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La molesta luz del sol la hizo despertar, miraba con sus ojos entre cerrados a su costado donde descansaba un felino, el cual abrio sus ojos cuando la niña dejo la cama y se dirigió a la puerta. Dando pequeños saltitos logro abrirla y salir al pasillo el cual era alumbrado por el Sol, todo se veía tan calido, pero ella solo miro con ojos dormilones y camino hacia la habitación de su 'madre'.

Abrio la puerta sin mucho esfuerzo y fue recibida con una sonrisa, su madre estaba en pie y la miraba sonriendole, la niña se acerco a este y abrazo su pierna.

- ¿Qué pasa Kaile? - habló dulcemente antes de tomar en brazos a su hija, la cual solo bostezo y lo miro antes de sonreír-

- Salió el sol mamá -  respondió con una vocecita adormilada, su madre le beso la frente y acaricio su cabello respondiendole -

- Sí bebé, el Sol a salido a jugar - habló el chileno antes de caminar nuevamente a la habitación de su hija, donde la vistió y peino. - Vamos a desayunar, hoy me acompañaras a ver a tu tío Santi - habló mientras se dirigía a la cocina -

- ¿Dónde el Tío Santi? - preguntó con emocion la niña, bastaba decir que aquel hombre era el favorito de ella y le encantaba ir donde él, aunque su hogar no tuviera mucho verde - Me encanta ir donde él!  -sonrió-

El chileno le devolvio la sonrisa mientras la sentaba en la isla antes de empezar a preparar el desayuno.

El reloj marcaba las 12:30 AM, la niña iba agarrada de la mano de su madre mientras entraban al gran edificio donde se encontraba su tío y el 'jefe' de su madre, el señor Sebastián Piñera, alguien que causaba incomodidad en la niña.

El hombre al lado de aquel señor saludo con alegria y amabilidad al chileno y a la niña, en cambio el contrario saludo con respeto a ambos, Santiago guardo una risa al ver como su 'sobrina' se escondia detras de Chile ante el saludo del presidente, al parecer la niña no sentía agrado con aquel hombre.

Las horas pasaron y pasaron, la niña estaba jugando con uno de los perros policiales que cuidaban el lugar, pero pronto el perro era llamado nuevamente por un Carabinero y ella se quedaba sola, estaba esperando que su madre saliera de una reunión, podía escuchar algunos gritos dentro de aquella sala, gritos que no le agradaron mucho, en aquellas reuniones su madre siempre salia de mal humor y maldiciendo a todos los que componian el gobierno, frases como ¿por qué chucha no hacen nada bien? O estos weones piensan que la gente se alimenta de aire! Como ellos estan en sus casas culias llenas de comodidades, eran siempre algo común, aunque su madre nunca le hablaba mal aunque estuviera enojado, siempre trataba de ser amable con ella, pero a Kaile no le agradaba el que siempre molestaran a su madre, un día entro a una reunión y les grito '¡Dejen de molestar a mami!' algunos se rieron y la presidenta de ese entonces le sonrió y rió, aquella señora le caia un poquito un 1% mejor que el señor, su madre salia menos enojado con ella que ahora.

⭐⭐⭐

El chileno había salido hechando humos, pero al ver a su niña esperandolo con una sonrisa inocente hizo que su enojo disminuyera, no podia estar enojado cuando su hija lo miraba de esa manera.

Suspiro y se acerco a la niña sonriendole.

- ¿A dónde quieres ir ahora dulzura? - pregunto agachandose a la altura de la niña de 6 años -

- Quiero un helado - sonrió mostrando sus colmillos, el chileno asintió con un estraño sentimiento de tristeza al ver aquellos familiares colmillos, nego y tomo la mano de su hija para empezar a caminar -

- Entonces iremos por ese helado - respondió mientras caminaba y sonreía, olvidandose del sentimiento anterior -

¿Mamá, nunca pensaste que la Luna se debe sentir sola?


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Capitulo 1: finalizado
Palabras:654
Añadido/aclaración: ninguna

M O M [Reescribiendo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora