Tangled - Rapunzel

Introducción

Hace millones de años, una gema muy especial cayó del cielo. Esta joya ingreso en la semilla de una flor que dormía bajó la tierra seca. La gema le dio vida a la hermosa flor y creció con rapidez.

Los visitantes de esa alejada zona, crearon la leyenda de que esa flor era un regalo de los cielos y la cuidaron como un tesoro. Pero, la flor fue descubierta por un ser extraño, este al lograr obtener los los sorprendentes poderes de la flor la escondió del mundo pues su poder eran tan inigualable que su egoísmo no se lo permitía seguir permitiendo que el mundo la contemplará y se corriera el riesgo que alguien más obtuviera su magia.

Pasaron los siglos y un reino se levantó muy cerca de la flor mágica. Era regido por su amado rey y su reina. La reina estaba esperando un bebe, pero el día de su nacimiento enfermó. Todo el pueblo se enteró de lo ocurrido y comenzaron a buscar un milagro. En este caso una extraña y mágica flor.

Mientras todos buscaban por todos lados, este extraño ser, Ultron, había escondido la flor pues sus poderes lo mantenían vivo y joven, lo único que tenía que hacer era cantar una canción.

Lastimosamente él no estaba dispuesto a cantar dicha canción, así que cada que deseaba utilizar la mágica flor, secuestraba a alguna joven del pueblo, la obligaba a cantarle a la flor y luego la asesinada. Y esa noche no fue la excepción.

El ser extraño se acercó a la flor y la sacó de su escondite. Arrastró a la muchacha y esta con temor recitó la canción que se le había enseñado en el camino —flor que da fulgor, con tu brilló fiel, mueve el tiempo atrás, volviendo a lo que fue, a lo que fue— cantó en voz baja y la mágica flor brilló, le entregó su magia a Ultron

El Monstruoso ser, sonrío y de un empujón tiró a la chica por el acantilado. El sonido de unos caballos acercándose lo alertó y huyó de ahí, sin notar que dejó desprotegida a la flor.

Cuando lo notó corrió de vuelta, pero era tarde, los soldados del castillo la sacaban dese las raíces. Ultron contempló horrorizado como su poder era alejado de él.

La flor fue llevada a palacio.

La magia de la extraña flor, sanó a la reina. Nació un saludable bebe, un príncipe, con un extraño brilló en su pecho y demasiado cabello castaño, ambos padres felices de tenerlo, lo nombraron: Anthony.

En honor a su nacimiento, los reyes lanzaron una linterna flotante hacia el cielo, seguidos por sus súbditos, el cielo nocturno fue iluminado por las linternas, para de esta  forma recordar la inmensa felicidad que les embargaba.

Por ese instante todo fue perfecto.

Luego ese instante término.

En medio de la noche, las puertas que llevaba al balcón fueron abiertas con cuidado por una figura encapuchado. Ultron se introdujo en la habitación real y se acercó a la cuna, donde descansaba el pequeño príncipe.

—flor que da fulgor— recitó la extraña creatura con una voz ronca y grave —con tu brilló fiel—

Ultron sonrió cuando vio el pecho del niño brillar al igual que su cabello. Sin temor alguno corto uno de los mechones y este rápidamente se quemó en sus manos.

El pánico se apoderó de él al mirar como sus manos volvían a ser metálicas.

Ultron al ver que no tenia opción, tomó al niño en brazos y se lo llevó, sin dejar rastro.

Durante años todo el pueblo buscó y buscó, pero nunca hallaron el príncipe. Sin saber que Ultron lo escondería en una torre muy lejos.

—trae lo que perdí, volviendo a lo que fue, a lo que fue— cantó un pequeño Tony, mientras lo que él reconocía como un robot, acariciaba su cabeza— ¿porque no puedo salir?— preguntó dulcemente el niño.

—los humanos son malvados y lo sabés, te quedarás aquí, donde estas seguro—

Tony asintió y le sonrió.

Ultron encontró una nueva fuente de su poder, y se aseguraría de conservarla por siempre. Aun así, en cada cumpleaños de su hijo, el rey y la reina continuaron lanzando las linternas, con la esperanza de que un día, el príncipe perdido regresará.