-Esto está delicioso -sooyoung habló con la boca llena.
-Deja de hacer eso -jaehyun golpeó su brazo levemente.
-Gracias -jaehyun la miró sin entender- gracias por levantarme el ánimo, preferiste quedarte conmigo.
-Ya te lo dije...estaré cada vez que me necesites -ella se acercó mucho y el entró en pánico, ella lo estaba abrazando.
-No te vayas de mi vida -susurró mientras hundía su cara en el pecho del chico, sooyoung pudo oír claramente como el corazón del joven se iba acelerando.
-No lo haré, te lo prometo -jaehyun se volvió a sentír vulnerable a su lado.
-Lo siento -ella se alejó- quise abrazarte por un momento -sonrio levemente.
-No es nada...uhm ¿Quieres salir?
-¿Donde quieres ir?
-Donde tu quieras.
-Quiero ir a comer hamburguesas.
-¿Hablas en serio? -ella asintió.
-Si, conozco un lugar muy bueno, podríamos caminar, realmente no está muy lejos.
-Bien, vamos.
La luna iluminaba aquella hermosa noche, dos chicos caminaban al mismo ritmo, el corazón del joven se sentía cálido, mientras que la peli-negra se sentía bien acompañada. Pero tal vez esa noche cambiaría algo. Tal vez esa noche ella iba a comenzar a sentir cosas que nunca sintió.
(.......)
-Realmente las hamburguesas están buenas -el dijo antes de comerse el último pedazo de hamburguesa que le quedaba.
-Si, me gusta mucho este lugar -ella bebió un poco de su agua.
-Ya se donde traerte si estás triste -el sonrio.
Luego de pagar ambos caminaron a pasos lentos disfrutando de aquella noche.
-Vamos a sentarnos en aquel banco -sooyoung señaló uno.
El también se sentó, mirando a la nada. Sooyoung posó sus ojos en el. Una sensación extraña la invadió, quiso sonreír al verlo serio y concentrado en un punto fijo, sintió su corazón latir rápido y se sintió nerviosa al estar a su lado. El se giró hacia ella y le sonrió al ver que ella lo estaba mirando, sooyoung sintió felicidad pura al verlo sonreír.
-¿Por que me estas mirando? Me estoy poniendo tímido -bromeó.
-Nada, solo te miraba -ella se giró un poco avergonzada.
-Nunca nadie me había mirado tan descaradamente -ella soltó un risa- hablo en serio.
-No dije nada, yo solo rei -ella sonrió y miró al frente.
Siguieron en silencio disfrutando de la compañía del otro. Una gota calló en la cara de sooyoung.
-¿Uh? -miro arriba viendo así que el cielo ahora estaba oscuro y ya no había rastro de ninguna estrella.
-Debemos irnos -jaehyun se levantó- comenzará a llover -las gotas comenzaron a caer cada vez más.
-Oh no -sooyoung también se puso de pie.
Comenzó a llover y jaehyun al instante tomó su mano y la obligó a correr, ambos ahora corrían tomados de la mano.
-Dios mío, me caeré -ella dijo entre risas.
-No te caerás.
-Esta helado -ella gritó, el solo soltó una risa y siguió corriendo con ella.
Ambos llegaron frente al techo de una tienda ya cerrada, jaehyun miró a sooyoung, estaba completamente mojada mientras que algunos mechones estaban pegadas a su rostro, el se acercó y las quitó lentamente. Sooyoung volvió a sentir que su corazón iba a salir de su pecho, su repentina cercanía la puso nerviosa, su cabello mojado y una expresión seria lo hacía lucir jodidamente bien.
-Creo que debemos irnos, parece que no dejará de llover de todas maneras -ellos aún seguían tomados de la mano, el volvió a correr con ella- tu casa está muy lejos aún. Vayamos a la mía.
Ella solo asintió, dos cuadras más tarde llegaron al casa del joven. La lluvia era cada vez más fuerte, el sacó la llave de su bolsillo y abrió la puerta invitandola a pasar.
Ambos se quitaron los zapatos mojadas e ingresaron completamente a la casa.
-Esperame aquí, te traeré algo de ropa -dijo para subir corriendo a su habitación.
Sooyoung miró la casa, era hermosa y al parecer solo estaban ellos dos.
-Aqui tienes -jaehyun logró asustarla- lo siento no quise asustarte, allí está el baño.
Rápidamente caminó para no mojar el piso, sooyoung siempre traía un cepillo de dientes, bálsamo labial y una ropa interior en su bolso. No sabía porque, pero esas cosas no podían faltar en su bolso. Miró la ropa, claramente era de jaehyun, tenía su olor, un aroma suave.
Luego de vestirse salió encontrándose a jaehyun ya cambiado.
-Al menos esto tiene para ajustar la cintura -sooyoung señaló el pantalón que llevaba, jaehyun soltó una carcajada- ¿De qué te ríes?
-El pantalón te queda enorme, por eso te di esa, no quiero ver como mientras que caminas se te caiga el pantalón -volvio a soltar una carcajada.
-Oye -sooyoung se sonrojo.
-Te pediré un taxi si quieres, mamá no está. No podré llevarte, a no ser que quieras quedarte a dormir -ella negó.
-Esta bien, iré en taxi.
-Bien, te pediré uno -el se alejó un poco.
Sooyoung miró al rededor, no había casi ninguna foto de su familia.
-No encontrarás fotos -el se acercó- desde que papá murió mamá las ha guardado.
-Oh, seguramente le hace mal verlas -el asintió.
-El taxi vendrá en media hora ¿Quieres algo? -ella negó.
Jaehyun fue por un poco de jugo, le estaba costando mucho ocultar sus sentimientos, mientras estuvieron frente a la tienda las ganas de besarla volvieron a invadir su mente y realmente el no quería arruinar nada con sooyoung. El tenía en claro que sooyoung solo lo veía como un amigo, y prefería ser su amigo que estar lejos de ella.
