buscar bondad y en mi sin pizca de ella.

Simples detalles,

pequeñas faltas,

Resultan en la falta personalidad distintiva,

y una extinción en la cordura.

Poemas DesalmadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora