｡*ﾟ+ Donde TaeHyung tiene una fobia y
gracias a eso conoce a Jungkook.
Sin embargo no todo es para
siempre, cuando se resuelve un
problema, surge uno nuevo
... Taehyung tiene que irse,
y no hay nada que lo pueda impedir ｡*ﾟ+
• au! bts.
• taek...
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Parece muy tarde para prometer, pero ¿quién puede asegurarnos eso?
El solamente quiere abrazarlo una última vez, aquella noche en la terraza había caído más profundo, se había enamorado más, ambos se gustaban, el amor era mutuo.
Más sin embargo el gran día de la partida a llegado, y nadie puede impedirla.
...
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- ¡JUNGKOOK! - grito lo más fuerte que pudo cuando por fin pudo ver aquella cabellera azabache. - ¡¡JUNGKOOK!! - pronunció casi desgarrándose la garganta, ¿Porque sentía que eran las últimas veces que pronunciaría aquel bello nombre? Al menos así, estando enamorado. Todo se volvía nublado por las lágrimas acumuladas en sus ojos, trataba de llegar, correr y correr era lo único que quería hacer.
El azabache volteo hacía el lugar de donde lo llamaba aquella voz tan familiar, y ahí pudo ver la escena más dolorosa que pudo a ver visto ese día, TaeHyung tenía sus ojos inchados y la cara roja de tanto llorar, y ahora estaba corriendo para su dirección. No entendía nada en ese momento.
- Jung...Kook - susurro tan lastimosamente TaeHyung en cuanto estubo frente a frente con su amado. JungKook permanecía confundido, sin entender aún en la situación en la que se encontraba, pero esta preocupado por el estado actual de su castaño favorito.
- Hyung... ¿Por qué está llorando? - acunó entre sus manos el rostro de Tae y lo miro tan tiernamente, pero lleno de preocupacion sincera que el castaño no pudo hacer más que abrazarse al azabache, esconderse en su cuello y romper en llanto otra vez. - Me está asustando Hyung. ¿Paso algo malo? Sabe que estoy aquí para usted, estaré aquí pase lo que pase- eso rompía en mil pedazos al castaño, tenía que dejarlo, no verlo, esa era la peor tortura, por fin tenía a alguien más que lo calmara y que lo hacía sentir feliz en los momentos de profunda tristeza, que le alegre su día con tan solo verlo. Todo eso se irá en un segundo cuando suba a aquel avión que de echo partiria en dos horas,y el ya debería de estar con su padre en el aeropuerto.
- JungKook, te amo tanto - sorbio su nariz - tanto, tanto, tanto - pronunció cada palabra con cada vez más dolor, y abrazándoce más fuerte al azabache JungKook.
