Un día antes de su competencia, ella me pidió tres deseos: Primero, quería contar mangos, cosa que hicimos ese día dos veces, y que será un bello recuerdo que no escapará de mi mente jamásSegundo, quería un abrazo de un minuto, cosa que también hicimos (momento incómodo, la mamá miraba por la ventana).
El tercer punto no lo tengo muy claro, muchas cosas pasaban por mi cabeza en ese momento, sobre todo de la iglesia, pero me parece el más importante, sobre todo por sus gestos.
Esa misma noche nos despedimos (odio ese momento, pero lo debemos hacer por obligación). Me fui a mi casa, y tres minutos después escuché una voz en la puerta. Sí, era la de ella (podría escuchar su voz a través de cualquier cosa, y aún sabría que es ella).
No tenía ni idea de para qué era, pero solo quería mandarme a decir algo que había dicho su mamá.
"Como siempre, me acuesto en mi cama y pienso lo que hicimos durante el día".
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Momentos de una relación interminable
Ficção AdolescentePequeños pedazos de una relación que quedó grabada en fuego en la mente de su protagonista: Iván Marbello. . . . . . . . Esta historia fue creada como parte del proyecto "Todos Somos Escritores" del colegio Horizon Gimnasio Bilingüe , en octubre del...