¿Qué sucede cuando un CEO muy poderoso y popular tiene un muy oscuro secreto? Él no es solo una cara bonita e intrigante personalidad, él es todo un personaje al que hay que descifrar.
"Justo cuando creo que he aprendido la manera en que se ha de vivir, la vida cambia". – Hugh Prather
"Se encontró nuevamente un cuerpo a las afueras de Chinatown a un lado del restaurante-bar Hattori. La descripción de la chica es similar al de las chicas en semanas anteriores: cabello castaño, ojos verdes, aproximadamente unos 24/25 años. Se cree que es el patrón de un nuevo asesino en serie."
- ¿Por qué estás viendo eso tan temprano? - preguntó Jaz mientras cambiaba de canal. - ¡Oye! ¡Yo estaba viendo eso! Además, hay que mantenerse informadas. Están comentando que es muy probable que haya un asesino en serie suelto. - respondí con el ceño fruncido al rodar de ojos de mi compañera de cuarto.
Jaz y Aura son mis mejores amigas, no sé qué haría sin ellas. Jaz es un año más grande que yo, tiene 25 años y es la persona más paciente y realista del mundo. Ambas estamos estudiando en Cal State aquí en Los Ángeles, el campus no se encuentra lejos de Downtown LA por lo cual estaba perfecto ya que planeaba solicitar un trabajo de medio tiempo como interna en Kim Enterprises, la cual es la empresa más importante de marketing en todo LA.
- ¿Tan temprano y ya discutiendo? - preguntó Aura divertida. ¿Cómo describir a Aura? La mejor persona en todo el mundo, realmente no sé qué haría sin esa chica. Ella es una chica demasiado tranquila y como su nombre lo dice, con un aura que irradia paz; claro que cuando está molesta es mejor quitarse del camino. Me ha apoyado en tanto y por eso siempre le estaré agradecida. A pesar de que ella tiene 24 años al igual que yo, en ocasiones suele ser demasiado madura para su edad.
- Me está sermoneando por el simple hecho de ver noticias matutinas. - contesté rodando los ojos. - De asesinos seriales, Aura. ¡Está loca! - - Ustedes dos lo único que harán será volverme loca a mi. - dijo Aura divertida mientras se servía cereal en su tazón. - ¿Vas a ir hoy a Kim Enterprises, Tay Lee? - Sí, espero que me acepten. Realmente me vendría bien tener por lo menos una referencia aunque sea de interna en mi curriculum; sobretodo si donde fui interna es en Kim Enterprises. - Dicen que el CEO de esa empresa es muy guapo. - comentó Jaz con sonrisa pícara. - Más vale que te apures loca, si no se te hará tarde. - dijo señalando al reloj que tenemos en la pared de la sala. Al vivir en el campus de Cal State, los dormitorios no son muy grandes que digamos, pero es lo suficiente para las tres y muy completo con todas las amenidades que alguien pudiera necesitar. - ¡Mierda! ¡Se me hará tarde otra vez! - grité mientras corría al baño a ducharme lo más rápido posible. Siendo honestos, no soy la persona más puntual del mundo pero hago mi esfuerzo, lo prometo.
Al salir de la ducha, me dirigí al armario en mi habitación, me puse un vestido azul cielo fresco, ya que es verano y hace bastante calor, unos tenis converse blancos y salí disparada por la puerta dejando atrás las risas burlonas de mis dos compañeras de cuarto. Es un alivio el hecho de que el centro de negocios de Los Ángeles no se encuentre lejos del campus, me daba una ventaja enorme, por eso amaba vivir en Cal State. Mi cita en Kim Enterprises era a las 10 am, y ya eran las 9:10; me toma un total de 30 minutos llegar hasta allá por lo cual no me daba tiempo de irme en el autobús, así que mi única y costosa opción sería tomar un taxi. Por gracia divina y porque diosito me quiere pude encontrar rápidamente uno.
Llegué y no podía creer la cantidad de rascacielos que se encontraban en esta zona.
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La vista de todos los rascacielos era hermosa, te hacía sentir como una partícula microscópica en un enorme universo. Frente a mi, pude distinguir Kim Enterprises; el taxista me dejó una calle antes así que tendría que cruzar la calle. Mientras esperaba a que el semáforo se pusiera en rojo para poder cruzar la avenida, sentí una extraña sensación... como si alguien me estuviera vigilando. Me sentí extremadamente incómoda, era una sensación demasiado fuerte e inquietante; sentía una fuerte mirada sobre mí y ni siquiera sabía de dónde provenía semejante glance. Volteé disimuladamente para ver si encontraba la fuente de esa sensación pero solo veía a personas pasar mirando sus celulares o cualquier documento que trajeran a la mano. El sonido de un claxon me trajo de vuelta a realidad, y me dediqué a cruzar la calle tan pronto el semáforo cambió.
Al entrar a la compañía, me pude percatar de que todo era realmente limpio y lujoso, me sentía como en una película de Hollywood donde la protagonista entra a una compañía importante, se da la media vuelta para retirarse y en eso choca con el guapo protagonista y se enamoran. ¡Ja! Como si eso realmente pasara.
Me acerqué al escritorio de la chica que parecía era la recepcionista del lugar y le dije que tenía una cita para entrevista de empleo de interna. La chica estaba realizando todo el papeleo cuando se escucha el sonido de las puertas abriéndose, la chica enseguida se levanta y cortésmente saluda a la persona "Buenos días Sr. Kim". Al escuchar ese apellido volteo más rápido que la chica del exorcista solo para encontrarme al ser humano más atractivo que haya visto en mi corta vida. Ese hombre emanaba elegancia y clase a mil kilómetros de distancia; para ser el CEO de una empresa importante, se ve bastante joven, le calculo al menos unos 24 años. Él se quitó sus ray ban negros y solo le dedicó una sonrisa a la chica y asintió con la cabeza; después, se percató de mi presencia y solo me miró con esos bellos ojos entre color café y miel y prosiguió su camino. Varios empleados se acercaron a él con documentos en mano y parloteando millones de cosas que yo aún no entendía. Él solo se molestó en levantar la mano y hacer un movimiento de distancia y siguió hasta el ascensor.
- ¿Señorita? - preguntó viéndome con ojos de comprensión. Seguramente no era la primera chica que se quedaba anonadada con semejante hombre. - ¿Sí? - contesté volviendo a mi realidad. Basta Tay Lee, concéntrate que esto es para tu futuro. - Puede proceder al piso 20, ahí será su entrevista. - ¡Muchas gracias!
Me dirigí al ascensor y tal como lo indicó la chica, me dirigí al piso 20. Al llegar, había otra chica, pero ella más bien parecía secretaria, se ve que tiene más responsabilidades que la primera chica. - Buenos días, me llamo Tay Lee y vine a la entrevista del trabajo interino. - dije al llegar al escritorio de la chica, quien por su gafete asumo se llama Yadira. - ¡Sí claro! - contestó la chica con una alegre sonrisa. - Usualmente las entrevistas las realiza el CEO Jung pero desafortunadamente no se encuentra, por lo cual su entrevista la hará el CEO Kim. -¿C-CEO K-KIM? - tartamudeé. - Sí, Kim Taehyung; el presidente de esta empresa.
