Freedom [Yoonmin]

Prólogo

Tras diez años de prácticas reservadas e investigaciones privadas, Kim Namjoon, un joven diplomado con honores, descendiente de la aristocracia japonesa, estudiante activo de la ciencia experimental, amante de los gatos y con convicciones muy arraigadas a su persona dio un comunicado en los medios públicos de todo Japón. 

 En su discurso habló sobre una nueva forma de vida, un procedimiento totalmente eficaz y seguro, que se basaba en una pequeña intervención no invasiva que modificaría el ADN humano. 

 El impacto mediático que generó su oferta hizo desplazar rápidamente la noticia a toda Asia, siendo Corea del sur una de las sociedades más interesadas en su propuesta. 

Poco a poco, las personas valientes y con un sentido de curiosidad específico se hicieron presentes, aceptando los términos y condiciones de aquella propuesta, entregando su posteridad para una nueva era. 

El método era sencillo. Tan solo era necesario donar algo de sangre para que fuera mezclada con el ADN de un felino. Tras la unión de los dos especímenes se requería al menos dos semanas de reposo para volver a introducirlo dentro del organismo humano.No había efectos secundarios ni tampoco daría graves obstáculos para hacer una vida normal. Las personas que su ADN esté bajo producto de esta modificación no tendrían cambios en su cuerpo, sino que las transformaciones serían específicamente para su descendencia. Comenzando así una nueva generación. 

Es decir que aquellas personas que decidieran mezclar su ADN pertenecerían el eslabón principal para lo que sería un cambio radical en la naturaleza humana. Aquellos retoños nacerían con la misma alteración que su o sus progenitores, pero a diferencia de ellos, en estado activo; podrían transformar su cuerpo. 

Su capacidad de cambio sería eficaz si se estimula desde temprana edad. Gracias a eso, si alguna persona modificada se arrepentía, tan solo deberían no mencionar ni fomentar este tipo de prácticas con sus hijos, pues lo importante para que se logre un buen desarrollo de este efecto (de transformación) se situaba en los primeros cinco años de vida del niño o niña. Sin embargo, su ADN estaría alterado de todas formas, lo que significa que los hijos de sus hijos, tendrían la posibilidad de transformarse si así se desea. 

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 Al principio hubo muchas protestas contra este tipo de práctica. Jóvenes y adultos con pensamiento cerrado y particularmente ancianos no comprendían esto como un avance para raza humana, al contrario, pensaban que era totalmente inapropiado y hasta algo enfermizo.
Expresaban su descontento exigiéndole al estado que prohíba esta nueva forma de vida. 

Por suerte, luego de algunos años de lucha, las personas enteramente humanas y las modificadas ya compartían naturalmente la cotidianidad en conjunto y el rechazo masivo que se generó al principio se convirtió poco a poco, en aceptación.

Entonces, la sociedad de Corea del sur se conformó por dos tipos de ciudadanos, las libertades de ambos estaban garantizadas bajo un mandato en democracia, sin importar cuál sea su naturaleza o de dónde provenía, todos tenían los mismos derechos. El estado los incluyó dándoles los mismos beneficios que cualquier persona común y corriente.

Pero esto se esfumó al momento que hubo un cambio de mandato gubernamental. El repudio creció siendo abalado por el presidente, que estaba en desacuerdo y su rechazo era estricto con las personas modificadas genéticamente. Como consecuencia una oleada de persecuciones, arrestos, torturas y desapariciones se desató sobre la ciudad. Ya no había libertad ni tampoco elección. Si eras parte de aquel pequeño grupo humano-felino tus derechos no valían.

El señor Park, quien era descendiente directo de padre y madre con ADN mezclado, desertó hacia una comunidad fuera del alcance jurídico del gobierno, comunidad originada por el mismísimo Kim Namjoon, quien inmediatamente viajó hasta Corea cuando la información llegó a sus oídos, invirtiendo grandes cantidades de dinero, comprando terrenos y edificando pequeñas casas para aquellas personas que quisieran vivir en libertad. El señor Park no dudó y llevó consigo a uno de sus dos niños; el pequeño Jimin.

Tanto Jimin como Hoseok, hijos del señor y la señora Park, fueron estimulados de pequeños teniendo así el poder de cambiar de forma en cualquier momento y algunas habilidades como el agudo sentido del olfato o la vista estaban altamente desarrolladas en ellos.

Hoseok se quedó con su madre, quien era etérea y no modificada genéticamente, protegido y defendido por ésta, fue obligado a registrarse en la secretaría del registro civil como persona no humana y tras ello firmar un acuerdo de total aceptación al nuevo régimen para así poder mantenerse en la sociedad, con la condición de dejar sus raíces felinas olvidadas y no volver a transformarse nunca más.

Por otra parte, el señor Park decidió el exilio antes de someterse a tal atrocidad, porque aunque su estado original no fue dado por la naturaleza, eso ya había quedado en el pasado. Él estaba orgulloso de quién era y no resignaría su forma felina por nada ni nadie.

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Dos años pasaron desde que el gobierno fue derrocado y la dictadura acabada. Sin embargo a pesar de que la democracia y la aceptación volvía poco a poco a la sociedad, aún había gente que no toleraba a los mitad humano mitad felino, pero éstos eran la minoría.

Jimin no estaba seguro de volver a la ciudad, pero fue obligado por su hermano, Hoseok, tras la muerte de su Padre, ya que aún era menor de edad y debía estar bajo tutela de un adulto responsable, como lo intentaba ser él.

En medio de la mudanza Jimin conoce a Min Yoongi su joven, apuesto y curioso vecino que lo ayudará a atravesar su duelo y a insertarse nuevamente en la locura de la gran capital. Jimin había vivido sus últimos cinco años en la libre comunidad, donde eligió vivir con su padre, donde no había reglas ni restricciones, donde su estado felino estaba seguro y protegido.

Gracias a Kim Namjoon.

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Pronto Jimin se da cuenta de que tenía muchas cosas en común, más de lo que podía imaginar con su vecino y al parecer una extraña coincidencia cambiaría ambas vidas para siempre.