-Repasemos. - Dijo sonriente y caminando en círculos. - Una vez que todos se vayan, como ya lo he logrado, le ofrezco una bebida, no alcohólica -murmuro, recordando que aquella chica evitaba todo tipo de brebajes de ese tipo. - con la droga, claro está para poder divertirme un poco más... ¡Oh! Pero, solo un poco, no quiero romper este juguete tan pronto. - Su voz se había tornado levemente juguetona mientras con una mano jugueteaba con su micrófono, había planeado esto durante un tiempo, quería experimentar al máximo con Charlie, una chica tan pura e inocente en este lugar tan nefasto, era difícil o mejor dicho, imposible de conseguir y ya habiendo dado el primer paso con su hotel, tenía la oportunidad de saciar esa necesidad y curiosidad que había surgido, su aburrimiento de siglos probablemente estaba a punto de terminar y esperaba que durara el mayor tiempo posible.
Se dirigió al cuarto en el cual se quedaba, golpeó de forma suave la puerta para alzar la voz lo suficiente para no ser ignorado. - Charlie, cariño~ te traigo un pequeño refrigerio para celebrar nuestra nueva y maravillosa unión, ahora que todos se han ido, es el momento perfecto para hablar de negocios ¿no te parece?
Charlie se sorprendió al escuchar que Alastor seguía en el hotel y aún más, que fuera a su habitación de una forma tan amistosa, no estaba muy segura de sí abrir o no la puerta, pero por su mente cruzó las mismas palabras que le había dicho a Veggie “Todos merecen una segunda oportunidad” con esto, se dirigió con un aura confiada y abrió la puerta, los ojos carmesíes fue lo primero que vio seguido por aquella particular sonrisa que destacaba de él. - Ehhh...¿Si? Uhm, bueno...-tragó saliva para pararse recta y mirarlo de manera seria- Creo que ya es un tanto tarde ¿no? Podrías dejar em, la celebración para otro día y cuando esté el resto del staff del hotel...si no te molesta. -Intentó cerrar la puerta al terminar, pero vio con una detenía esta de forma insistente.
- ¡Claro que no querida! Solo ambos debemos celebrar en esta ocasión, ambos somos los principales protagonistas en este show y realmente es algo muy necesario. -Sin más, entro a la habitación acomodando ambas bebidas que llevaba en una bandeja de plata sobre el escritorio que se encontraba dentro de esta, tomo la de él para con la mirada indicarle que fuera a tomar la suya.
Charlie resignada suspiró cerrando la puerta de su habitación para dirigirse a tomar aquella copa, observó el líquido que había dentro curiosa. -Esto es...-
- Jugo de manzana. -Dijo sereno. -Imaginaba que, si estabas promoviendo este hotel, no aceptarías ni si quiera el más refinado licor que pudiera traerte, así que simplemente decidí traerte algo más...ligero. -Su voz se oía como siempre, confiando, pero algo en ella se escondía. Para Charlie, no había ningún cambio en su típico tono, aquel que destacaba por sonar constantemente como si de una radio fuera, pero sentía malicia y un tono juguetón. Intentó no darle mayor importancia a ello, quizá solo era su desconfianza jugándole una mala pasada. -Bueno cariño ¿Qué tal un brindis? Por nuestra nueva unión y para lograr que este hotel “prospere”- Terminaba su pequeño dialogo con un tono burlón.
Charlie solo sonrió nerviosa para levantar su copa. - Por nuestra nueva unión...- Ambas copas chocaron para que luego cada uno bebiera su contenido.
Alastor observó de reojo impaciente, observó como el líquido de aquella copa desaparecía en el interior de ella, junto con la droga. Terminó de beber de la de él dejándola nuevamente sobre la bandeja para sentarse en la orilla de la cama. -Y dime querida... ¿Cómo te sientes? -
Aquella pregunta le extrañó, pero empezó a sentir como la sensibilidad de su cuerpo aumentaba de una forma exorbitante, un escalofrío recorrió toda su columna. Cayó de rodillas al piso mientras se abrazaba a sí misma, dirigiendo la mirada hacia aquel demonio el cual tenía un semblante diferente, su sonría era traviesa. - ¡Que mierda me hiciste, Alastor!
- ¿Oh? Nada que te incumba, cariño. Pero que quede claro, de ahora en adelante. -Dijo levantándose para quedar frente a ella, se inclinó para levantar aquel fino rostro con su dedo índice, obligándola a que ambos ojos se vieran de forma fija. - Eres completamente mía, serás mi preciado juguete y si, te atreves a comentarle esto a tus amiguitos...tu bello hotel sufrirá las consecuencias. -
Charlie solo pudo observar de forma fija e incrédula, había caído en un agujero aún más profundo que el mismo infierno y sabía que las palabras de Alastor, eran solo una forma suave de advertirle los posibles terrores por los cuales la haría pasar, estaba condenada, no podía contarle a Vaggie de lo que pronto le ocurriría. El miedo empezó a invadirla, pero su cuerpo demostraba cosas totalmente diferentes, se sentía cálida y agitada, la sudoración empezaba a ser excesiva y no podía detener sus jadeos, definitivamente, había sido drogada por el demonio de la radio.

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Más allá del mismo infierno [Charlastor] [Charlie x Alastor]
RomanceLuego de que Alastor se interesara en Hotel Feliz para buscar nuevas formas de entretenimiento, se da cuenta de que no será suficiente para satisfacer sus ansias de diversión y nuevas emociones. Frente a él se interpone una loca idea ¿Qué tanto se p...