Sobre advertencia no hay engaño

225 13 6
                                    

Narra Simón

Me despierto todo desorientado y con dolor de cabeza no sabía dónde me encontraba hasta que recordé lo de anoche me levanto con cuidado de donde estoy, salgo buscando la cocina pidiendo porque uno de los chavos que conocimos anoche estén y me puedan dar algo o decir dónde puedo encontrar para poder calmar el dolor, al entrar a la cocina me encuentro de espaldas a una muchacha de cabello negro creo que es Mim y a lado de ella se encuentra Emilia a lo que doy unos leves golpes en la puerta para hacerles ver que alguien despertó y poder captar su atención

Buenos días chicas -digo con una sonrisa para cuando ellas voltean y solo veo la cara de seriedad de Mim apagando lo que sea que hay en la estufa para verme-

En la mesa hay cosas para el dolor de cabeza y creo que tenemos que hablar seriamente contigo -se acerca a mí y sé que no debo nada de temer ¿cierto?, pero mi corazón no piensa de la misma manera que mi cerebro ya que empezó a latir de forma muy rápida- por las razones que sean lograste dar acá -empieza a caminar alrededor de mi- se tu historia con Ámbar y hay unas cosas que debes de saber -le hace una pequeña señal a Emilia y se acerca a nosotros-

Número uno -dice Emilia levantando su dedo con el uno- le dices a alguien como a el piojo mexicano que está acá y no la cuentas -en cuanto dice eso empiezo a sudar frío por lo que paso antes de entrar a la cocina-

Número dos -dice Mim atrás de mí y susurrando cerca de mi oído- le dices o haces algo a Ámbar que haga que esté incómoda y no te la acabas de lo que te hare -termina de decir eso y suelta mi brazo que tenía agarrado por la espalda es increíble que una chica como ella pueda tener tanta fuerza- quedó entendido

Claro, más claro que el agua -digo y tomo el vaso con un poco de desconfianza por si tiene algo y me ve Mim soltando una carcajada junto a Emilia no sé qué les parezca tan divertido-

No tiene nada el agua no estoy tan idiota así que con permiso -dice tomando una bandeja entre sus manos y Emilia otra para salir de la cocina regresando esta última un poco sobre sus pasos-

Si sabes lo que te conviene no hagas algo que te perjudique Simón menos con Mim, que es de armas tomar más por las personas que quiere -termina de decir y sale de la cocina dejándome helado con lo último que dijo-

Buen día -veo que entra creo que es luke y me da una palmada en la espalda a lo que logró reaccionar- resaca después de todo lo que tomaron anoche -me dice con una pequeña risa a lo que veo está sacando platos supongo que para los demás ya que solo he visto a dos personas-

Solo un poco, nada fuera de lo normal -digo cuando voltea haciéndome una señal de que tome asiento a lo que hago de forma silenciosa con el fondo del ruido del traste para después ver como coloca un plato frente a mí para darme cuenta que son chilaquiles como los de mi querido México- vaya no tenía idea que comieran esto acá -le digo mientras me llega el olor y sonrió de costado-

Pues acá no es normal digo en Ámsterdam, pero a Mim le gusta y sabe cocinar así que cuando ella viene desayunamos esto o alguna otra comida mexicana -me dice colocando un jugo de naranja a lado de mi plato para después sentarse enfrente de mi- y pues es bueno no nos hace extrañar tanto nuestra tierra así que es un plus -ríe con lo último para empezar a comer y yo igual notando el sabor de México y su lado picoso que lo caracteriza-

Oye te puedo hacer una pregunta -le digo un poco inseguro con lo que diré respecto a ella solo espero no ocasionar problemas-

Claro suelta que es lo que ocurre si puedo ayudar encantado -dice tomando de su jugo

Es que digamos que Sara mí me advirtió sobre ámbar -digo con cautela tomando un poco de jugo para aclarar mi garganta y mis ideas para poder seguir- me dijo que si hacia algo que la lastimara no me la iba a acabar así que quiero saber si debo de temer por mi vida o no -digo mientras lo veo con un poco de esperanza que me diga que está jugando-

Buscando nuestra felicidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora